Capitulo 7

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¡HAY UN CAPITULO ANTES DE ESTE!

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Esto es cansado, trabajar cuando estas de vacaciones es frustante. Desperdiciar el tiempo libre trabajando como si le faltara dinero, dinero es lo que le sobra. Estaba obligado a trabajar en un lugar como este solo para que sus padres digan que si puede valerse por si mismo.

Aun asi debes en cuando agarraba dinero de la tarjeta de sus padres, pero no se daban cuenta.

Si fuera un dia comun y corriente, este lugar estaria repleto de gente, pero eran vacaciones y la mayoria de familias se iban a la ciudad y volvian en dos meses o incluso antes. Y este año no era la exepcion, todos se habian ido y solo algunas pocas personas se quedaron, como él.

Deja la caja cerrada y regreso a la cocina con Cooper, el cocinero. Gracias a él tenian pizza por que si lo dejaban en manos del chico el negocio estaria en quiebra, apenas sabia hervir el agua, y hacer una pizza seria lo mas desastroso que ha hecho, la primera vez que intento le termino haciendo un agujero a la masa, luego lo dejo demasiado tiempo en el horno y se quemo. Desde entonces ya no volvio a tocar la masa de Cooper.

—No hay gente, tu crees que pueda irme a casa?—le preguntó temerosamente, aunque Cooper era buena gente y amigable, en la cocina era todo lo contrario, como él decia la pizza es su tesoro y no queria que nadie tocase su preciado trofeo y menos las maos resbaladisas de chico. Antes de poner otro pie dentro de la cocina se puso la gorra y el cubre bocas que tenia en su bolsillo.

—Alejate niño, y vuelve a tu puesto. Que no haya gente no quiere decir que tengas tu dia libre —le respondio Cooper mientras que ponia la pizza que nadie pidio en el horno.

La canpana de entrada suena anunciado que alguien entro. Cooper le miro con burla en el rostro a casi nada de soltar la peor carcajada del mundo.

—Viejo calvo —susurro desapareciendo por la puerta corredisa.

—TE ESCUCHE!

Era un chico, de estatura promedio aun que seguia siendo mas alto que él. Él se gira cuando escucha su voz pidiendole la orden. Nunca le habia llamado la antencion un chico. Pero ese chico tenia algo extraño, su trasero, lo vio irse con una niña luego de que le entregara su orden y no pudo evitar no verle el trasero. Aunque tambien sus ojos le llamaron la atencion y parecia que a él tambien le gustaba. Lo confirmo cuando el chico se atrevio a pedirle su número. No le iba a negar a nadie su numero, es bueno conocer gente nueva.

 No le iba a negar a nadie su numero, es bueno conocer gente nueva

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