En un pequeño pueblo donde los secretos acechan en cada sombra, un misterioso asesinato sacude la tranquila vida de sus habitantes.
Cuando un alumno nuevo llega a la escuela local, despierta la curiosidad de una chica decidida a descubrir la verdad...
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LETTANY
—¿Y bien? ¿Ya descubriste algo? —pregunto mientras que caminaba por los pasillos.
—Acabo de salir del armario de un conserje, déjame descansar 5 minutos mujer. Por favor.
—Esta bien. Pero ni bien sepas algo avísame. Tengo clases en cinco minutos.
Cuelga el telefono sin esperar respuesta desde el otro lado de la línea. El chico al que tanto veía estaba por entrar a un salón que estaba totalmente prohibido por los estudiantes a menos de que seas autorizado para eso. Pero él no parecía estarlo. Camino a pasos largos debatiéndose entre entrar o no, pero el ruido de algo cayéndose desde dentro del salón hace que entre lo mas rapido posible.
—Hay alguien aquí? —pregunta con nerviosismo en la voz.
Vas a morir.
El suspiro cansado y profundo le pega de golpe en la nuca, poniendole la piela de gallina instantaniamente.
—No deberías estar aquí —trato de girarse para encarar al chico pero fue mas rapido y la sujeto desde atras impidiendo su movimiento— No te gires, sal por donde has entrado y piérdete de mi camino. No creo que quieras que se enteren que estabas por aquí. A comparación tuya pareces ser de las chicas que no matan ni una mosca.
Era la primera vez que escuchaba su voz, fuerte y grave pero a la vez hostil como si no le importara que fuera capaz de lastimar a alguien.
—Vete de una vez —demanda haciendo presión en su nuca. Tan rápido como la suelta ella gira pero no logra alcanzar a verlo. El ya había desapareció como por arte de magia.
¿Que tan fuerte podia ser para dejar su nuca con un ardor indescriptible? En serio, aparte de tener una voz tajante que podria poner a cualquiera a llorar, tiene la fuerza de leon en las manos.
El sonido de su telefono hace que pierda el interes por el dolor.
—Dios mio... —suspira viendo el nombre en el telefono— ¿Como se te ocurre llamar ahora?
—Oye tu me pediste que te llamara —se queja su amigo en la otra linea, a postaria que estaria haciendo un mojin con los labios— pero si no quieres saber nada, pues nos vemos en la salida, chau.
—No, no. Esta bien, solo me tomas desprevenida. Cuentame que descubriste —dice mientras camina hacia la salida con la mano en el pecho, tratand de controlar su respiracion.
—Pues que.., oye no deberias de contestarme, acaso no estas en clase? Y tu voz se escucha agitada —la interroga— ¿Que has hecho, India jones?
—Ya te contare, y justo ahora iba al salon. Y No me llames asi!
—Bueno esta bien, te veo en el almuerzo, lo que encontre es algo q no puedo estar hablando por los pasillos. Nos vemos en mi casa.
Guardo el movil en su bolsillo trasero y entra al salon donde debio estar media hora antes.
—Que se lo ofrece señorita?
Frunce el seño desconcertada, acaso este no era su salon? —La clase comenzo hace mas de media hora, solo nos queda minutos para terminar. ¿Le parece bien llegar a esta hora?
—Lo siento, estaba en...
—Se queda fuera de clase, lo siento pero no puedo hacer excepciones —le respondio agresivamente el bajito bigoton, cerrandole la puerta en la cara.
Sin nada que mas que esperar a que sonara el tiembre, se dejo caer a un lado de la puerta.
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—Te desblosquearon el telefono? —pregunto curiosamente.
—Si. Tuve que pasar por un inconveniente pero si.
—Por donde comenzamos?
—Su galeria, debe de tener algo raro. Comenzemos por ahi.
La galeria de fotos estaba completamente llena de albumes que separaban las fotos por nombres. Pintor, IVTN, SIN NOMBRE, CASA ROJA, DOCUMENTOS. No podian decir cual fue el que les llamo mas la atencion por que todos los nombres eran muy extraños, peor el dichoso sin nombre .
Entraron al primero. Pintor. Habian fotos que estaban bloqueadas por alguna razon, y habia otras que estaban a libre disposicion, que para ellos no significaban absolutamente nada. Las fotos mostraban a un simple pintor de espaldas haciendo lo que cualquier pintor hace. Algunas mostraban los lienzos pintados.
Entraron al siguiente, Casa roja.
Lo que habian pensado que era resulto serlo. Varias casas rojas de distintos lugares, algunos eran la misma casa el mismo color pero en distinos sitios. No mostraban nada mas. Cien fotos de lo mismo.
El tercer album, IVTN. Una sola foto que se podia ver, una de cincuenta fotos restantes. Una foto que mostraba la busqueda de alguien en el periodioco, de alguien que habia muerto hace cuatros años.
Documentos, el cuarto album no dejaba ver ninguna foto. El quinto album que no tenia un titulo mantenia fotos de varios lugares, parecia un album comun que cualquier persona tendria en su galeria luego de haber viajado. Pero entonces el album no solo tenia eso, tambien habia fotosde de alguien. Una mujer de cabello muy rubio, su cara no se veia en la mayoria de fotos y en algunas solo se veia la mitad de su rostro.
—Ahora ya sabes que de verdad oculta algo —susurro dejando el telefono en manos de su amigo quien estaba quieto, callado—. Tenemos que hacer esto rapido Axel, él no se ha dado cuenta todavia que su telefono ha desaparecido o seguramente si pero no ha hecho nada.
—En sus mensajes... debe de haber algo.
—Lo mas seguro es que este bloqueado, pero no perdemos nada.
Para la sorpresa de ambos, los mensajes no estaban bloqueados, al contrario. No habia ningun mensaje, nisiquiera en los archivos, es como si estuviera preparado para que en caso de que le roben ,como lo hizo Axel, no se pudiera encontrar nada.
—Sera mejor que devolvamos el telefono. No hay nada y si Kayden es de los que usan la cabeza reportara su celular perdido.
—Lo devolvere mañana. —agarro el telefono y lo escondio debajo de sus almohadas.
—Ya sabes que ocultan algo, tienes que mantener distancia como lo has hecho. No te involucres con el —le advirtio con el dedo acusador, casi a nada de que le toque la punta de la nariz— no quiero "peros" alejemonos de estos asuntos y sigamos con nuestra aburrida vida gris, y yo... yo tendre que olvidarme de él. Supongo.
No podian, ni ella ni el querian alejarse. ¿Por que les pasaba estas cosas? Acaso hicieron algo mal encontra de alguien para merecer una vida donde no pudieran vivir como unos adolescentes normales, sin secretos ni problemas donde probablemente terminarian muriendo.
—Si nos acercamos mas... no vamos a regresar, ¿lo entiendes? No podemos.