- ¿Salir de mi zona de confort?
- Todo debemos salir de ahí alguna vez, nuestro corazón y la mente deben darse cuenta de que no sólo hay un camino.
- ¿Y si yo quiero seguir el tuyo?
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- ¿Te puedes creer que Eric me ha dicho que el sevillano tampoco sabía que Alya era familia de Adri? - pregunta mi cuñada divertida mientras se monta en el coche - que por cierto, ¿dónde está míster central?
- Hoy ha sido la cita que había pedido Ansu en su casa - respondo antes de encogerme de hombros - hace un rato lo ha llamado y ha ido a ver si todo seguía correcto o algo de eso me ha dicho, vete a saber que habrá hecho el señorito.
- Le vamos a tener que poner a la psicóloga un cartelito que ponga "Propiedad del señorito Bernabe" - bromea mi cuñada y yo asiento con mi cabeza mientras se pone el cinturón - y añadirle en chiquitito para quejas, llamar al de Italia que seguro que está aburrido en su soledad.
- No cave duda, porque los hombres parece que no se dan cuenta de las cosas hasta que no las tienen justo en frente - protesto y ella me mira a los ojos - hay que decir que tu hermano medio se libra en eso.
- ¿Te recuerdo que todavía no se ha dado cuenta de lo de Torre y tengo medio armario lleno de su ropa? - interroga y yo levanto mis manos del volante - que se diera cuenta de tus indirectas no significa que siempre sea así de listo el colega.
- Por eso he dicho, que medio se libra.
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- ¿Por qué las prisas con el viaje? - cuestiona el central y yo suspiro antes de girarme hacía él - nunca te ha gustado viajar y no es que precisamente te fueras feliz a Inglaterra cuando toco mudarse.
- Adri tiene las pruebas de revisión mañana - respondo antes de suspirar - no le ha dicho nada a mis padres y no quiero que esté solo aunque ya sabes que con lo cabezota que es, seguramente me toque pelearme con él para que me deje acompañarlo.
- Creía que después de la operación no tenía porque volver a preocuparse por eso - comenta con su mirada fija en la carretera - ya sabes como es tu hermano, cada vez que intento hablar con él sobre el tema se me cierra en banda y no hay manera de que me diga nada, y como tampoco lo podemos emborrachar para que abra la boca es como un maldito círculo vicioso del que no soy capaz de salir.
- Sigue con su misma rutina de siempre de no abrirse a los demás para no cagarla por si comete algún error en confiar en alguien que no debe - susurro fijando mi mirada de nuevo en el paisaje - me cuesta admitir que alguien como mi hermano es el que más ayuda psicológica necesita y que no tengo idea de como hacer para poder ayudarlo sin ni siquiera deja sacar el tema aunque todavía le queme por dentro.
