Capitulo 3

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Miserable

Esa era la palabra que lo describía a la perfección en estos momentos.

Su pecho dolía mucho y a su mente solo vienen los recuerdos que vivió hace un mes al lado de la persona que iluciono a su tonto corazón.

Tenía ganas de llorar y gritar, tal vez si lo hacía la precisión que sentía en su pecho disminuiría, pero había algo que impedía que lo hiciera y eso era miedo.

Tenía miedo de que se burlarán más si lloraba.

Soporto a no derramar ni una lágrima a pesar de que las palabras que le decían iban con el objetivo de hacer pedazos su corazón, confianza y autoestima.

Bajo la mirada al suelo, porque a este punto ya le era difícil seguir fingiendo que no le dolía lo que estaba pasando.

Tampoco ayudaban las preguntas que se formaban en su mente, las cuales solo causaban que el dolor en su pecho fuera más grande.

" Por favor para acaso no vez que estoy haciendo todo lo posible para no desmoronarme.

¿Porque  me haces esto?

¿Hice algo malo y es esa la razón por la cual me estás lastimando de la manera más cruel posible?

¿O solo lo haces porque te divierte mi sufrimiento?

Acaso la persona con la que compartí tantas cosas solo era una muy bonita ilusión " 

Tan metido estaba en sus pensamientos, que se desconecto de la realidad un por momento.

Momento en el que paso algo que desató el caos en la cafetería de la escuela. Un fuerte golpe seguido de un silencio total hizo que levantará de nuevo la mirada y al hacerlo se llevó la segunda sorpresa de ese día. Su hermano había perdido todo tipo de control.

Ver a su hermano hecho una furia era algo muy pero muy malo y raro. Puede notar que todos los presentes están callados al ver que Hakuji había decidido que kyojuro sería la persona "afortunada" en ayudarlo en sacar todo ese enojo al convertirse en su saco de boxeo.

Cada golpe eran más fuerte que el anterior por lo que podía ver y a este punto su cuerpo estaba paralizado y el esta observando cómo su hermano ya no es el único golpeando a alguien.

Los gritos y comida volando por todos lados era lo que se veía en la que unos minutos atrás era una pacífica cafetería, en ese desastre siente que algo lo golpea en la cabeza, no es muy fuerte el golpe pero tras dicho impacto siente su cabello mojado y a pesar de eso siente que no tiene la capacidad de moverse o hablar.

El caos sigue y él sigue parado en medio de ese desastre, como si nada malo estuviera pasando. Siente que alguien lo toma de los hombros para alejarlo de ese campo de guerra.

Los profesores se hacen presentes, eso basta para que algunos se separen y otros dejen de grabar la pelea.

Cuando todo se calma por fin puede salir de su estado petrificado y al hacerlo lo primero que hace es ver a la persona que lo a alejado del caos. Encontrando a un joven  de cabellos largos mucho más alto que el y con una expresión seria, una mirada que podría matar a cualquiera, agradecía que no lo estuviera viendo porque su presencia era simplemente intimidante.

Pero por alguna razón se sentía seguro estando a su lado tal vez era porque en estos momentos se sentía pequeño, frágil y perdido en este horrible momento.

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Después de ser acusado y señaló  por uno que otro idiota de ser el culpable de iniciar la pelea. Aunque en parte si era culpable o bueno así era como él lo sentía, tampoco era para que exageren lo hechos y dejarán a Kyojuro como una maldita victima.

Agradecía que sus otro hermanos no tuvieran clases este día, si esto paso solo estando Hakuji no quería saber que hubiera pasado si Rui o Koyuki estuvieran presente, un escalofrío recorrió su columna vertebral al solo imaginar sus raciones cuando se enteren de lo que sucedió este día.

Y sin mencionar que casi le da un infarto al enterarse que castigo se habían llevado, definitivamente este día era el peor en toda su existencia. Lo único bueno de este día era que su hermano le había roto la nariz y posiblemente uno que otro diente.

Aunque esa felicidad no duró mucho ya que los recuerdos felices de su "relación" volvieron a su mente, haciendo que sintiera esa presión en su pecho nuevamente.

Y al llegar a la azotea solo se alejo en silencio y sacar todo su dolor de la única forma que en este momento sabía que podía y eso era llorando en silencio.

Claro que su soledad no duró mucho, pues sintió unas palmaditas en su espalda seguido de un abrazo.

Todo va estar bien, ahora es normal que duela pero tú eres fuerte y lo superarás — dijo Aizetsu mientras seguía dando palmaditas en su espalda.

Si sirve de algo, tu eres mucho para ese ojos de pescado — menciona Karaku intentando sacarle una sonrisa aunque fuera pequeña.

Mientras Urogi solo se limitaba a abrazarlo.

Tan mal se miraba para que estos dos últimos lo estuvieran consolando. De Aizetsu lo esperaba pero de esos dos que eran conocidos por burlase de las desgracias ajenas, nunca lo espero y el dolor de su pecho se alivio un poco, pero eso no evito que siguiera derramando sus  lágrimas.

Dejó de sentir ese reconfortante abrazo y al hacerlo se sintió indifenso. Pero ese sentimiento se desvaneció cuando otros brazos muy conocidos le dieron esa sensación de protección que tanto quería.

Y poco a poco el sueño se hizo presente y sabía que si se quedaba dormido no importaba porque su hermano no lo dejaría solo.

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Si encuentran faltas de ortografía por favor diganme para corregirlo y espero que esté capítulo les haya gustado.

Nota: cambie unas cositas que no me gustaron y rectifique otras.

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