Cuevas.

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La noche había llegado, era oscura, fría y aterradora. Ark sentía el frío rondar por todo su cuerpo, mientras que los demas animales pequeños desaparecían por todos los arbustos. Ark se acostó a dormir. Se sentia horrible, ya que quedo exhausto después de ser atacado por un puma enorme y veloz. Se acostó en su cama y empezó a dormirse poco a poco, aunque le costó un poco tratar de dormir, por que no quería tener el mismo sueño, otra vez. Se intento dormir hasta que terminó profundamente caído.

Estaba en su casa, totalmente aburrido de lo feo que era el día. Había bastante lluvia, tanta que hasta parecía haber una gotera. Agarro un pequeño canasto y lo puso abajo de el techo, lo que soluciono el problema. De todos modos, no le gustaba nada el día de hoy. Era bastante lluvioso, nublado y aburrido. Derrepente, oyó un extraño rugido provenir a lo lejos. Se levantó de su silla y se preparo para atacar. Su corazon aceleraba bastante rápido. Ark lanzó unas piedras a los arbustos y se puso detrás de una roca. No oyó nada, pero siguió revisando los demás arbustos que había frente suyo. Reviso el primer arbusto, el cual tenía algunas moras y frutas en se alrededor. Vio un poco más en el fondo de el arbusto y no había nada, solo unas pequeñas lombrices. Reviso el segundo arbusto. Sacó su lanza y empezó a pinchar un poco el arbusto, hasta que de repente, sintió algo clavándose dentro de la lanza. Sacó la lanza y vio a una rata empalada. La sacó y luego la tiro a él suelo. Movió un poco las hojas de el arbusto para poder ver más adentro. Pero las ramas de las hojas eran tan afiladas, que se corto mucho la mano. La mano le sangro un tanto, pero por suerte conservaba algunas de sus vendas, así que las uso. Llego a la conclusión de que no podría haber ningún animal grande ahí adentro, ya que las ramas eran tan afiladas, que el animal podría cortarse en cuestión de segundos. Volvió a revisar el tercer arbusto, el cual tenía muchas moras sobre las ramas. Agarro una piedra y la tiro ahí. Oyó que se rompió contra algo. Agarro su lanza y la avento hacia el arbusto. No oyó nada moverse a los alrededores, así que vio los arbustos. La lanza solo choco contra el suelo y la piedra se rompió debido a la fuerza a la que el la tiro. Trato de volver tranquilo a su casa, pero cuando estaba a punto de volver a su casa, se entero de que ya no estaba, como si hubiera desaparecido. Trato de buscar su casa por todas partes, pero solo había un paisaje nuboso con muchos árboles. Siguió buscando, hasta que encontró una extraña cueva a lo lejos. Entro cuidadosamente a la cueva, asegurándose de que no haya animales peligrosos. Se sentó en una roca por un rato a esperar a que se vaya el mal clima, el cual estaba acompañado de fuertes truenos y relámpagos. Parecía que había perdido completamente todo el camino de regreso a casa, ya que el camino era muy nubloso y hasta le hizo creer a Ark que era uno nuevo y desconocido. A lo lejos de la cueva, se escucho un rugido, el cual parecía haber sido provocado por un oso. Ark agarro su lanza y empezó a apuntar hacia todos lados, en busca de una sombra o unos pasos. Empezó a oír unas largas pisadas, que se hacían cada vez más grandes con el paso de el tiempo. La cueva era realmente extensa, tanto que parecía un laberinto. Por un momento, las pisadas de el oso dejaron de sonar. Ark se tranquilizo y pensó que por suerte el oso se había ido y ya estaría durmiendo muy profundamente. Ark aprovecho eso y trato de escapar de la cueva. Camino lento para no despertar a el oso. Dio unos pequeños pasos para poder hacer menos ruido. La cueva era oscura y bastante aterradora. Ark empezó a oír los pasos de unos pequeños animales, así que siguió caminando lentamente. Varias ratas salieron de los agujeros. Ark solo las ignoro. Se empezó a frustrar bastante, debido a que ya solo caminaba como por 24 minutos. Los minutos se hicieron horas y las horas se hicieron días. Estaba muy hambriento y no había encontrado la salida. No comió nada como en 2 días, lo que ahora que uno lo dice, no parece mucho, pero lo es. Empezó a marearse mucho. Trato de dar unos pequeños pasos hacia adelante, pero el mareo era mucho más fuerte de lo que el pensaba, siquiera podía abrir bien los ojos. Intento no cerrar los ojos y seguir adelante, pero era imposible. Cayó a él suelo en cuestión de segundos. Despertó y estaba tirado en el suelo, sucio. Se levantó de el suelo, realmente agotado. Vio a una rata pasar en frente de él, a lo que, sin pensarlo 2 veces, se enfureció y no dudo en agarrarla. Tomo a la rata acorralada y poco a poco la empezó a crujir con los dientes. La sangre mancho la cueva. Los dientes se llenaban de pedazos y tripas. Ark se terminó de comer a la rata, enteramente. Luego de eso, empezó a sentir una sensación horrible en el estómago, lo que lo hizo vómitar todo el suelo. Empezó a correr desesperadamente por toda la cueva, hasta que al fin choco con algo. Se levantó de el piso y vio 2 túneles en frente suyo. Sin pensarlo, se fue por el derecho. Corrió tanto, que al fin llegó al final de el túnel. La pesadilla terminó. Estaba en una montaña extraña, la cual parecía estar deshabitada. Corrió para encontrar su casa, pero solo habían escombros y restos de huesos de animales. Huyo de la montaña para encontrar su casa, pero solo encontró otra cueva más. Entendió que no había salida, así que, desesperado, se tiro de los acantilados.

Mientras caía, vio toda su vida pasar ante sus ojos, como si fuera la última vez en la que fuera a ver como era su vida pasada antes de ese suceso que le quito todo

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Mientras caía, vio toda su vida pasar ante sus ojos, como si fuera la última vez en la que fuera a ver como era su vida pasada antes de ese suceso que le quito todo. Poco a poco, se iba acercando más y más al suelo, hasta que finalmente sintió su cuerpo estrellar completamente. Vio una pequeña luz después de haber muerto, así que camino hacia ella. Cuando al fin alcanzo a tocarla, oscuridad.

FIN.

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