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— ¿Im Nayeon? ¿Cómo la actriz que le gusta a mi mamá?— Jeongyeon sabía, por supuesto, que la chica no era Im Nayeon, no la actriz, claro, porque la vió en el programa cuando era casi una niña, y esta Im Nayeon era joven, ¿De la misma edad que ella...

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— ¿Im Nayeon? ¿Cómo la actriz que le gusta a mi mamá?— Jeongyeon sabía, por supuesto, que la chica no era Im Nayeon, no la actriz, claro, porque la vió en el programa cuando era casi una niña, y esta Im Nayeon era joven, ¿De la misma edad que ella, tal vez? Algo así lograba aparentar, eso sí, la mujer era totalmente guapa, una belleza, con ojos grandes y labios bonitos, Jeongyeon se preguntó el porque le miró los labios, si ni siquiera le gustaban las rubias, no eran su tipo.

— oh vamos, eso me lo dicen seguido— siempre que Nayeon mencionaba su nombre, no había quien no mencionara a la actriz, por eso mismo se puso aquel nombre artístico, digamos que era repetitivo escuchar que era nombrado "Im Nayeon como la actri de Doramas " a demás, Bunny le daba más personalidad, ¿No?

— sí, yo no tengo la culpa de que tengas nombre de actor, señora Im.— le dijo con broma, aún recargadas en aquella barra del salón, Nayeon sonrió por la palabra "señora", sabía que había sido nombrada de esa forma solo para molestar, como juego.

— ¿señora? ¿Dónde me ves las arrugas?— movió la boca de forma graciosa para mostrar que en efecto, no había en lo absoluto una arruga.

— muy cierto, tienes buen skincare.— le concedió Jeongyeon, soltando una risa pequeña, la música de Ed Sheran seguía sonando, pero ahora ya no era relevante.

—¡nah!, no me salen arrugas.— admitió la rubia, le dió una sonrisa que Jeongyeon correspondió antes de reprimir la risa en su copa.

— oww, un rostro de bebé.— se burló Jeongyeon con toda confianza, como si fueran amigas de siempre, y no simples conocidas de hace solo unos minutos.

— ¿llevamos hablando 2 minutos y ya me estás amando, bebé?— Nayeon alzó las cejas con picardía— Primero un café, cariño.

Jeongyeon abrió los ojos de forma graciosa "cariño", que bonito sonaba de la boca de Nayeon.

— si bueno, ¿te puedo invitar un canapé?— le siguió la broma, con toda la intención de ser graciosa, ya le caía tan bien esta extraña— Es lo que están sirviendo.

— me doy por bien servida.— le dió una sonrisa de dientes, con toda la intención de coquetear— aunque yo quería comida mexicana, ¿Un mole? Sí, eso queda bien con las bodas.

— prefiero la comida china, sin duda.— Jeongyeon amaba la comida China, bueno no, solo que a cierta persona, que este momento estaba bailando con su esposo, era lo que más comía en su compañía, le traía recuerdos, de esos que perduran, de esos recuerdos que te marcan.

— es porque no has probado la comida latina, chica.— Nayeon era fan de la comida latina, adoraba toda la comida, amaba comer, pero ¡oh!, debía decir que la mexicana era siempre su favorita.

— claro que sí, he ido a tacobell— Nayeon soltó una carcajada, una nada disimulada, pero en medio de todo el ruido, no fue escuchada por los demas y solo por Jeongyeon, la castaña le acompaño la risa a la rubia, sin saber bien de qué reía.

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