BACK TO BEACON HILLS

CAPITULO 7: AMENAZA ELIMINADA

Todo fue muy silencioso y muy rápido, lo peor era que nadie se lo esperaba.

***

De la puerta trasera se ocuparon el grupo de cazadores, los Calavera. Todo estaba demasiado tranquilo. Y antes de poder entrar tres rakshasa nos acorralaron. Scott, Malia y Liam aprovecharon para entrar dentro, Scott había obligado a Stiles proteger a Lydia que estaba en el coche. Mientras Kira luchaba con la katana y Parrish y yo disparábamos lo cual no parecía importarles a los rakshasa; ellos blandían sus espadas impidiendo que ninguna bala les rozara. El rakshasa que esquivaba las balas de Parrish tardo en darse cuenta de que un grupo había entrado y mientras Parrish recargaba la pistola desapareció dentro del almacén. Me gire a ver cómo iba Kira y fue justo entonces cuando el rakshasa que tenía delante clavo su espada en mi abdomen, pude notar como la espada me atravesaba el cuerpo, llegue a notar como la punta de la espada salía por el otro lado de mí. Y luego desaparecieron los dos, tanto el que me acababa de atacar como el otro. Yo caí al suelo con unos estrepitosos gritos a mí alrededor. Todo se había vuelto borroso, Parrish sujetaba mi cabeza y Kira apretaba con sus manos la herida para que no saliera más sangre. Stiles y Lydia habían salido del coche y también estaban junto a mí.

-Ir dentro, tenéis que ayudar a los demás. -dije entre susurros. Me dolía mucho.

-Pero... -dijo Parrish.

-Ir, nosotros podemos quedarnos aquí. -dijo Lydia. Stiles se sustituyó por Parrish, y él y Kira entraron preocupados al almacén. Yo me moría. Lydia presionaba la herida pero aun así no dejaba de salir sangre.

-¿Por qué no te curas? -pregunto Lydia preocupada.

-Larga historia. -dijo Stiles alzando las cejas. "¿Acaso no se acordaba del grito que pego mirándome?" pensé.

-Suavizarle mi muerte a Derek. -dije.

-Amanda escucha, no te vas a morir. -contesto Stiles. Y fue entonces cuando se apagó todo.

***

"¿Qué narices me está pasando?" No estaba muerta, no claro que no, esto era peor. Algo vibraba dentro de mi cuerpo. Me ardía la sangre. Era horrible.

Y

DESPERTÉ.

Abrí los ojos y corrí hacia el interior del almacén. Todo. TODO era distinto. Debía de estar en mi forma híbrida porque veía con mis ojos de lobo. Oía diferente, olía diferente, pisaba diferente, sentía diferente. Salte encima del primer rakshasa que me encontré y le desgarre la garganta, supuse que por ello mis ojos cambiarían de color pero creo que no era inocente así que puede que no cambiaran de color. Tras acabar con su vida, corrí hacia otro y luego a otro, y al último que tenía agarrado a mi hermano necesite la ayuda de Scott y Malia, esta vez fue ella quien acabo con su vida. Una sacudida hizo que volviera a mi estado, fue entonces cuando me di cuenta había adoptado la forma completa de lobo. Parrish se quitó rápidamente la chaqueta y me la dio para que me cubriera, al parecer me había quedado desnuda. Corrí hacia Derek para abrazarlo y luego salimos del almacén, los Calavera se hicieron cargo de los cuerpos de los rakshasa y de uno que habían cogido vivo.

Derek se apoyó en Scott y en Parrish que le ayudaron a caminar.

-Te estabas muriendo. -me dijo Stiles, caminando hacia mí. -Te habíamos metido en el coche y al rato ya no estabas.

-Digamos que morí y eso desencadenó la transformación en lobo. -contesté.

-En lobo completo, como yo y como nuestra madre. -dijo Derek.

-Me alegra que sigas viva. -dijo Stiles sonriendo.

Nos subimos a los coches y cada uno fue a su casa. Parrish nos dejó en casa y me ayudo a subir a mi hermano, las heridas de Derek estaban tardando en curar. Me quede un rato con él en su casa.