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Hobie y Miles entraron en medio de besos y risitas compartidas al departamento, lo primero que hicieron fue cambiar su atuendo a algo más cómodo, Brown le dio algo de su ropa para que pudiera usarla, Morales no puso ninguna objeción con la idea, le encantaba usar la vestimenta de su novio, su omega interior chillaba en felicidad al sentirse envuelto en feromonas, el británico no era un caso diferente, si bien odiaba sus instintos, era más que obvio que su alfa interno se llenaba de orgullo ante esa acción. Una vez con más confort, el chico proveniente de Londres preparo algo de té de jazmín para ambos, mientras aquella bebida estaba lista la pareja no dejó de hablar sobre sus recuerdos de la infancia, momentos divertidos de su adolescencia, gustos, disgustos, ideologías, es que había mucho que ya sabían el uno del otro pero simplemente escucharlo otra vez o descubrir un nuevo detalle en el proceso era en verdad demasiado magnífico, Hobie quería memorizar todos los sucesos importantes en la vida de su omega, y Miles quería conocer toda la historia de su alfa, incluso la que quería dejar atrás allá en Londres.

Luego bebieron aquella bebida infusionada acurrucados en el sofá mientras el puertorriqueño le mostraba su sitcom favorito, el primer episodio de Boy meets world se reproducía en una pequeña laptop un poco vieja y totalmente personalizada en su exterior perteneciente al chico del East End, la luz era bastante tenue pero eso no impedía que Hobart se perdiera en la tierna mirada de ciervo que poseía su omega, intentaba concentrarse en las aventuras que Cory y Shawn tenían durante el episodio, pero siempre terminaban con la atención puesta en su novio; cuando Miles lo notó no pudo evitar reír y besar a su novio con ternura, le alegraba saber que el británico lo veía como el ser más hermoso en el planeta así como él veía a Hobart.

Luego del primer capítulo se dedicaron a seguir hablando, era como si no se cansarán de escuchar las historias del otro, Morales en algún punto decidió reproducir la playlist que tenía en conjunto a su novio, con las mejores canciones que ambos tenían para compartir solo entre ellos, el punk y el rap comenzaron a sonar a través de canciones, una a una en la sala de estar del departamento de Brown hasta que una canción con un ritmo más latino se hizo presente; el chico de las dreadlocks se apresuró a poner pausa a aquella pieza musical.

- recuerdo haberte visto bailar con tu madre durante tu fiesta de despedida - mencionó Hobie - cada movimiento tuyo era hipnotizante.

- no podía dejar de sentir tu mirada ese día - respondió Miles con una sonrisa.

- ¿era una canción como esta? - preguntó - ¿qué tal si me enseñas? Quiero poder bailar contigo, bambi

- ¿bambi? - preguntó sonriente - tienes un hábito por ponerme apodos de personajes animados.

- tu mirada es igual de dulce y brillante que la de un pequeño ciervo. - respondió - pero cuando pienso en ti también pienso en decirte solecito, porque eres tan brillante y cálido como el sol.

- detente - pidió con una sonrisa amplia, su alfa sabía como derretirlo con palabras - bien, te enseñare. Pero empecemos con algo más lento, la salsa caleña podría ser algo difícil para iniciar, la que estaba sonando justo ahora es bachata, no es más sencilla pero si tiene un ritmo más lento y fácil de seguir, al menos esta canción.

La canción comenzó a sonar otra vez, el ritmo del inicio no sonaba para nada a una canción de ese género a perspectiva de Hobie, sin embargo, disfrutaba de Miles cantando para él los primeros versos en español, aquel inicio le permitió a Morales posicionar a ambos, tomó las manos de su alfa con delicadeza, le hubiera encantado empezar pegaditos hasta bailar de una forma sensual pero debían iniciar con lo básico.

- bueno, esto es algo sencillo - anunció - empieza así, paso, paso, acento.

- ¿acento?

- mi mamá siempre lo llama acento - explicó - dice que ese detalle en la cadera es como un acento que puedes encontrar en las palabras, sutil pero notable, y que le da un sentido diferente, así lo explica ella todo el tiempo.

O'hara-Parker FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora