Ark

Mamut

Mientras Ark descansaba en su cueva. Comia tranquilamente la carne del lobo que había cazado para hacerse un abrigo. Unos grandes ruidos lo despertaron, los cuales sonaban grandes, y a 1000 metros. Salió de la cueva para ver lo que pasaba. Cuando salió, vio a una sombra gigante pasar a muchos metros de el la nieve no lo dejo ver mucho más allá, pero, según el suponía, la sombra enorme sombra y los pesados pasos que pasaron cerca suyo eran los de un mamut. Se decidió acercar sigilosamente para comprobar si era un mamut el que se movía a esos pasos, a lo que se arrastro por la nieve para no ser visto. La gran altura del mamut y sus enormes pasos eran sorprendentes para un ser humano actual, aunque Ark no estaba realmente impresionado del animal, debido a que ya lo había visto muchas otras veces en su vida. Mientras estaba contemplando al animal, otros grandes pasos se escucharon atrás suyo, lo que le hizo darse cuenta de que el mamut, como la mayoría de veces, no venía solo. Había otra manada de 7 mamuts caminando atrás del mamut. Ark se movió un poco entre la nieve para no ser aplastado por uno de los mamuts. Después de no escuchar más pasos de mamuts atrás y al lado suyo, se levantó de la nieve. Vio a todos los mamuts pasar adelante e inspeccionó a algunos, dándose cuenta de que en realidad era un grupo de mamuts machos, lo cual era lógico, por que ellos nunca seguian a las hembras experimentadas y se iban a por su cuenta. Por un momento, se le ocurrió que sería buena idea montar a alguno de los mamuts, a pesar de lo peligroso que sonaba el reto. Se arrastro unos metros por la nieve y se trepó a uno de los árboles. Observo a los mamuts avanzar. Los pasos de los mamuts eran grandes y se oían a los alrededores, lo suficiente como para espantar a cualquier animal de los alrededores. Ark se sentó en una de las ramas de los árboles y observo a los mamuts avanzar entre la nieve y el frío. Ark miraba con tristeza al grupo de mamuts machos, quienes ya tenía previsto que iban a morir por el frío o quien sabe, recordandole a lo que le paso a su grupo. Siguió viendo al pequeño grupo de los mamuts avanzar para emigrar, lo cual le  pareció muy bien para ellos en vez de lo que hacía el. Pensó que, de todos modos, aunque logre sobrevivir al invierno, lo cual era imposible, seguiría estando completamente solo y abandonado. Siguió pensando y pensando, hasta que se dio cuenta de que el grupo de mamuts se estaba alejando. Tratando de seguir el ritmo de los mamuts, se bajo del árbol cuidadosamente y volvió a arrastrarse entre la nieve, manteniendo el mayor silencio posible. En un momento un sonido empezó a sonar. Ark rompio una rama accidentalmente mientras se arrastraba por la nieve. Uno de los mamuts volteo para ver que era el sonido, pero no vio nada a su alrededor, por lo que volvió. Ark se intento esconder abajo de la nieve, tratando lo más posible de hacer que los mamuts no lo vean. Una vez que el mamut siguió el camino, Ark salió de su escondite y empezó a arrastrarse nuevamente directo hacia el mamut. Los mamuts seguian su rumbo, sin darse cuenta de que había un neandertal siguiéndo al grupo. Ark seguía arrastrándose, con la duda de por qué estaba siguiendo a un grupo de mamuts a quien sabe donde y posiblemente que van a causar su propia muerte, pero siguió andando e intento hacer el menor ruido posible. En un momento, Ark escalo de vuelta un árbol y espio a los mamuts avanzar, escuchando los pasos enormes y graves de los mamuts. Los mamuts seguian su rumbo hacia la emigración, no sabiendo que Ark los estaba espiando a lo lejos. Ark seguía contemplando a los mamuts marchar y cuando los mamuts ya se estaban alejando, decidió bajar del árbol y volver a arrastrarse cuerpo a tierra en la nieve. Se arrastraba, llevando más de 10 minutos así, sin saber por qué. Uno de los mamuts empezó a sentarse, tratando de descansar. En ese momento, a Ark se le ocurrió subirse arriba del mamut, montandolo. El mamut se levantó y empezó a correr desesperadamente, perdiendo al grupo y quedándose solo. Ark se sujetaba del mamut e intentaba agarrar el pelo del mamut con fuerza, tratando de no despegarse de el. El mamut seguía corriendo con todas fuerzas, llendo de dirección a dirección para quitarse a Ark de encima, pero fallando en el intento. Ark se aferraba al mamut con todas sus fuerzas, intentando no perder el equilibrio y no caer. Entre más tiempo llevaba Ark montando al mamut, el mamut más tenso se ponía. En un movimiento brusco del mamut, cayó accidentalmente al río y se hunde en lo profundo. Ark abre los ojos después de hundirse y sale a la superficie para tomar aire. En un momento, ve al mamut desmayado en el fondo del río y vuelve a lo hondo para rescatarlo. Lo levanta del estomago, con una enorme dificultad. A mucho esfuerzo, nada con el mamut encima para salvarlo, sintiendo su espalda crujir por el duro peso. Después de mucho tiempo, logra llevar el mamut a la superficie sano y salvo. Sale tomando aire y se acuesta en una roca, totalmente adolorido. Mira al mamut desmayado y hace una leve sonrisa, para acto seguido levantarse y largarse del lugar. Unos minutos después, el mamut recupera la conciencia y mira a su alrededor, sin encontrar una manada. El mamut se larga del lugar un poco desconcertado. Ark, a lo lejos, mira al mamut irse, con una sonrisa en su rostro, feliz por salvar la vida de alguien. Vuelve a su cueva y se acuesta para descansar, orgulloso de sí mismo. Mientras estaba tranquilo y oyendo la nieve afuera de la cueva, el pensamiento de que había sobrevivido más tiempo al invierno de lo que cualquiera de su grupo lo haria rondaba en su cabeza. Empezó a suspirar y seguir descansando.

FIN.