21

1.1K 182 15
                                    

El tiempo paso y un séptimo mes de gestación llegó acercando cada vez más el día en el que Benjy estaría en brazos de sus padres, pero con un nuevo trimestre de embarazo también comenzaba a acercarse el cumpleaños número 17 del omega latino, faltaban cerca de dos semanas y bueno, el alfa y él omega mayor estaban organizando una fiesta sorpresa para festejar un año más de vida de Miles con algo de ayuda de sus amigos y la madre del boricua, algo pequeño y en familia pero con todas las cosas que le gustaban al menor: empanadas de carne (este también le convenía a Miguel), tembleque, mofongo, plátanos fritos, piña colada (virgen), pastel tres leches, claro, Río quería consentir a su pequeño con un montón de comida casera de su natal puertorrico, de la que Miles tanto disfrutaba desde pequeño.

Pav, Margo, Gwen y Miles habían estado trabajando bastante en el apoyo de aquella fiesta, comprar las decoraciones, los ingredientes para la comida y las bebidas, además algunas cosas más.

Miguel no se sentía muy cómodo con la ayuda de Río pues le molestaba a su omega interno, probablemente derivado de su embarazo ya que los omegas suelen ser celosos con la presencia de otros de su misma casta durante ese proceso, a eso se le sumaba que no estaba soportando que la mujer Morales actuará tan maternal con el adolescente desde que su instinto había reconocido al niño de olor a girasol como su cachorro, sin embargo lo toleraba, después de todo era algo con lo que tendría que lidiar por muchos años más.

Ah, pero bueno, probablemente Miles no sea el único que recibiría una sorpresa, pues después de aquella charla con Gwen decidió que lo mejor era si realmente preguntarle a un omega experimentado sobre lo que quería hacer. Así que con todos los nervios del mundo en su cuerpo se aventuro a acercarse a aquel omega que era como su tutor.

- Miguel... ¿podemos hablar? -preguntó con timidez.

- claro Miles, adelante.

Pero ni él ni Hobie iban sin un plan, claro que no, era obvio que sería imposible que pasarán un par de días juntos sin que los mayores se entraran de ello, así que lo mejor era conseguir que les dieran su aprobación, o eso habían deducido, así al menos no tendrían problemas con que Miles no estuviera en casa por estar un tiempo en el lugar de Hobie. Peter ya estaba ganado, sabe que desde siempre le ha agradado el londinense, pero Miguel no era tan fácil de convencer, así que el primer paso era que el omega mexicano se sintiera respetado, aún pueden recordar la cara de sorpresa de O'hara cuando el adolescente llegó llamándolo "Señor O'hara" y no sólo Miguel.

Además había sido muy complaciente con el mayor, incluso había dejado de enseñarle a Mayday a desobedecer (solo de forma temporal) y empezó a ayudarle con sus tareas en lugar de aconsejarle ir en contra del sistema educativo, lo cual ya era un gran avance; por su parte, Miles se encargaba de hablar de lo buen chico que era el alfa, lo respetuoso que era, como es que ya estaba pensando en dejar de hacerse perforaciones a menos que sea en sus orejas, no iban a mentir para agradarle a Miguel, pero Hobart al menos quería tener el mismo reconocimiento y aceptación que tenía Margo a pesar de que ella ni siquiera era el interés romántico del boricua.

- en realidad es un tema un poco complicado y no se por donde empezar...

- por el inicio - intentó bromear.

-...fue un buen chiste - rió levemente - creo que ya estas mejorando con eso

- Peter me dijo lo mismo - admitió Miguel - ¿es más relajado ahora? Te escucho.

A decir verdad eso si lo había logrado relajar, era aún más complicado ahora que ya era el momento de preguntarlo, después de todo era un tema incómodo de tocar. Pero debía hacerlo, respiro profundo y soltó la bomba.

- ¿cómo fue tu primer celo con un alfa? - preguntó.

- ¿disculpa? - preguntó.

- solo... quería preguntarte porque confío en ti, pero.... puedes no responder.

O'hara-Parker FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora