𝒮ℯ𝒸ℴ𝓃𝒹 𝒞𝒽𝒶𝓅𝓉ℯ𝓇. 𝒴ℴ𝓊 𝓌𝒾𝓉𝒽 𝓉𝒽ℯ 𝓌𝒶𝓉ℯ𝓇𝒸ℴ𝓁ℴ𝓇 ℯ𝓎ℯ𝓈.

9.8K 854 178
                                    

Sanemi Shinazugawa, el pilar del viento, cualquiera que lo viera diría que le aterraba su presencia, esos ojos desquiciados y saltones, esas cicatrices impresionantes que pintaban su cuerpo, ese caracter explosivo y demenciado. Pero por alguna razón Tomioka aún pensaba que en el fondo había bondad en él, tal vez era más de lo que habría dentro de sí mismo. Tal vez había algo más.

❈•≫────≪•◦ ❈ ◦•≫────≪•❈

Habían pasado cerca de tres días desde el incidente con ese demonio, a pesar de vivir en una finca algo silenciosa, no podía evitar captar los pensamientos de las personas cuando caminaba por las calles, cuando le era encomendada una misión, por un carajo, hasta podía escuchar los de su maldito cuervo y eso empezaba poco a poco a desquiciarle (más de lo que ya estaba).

—¡Espero goce de buena salud y felicidad!— ésta vez espetó el Pilar de la Flama, Kyojuro Rengoku, saludando a su Patrón en la reunión que acababa de comenzar, siempre con el gran humor que le caracterizaba. Era tan ruidoso, pero no podía culparle, había perdido casi la audición, pero definitivamente seguía siendo alguien fuerte a pesar de su ligera discapacidad. Le agradaba, a sus palabras, era buen tipo.

—Hijos míos, espero que se encuentren bien. ¿Cómo está el día de hoy?— el sonido de calma en la voz del Patrón siempre era algo que podía traerle paz a su mente, al menos por un tiempo, estaba incluso feliz de poder ver a la persona que tanto tiempo le había apoyado.

—¡No es un día tan extravagante! ¡Hoy no ha salido el sol, Patrón!— describió a su manera el Pilar del Sonido, su voz fuerte y llamativa...

—Todos los días son hermosos... aún si se encuentran nublados.— Respondió con calma el líder de los Cazadores de Demonios, le traía paz mantener su mirada fija en él, de hecho estaba haciendo hasta lo imposible por no apartar la mirada de su Patrón, no quería escuchar los pensamientos de nadie, sólo quería algo de paz en ese momento.

«Tal vez ésta misión les disguste, pero estoy seguro que Shinazugawa y Tomioka podrán crear un buen vínculo de amistad luego de ella.»

Y la paz se fue al carajo. ¿El cara de rata? (Iguro parecía juntarse mucho con él, incluso sus insultos hacia Tomioka se le pegaban).

«Por favor... me quiero ir ya, a nadie le agrado aquí, me siento muy mal, ¿desayuné? Creo que no lo hice... mi hermana va a enfadarse tanto conmigo si sigo saltando mis comidas, Sabito se decepcionaría, ¿por qué soy tan inútil?»

Y eso ya lo empujó hacia el límite. Haber mirado un segundo a Tomioka y ya se sentía agobiado hasta la médula, ¡ni siquiera era medio día, por Dios! ¿Quiénes eran esas personas de las que hablaba? Si le preocupaba tanto que se decepcionaran de él tal vez debería dejar de ser tan centrado en sí mismo, le enervaba cada vez que lo miraba. Sintiéndose mejor que todos ahí, ¿ya se quería ir? Que se largara y no volviera.

«Serviría más muerto... así alguien que valiera la pena podría tomar el lugar que usurpé como Pilar del Agua... desearía haber entrenado un Tsuguko*, así podría dejarme morir en alguna misión y-»

Qué.

No podía creerlo, ¿el sujeto que tan superior se creía era así de inseguro? El pensar que "usurpó un lugar" ya era ir lejos... ¿pero dejarse matar? Era patético, demasiado... pero también preocupante, y mucho.

—¡Entonces así será Patrón!— la voz amable y chillona de la Pilar del Amor lo sacó de sus pensamientos, mirándola, ¿se había perdido la reunión por estar preocupándose por Tomioka?

«Esperen. El Patrón había pensado algo sobre una misión, ¿tengo que ir a una misión? También mencionó a Tomioka... ¿una misión con Tomioka? Seguro que entendí mal, ¿no es así? Sí... tuvo que escuchar mal, no podía ser, el Patrón no lo condenaría a ese martirio, ¿o sí? ¿Ya todos se van? Alguien que le explique lo que se perdió, mierda.»

—Estás muy calmado para tener que compartir misión con el cara de rata, me sorprendes, casi parece que ni siquiera escuchaste.— la voz burlona de su amigo Iguro se escuchó en su espalda, sacándolo de sus pensamientos nuevamente.

«Bueno, tal vez si Tomioka se mataba...»

Olvídalo, quedarían en desventaja contra los demonios.

—Cállate, sí lo escuché.— murmuró con un tono amargo, mirando al Pilar de la Serpiente y luego mirando a su amiga (amigo en realidad, pero es una serpiente), Kaburamaru.— Estoy procesando el puto trauma de tener que soportarlo.

Por mientras, Tomioka estaba ligeramente feliz, aunque su serio rostro no lo demostraba, Sanemi no rechistó cuando los emparejaron a trabajar juntos en una misión, ¡eso era bueno! Tal vez podía intentar ser amigos... o al menos no llevarse tan mal. Si su rostro fuera tan expresivo como sus pensamientos, definitivamente tendría una sonrisa de oreja a oreja.

Bueno, lo que sí era cierto es que tendrían un gran desastre por delante. Sólo que ellos no lo sabían.

❈•≫────≪•◦ ❈ ◦•≫────≪•❈

865 palabras.
Espero que les haya gustado, acabé de editarlo en medio de la Velada del Año 3. Arriba Rivers. Sí señor.

🍃Diccionario de la Era Taishō🍃

Tsuguko: Sucesores de los Pilares.

ThoughtsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora