Lisa.
Acuesto a Lia junto a Dara a quien le sonrío. Me siento al borde de la cama y suelto un suspiro, las voy a extrañar mucho, por primera vez me siento feliz en familia de una forma que no pude experimentar antes, no somos solo mi padre y yo, somos una familia que va creciendo y eso me gusta mucho.
—¿Por qué tan callada? —pregunta Dara.
Alzo los hombros y le sonrío sin decir nada.
—Agradezco mucho que te quedaras para recibir a Lia, significó mucho para mí y para tu padre, ve que linda familia somos —completa conmovida.
—Siempre lo supe —digo con suficiencia—. No me lo perdería por nada. En unos minutos salgo al aeropuerto.
—Dong te llevará, supongo.
—No, Rose lo hará, insistió.
Me acerco a ella y beso su mejilla, la abrazo.
—Gracias por todo, Dara. Gracias por darme una hermana y darle una hija a mi papá.
A ella le va a ir mucho mejor en la vida, a ella la gente si la va a querer, no como a mí que a nadie le agrado, solo mi padre y Dara me soportan, claro y Rose, ruedo los ojos mentalmente, ya me siento abrumada por su presencia, sus desbordante amor por mí, por su obsesión con nuestra relación. La única razón por la que no termino con ella de una vez es porque viajaré y usaré la distancia para descansar de ella, me conviene mucho mantenerla a mi lado con lo que me está costando soportarla.
—Te quiero mucho, Lisa, cuídate, por favor, no dejes de hablarme por cualquier cosa.
Beso su frente y la frente de Lia, salgo de la habitación cuando bajo las escaleras, mi padre se levanta del sofá, luce nervioso, se acerca a mí y sin decir nada me abraza.
—Te voy a extrañar, hija.
Me carcajeo y correspondo a su abrazo.
—Me iré por unos meses, no me quedaré a vivir allá.
—Es lo que temo, que me escribas y digas: ¿sabes qué? Paris es lo mío y aquí me quedaré —dice imitando mi forma de hablar.
Niego y lo beso en la mejilla.
—Te dejo en muy buena compañía, cuida mucho a Lia, consiéntela por mí, cuando venga la convertiré en diabética.
—No juegues con eso —responde serio.
—Le daré todo los dulces que quiera. La vas a tener que cuidar de mí, haré lo que ella quiera, seré como el genio en la botella para ella.
Mi padre me abraza.
—¿La quieres mucho? ¿Estás feliz? —pregunta emocionado.
—Mucho, mucho —confirmo.
No sabe cuánto. Mi padre merecía tener una hija buena, normal, no como yo que salí defectuosa.
—Todo en adelante solo puede mejorar —dice con el rostro lleno de felicidad.
«Lo mejor que podría hacer es desaparecer para no arruinar la linda familia en la que se convertirán», pienso mientras camino tomada de la mano de mi padre hacia la salida de la casa para subirme al auto de Rose. Tras un último abrazo, me subo al auto, Rose besa mis labios con intensidad, el olor de su labial olor a cereza ha comenzado a desagradarme.
—Soy una masoquista, llevarte yo misma para el aeropuerto para que me dejes por tantos meses —dice con su tono pausado mientras bate su larga cabellera que desprende un olor a cítrico.
Le sonrío con falsedad.
—No es tanto tiempo, el tiempo pasa rápido —respondo.
Mientras esperamos a que abra el portón de la mansión de mi padre, ella me atrae hacia sí tomándome por el cuello con delicadeza, besa mis labios con intensidad, busca explorar mi boca y cedo, el beso se hace apasionado por unas milésimas de segundo y me separo con rapidez, limpio mi boca y le sonrío.
—Vámonos, no puedo perder ese vuelo, Rosi.
—¿Me quieres?
Ruedo los ojos mentalmente y pongo mi mejor sonrisa falsa.
—Claro.
«Ya me aburrí de ti, pero no quiero ser cruel».
Durante el camino conversamos sobre las cosas que haremos para estar comunicadas, hacemos planes que no pienso cumplir, mi padre jamás habría dejado que yo fuera sola a París de no se porque estoy en una sana relación con la buena Rosé.
Rosé atiende una llamada de un amigo mientras bajan las maletas del auto, planea comenzar un podcast con él y está ocupada con ello, me alegré cuando me contó, porque así dejará de asfixiarme. Ella es de verdad muy buena chica, inteligente y correcta, siempre hace lo que los demás esperan, es independiente y muy resuelta, divertida y alegre, algo que ya no soporto.
Miro la puerta que me separa del área de abordaje y cuento los segundos para cruzarla y dejarla atrás, es como si quisiera escapar de ella y de su positivismo tóxico, sus planes hermosos sobre el futuro y su sonrisa permanente.
Me toma por la cintura y recuesta su cuerpo del mío, busca mi boca y correspondo a sus repetidos besos superficiales, hunde su cabeza en mi cuello y suspira.
—Te voy a echar de menos —dice haciendo pucheros.
<<¿Por que?>>, me pregunto sinceramente.
Le sonrio y finjo que es mejor cortar ya las despedidas. Respiro aliviada cuando cruzo a la sala de abordaje, me siento en uno de los asientos y miro hacia la pista. Mañama a esta hora estaré en paris, él tambien está allá, él ya debe llevar una semama ya instalado, pienso que no se me será dificil ubicarlo, también me preguto si me conviene hacerlo, siento algo en mi interior que me dice que me conviene estár cerca de él y no quiero cuestionarme la razón el por la que me siento así.
Ingresó al perfil de la estúpida de la enfermera, entre su ultimas públicaciones hay una foto de ella abrazada a él, y al pie una frase cursi.
—Hola, linda ¿Viajas sola? ¿Tu novio se queda? —pregunta un chico fornido con camisa de una universidad, rie como bobo y lo vi conversando con otro dos gorilas como él, que me veian como carne asada.
—Me traje el gato que mate para poder hacer mis rituales demoniacos —digo con tono dulce y le sonrío.
Deja de sonreír, tuerce los ojos y se va.
He notado que desde hace un tiempo llamó más la atención de los hombres de todas las edades, me veo más mujer, no tan chiquilla ya, estoy buena y esa es la verdad. No se me hace facil lidiar con la atención porque siempre quiero usarlo para conseguir lo que quiero, pero con el papel que estoy jugando para mi familia, debo mantenerme alejada de problemas.
En Paris sere libre por fin.
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OBSESIÓN (Loca Por Ti 2) Taelice//Taelisa
Fanfiction¿Que pasara en Paris? segundo temporada de LOCA POR TI -Kim Taehyung -Lalisa -Fanfic Heterosexual -Contenido 🔞 -Lenguaje fuerte -