𝗔𝗺𝗻𝗲𝘀𝗶𝗮╰ ˢᵘⁿᵍʲᵃᵏᵉ

eight

Al día siguiente Jake recibió el comunicado acerca de la muerte de Sunghoon por parte de Jungwon, quien con todo el pesar y su voz temblorosa logro hacerlo llegar. Al escuchar esas simples pero desgarradoras palabras, colgó el teléfono y cayó al piso, empezando a llorar mientras se autolesionaba con sus uñas. Sunghoon el amor de su vida, estaba muerto y era su culpa.

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Jake había llegado a su casa después de su cita al parque con Sunghoon, su bonito novio. Tenía una enorme sonrisa que nada ni nadie podría quitarle, no hasta que entró a casa.
En ella se encontraban sus padres y un chico que pocas veces había visto, sino mal recordaba su nombre era Lee Heeseung. Era hijo de alguna de las amigas de su mamá, no sabía con exactitud cual pero en realidad no le importaba.

Saludo por educación y estaba por dirigirse a su habitación a gritar como colegiala enamorada por su estupenda salida con Hoonie, como solía llamarle. Siendo detenido por su padre quien con una voz imponente comento que necesitaba hablar con él. Así fue, tomó asiento frente al sofá delante de sus padres y espero a que el mayor de los Shim hablara.

-¿Dónde has estado? Con Heeseung te hemos esperado toda la mañana y parte de la tarde, sabes que odio tener que esperar.

-Perdón padre, salí con Sunghoon al parque. Si me pusieras un poco de atención lo hubieras sabido.

No era sorpresa para sus padres que Jake saliera con ese tal Sunghoon. Aunque a sus papás no les agradaba ni un poco qué su hijo saliera con alguien así. Para dar un contexto, la familia Shim es una de las más reconocidas a nivel nacional, por lo que ya se dará una idea de porque no les agrada que su pequeño este quedando con un chico de esa clase. A Jake no le importaba, para nada, él amaba a su tierno novio y cada que podía gastaba su dinero en obsequios para el castaño, aunque este le repita qué no lo haga.

-No me gusta que me hables con ese tono Jaeyoon. Seguro tu noviecito te ha estado mal influenciando de esa manera.

-No, no lo ha hecho, son ustedes quienes sí. Pero no quiero meterme más en ese tema, arruinará mi buen humor. ¿Podrías decirme de que se trata todo esto? y ¿qué hace él aquí? señaló a Heeseung, quien no había mencionado nada desde que llegó.

-Como sabrás la familia Lee está a nuestro nivel y una alianza con ellos nos beneficiaria en mayoría. Entonces, mientras tú no estabas, conversamos acerca de como llevarla a cabo y se decidió que Heeseung va a comprometerse contigo. Y antes de que intentes negarte, sino lo haces destruiré el futuro de ese jovencito Sunghoon. Así que, piénsalo muy bien hijo. Sabes que solo lo hacemos por tu bien.

Si decir una palabra más, Jake salió de aquella gran casa, odiaba qué sus padres fueran así, tan arrogantes y manipuladores. Odiaba el poder que tenían sobre todos, incluyendolo a él. Estaba enojado, todo era una mierda, desearía que sus padres no tuvieran todo ese poder qué ahora tienen.

Esa noche llegó a casa de Sunghoon sin avisar. Solo necesitaba ver a su novio y se sentiría mejor, siempre ha sido así. Claro que su novio se sorprendió por su visita pero no le negó la entrada. Sin decirle nada sobre la conversación con sus padres, se dejo consolar por su novio, y así como lo había hecho antes se entregó a él en alma y cuerpo. Una velada llena de caricias y besos fugases que le hacían saber al otro todo lo que sentían, siendo esta la última vez que lo haría.

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Jake no logro pasar ni una noche sabiendo que su lindo castañito ya no estaba. Tal fue su tristeza y frustración lo que impulso a que esa misma tarde decidiera acabar con su miserable vida. Esperando que alguna otra vida, pudiera reencontrarse con Sunghoon, y que esta vez no haya ningún impedimento para que ellos puedan amarse con locura.