𖦹 𝐁𝐥𝐮𝐞𝐛𝐞𝐫𝐫𝐲 𝑬𝒚𝒆𝒔 𖦹 ʸᵒᵘⁿᵍ ᵐⁱᵏᵒ

✩ 𝐂𝐨𝐧𝐨𝐜𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨𝐧𝐨𝐬.

Estaba completamente paralizada en la entrada del salón luego un viaje en auto que era, supuestamente, "para ir por helado" y luego de haber hecho una escena de gritos, llanto y pataletas para no entrar a ese lugar, de la mano de mi mamá veía a otros niños correr y saltar por todos lados, jugando y divirtiéndose, cuando de la nada algo me llama la atención.

-Hola nena ¿cómo estás? -Dijo una señora un poco conocida mientras se agachaba y suavemente extendía su mano hacia mi para que la tomara. Me escondí detrás de mi mamá buscando refugio.

-Es muy tímida, ya sabes, lo siento, May. -Dijo mi madre.

-Oh, tranquila, Rafaela, no pasa nada, ¿cuántos años tienes?

-Tengo 4. -Dije suave y muy bajito mientras mostraba cuatro dedos en mi mano.

-Wow, eres toda una niña grande. ¿Quieres jugar, Kate? -Dijo cálidamente mientras me llamaba más cerca con su dedo.

Asientí levemente con miedo y empecé a acercarme poco a poco.

-Muy bien, ¿ves a esa niña de allá? -Me dice mientras señala a una niña sentada en una esquina jugando con una muñeca. -Se llama Victoria, ve a jugar con ella, ¿si, Kate? tú mami y yo estaremos hablando aquí, ¿ok?

-Oki. -Dije bajito para luego ver a mi mamá en señal de que me pusiera mi mochila y me diera mi beso de despedida, ya estaba lista. Caminé lentamente entre los niños, mirando cada ciertos segundos hacia atrás para asegurarme de que mi madre si estuviese detrás, yendo un poco emocionada hacia esa niña de cabello castaño casi rubio, ondulado y de ojos azules.

Al llegar vi hacia atrás una última vez para ver a mi mamá viéndome y haciéndome una seña para que le hablase a Victoria, voltee hacia ella y le di dos golpecitos con los dedos a su hombro. -Holi. -Dije cuando volteo su cabeza para mirarme, me fulmina con sus ojos, pero no de una mala manera, de hecho, me generó confianza al darme una sonrisa que, obviamente, le devolví.

-Hola, ¿quieres jugar? -Preguntó rápido para luego levantar su muñeca y la otra que tenía cerca de ella para dármela.

-Si. -Dije en voz baja aceptando la muñeca que estaba dándome.

-Me llamo Vicky, ¿tú como te llamas? -Dijo bastante animada.

-Yo soy Katherine.

-¡Kitty! -Gritó emocionada, me hizo reír y luego empezó a reírse conmigo. -Siéntate aquí, Kitty, juguemos. -Dijo mientras apuntaba a un lado de ella y sonreía enormemente.

Desde el comienzo nos entendimos a la perfección, me hizo olvidar el miedo que tenía de estar ahí y me acompañó durante todo el día, cosa que pronto se convertiría en una rutina para las dos, conocernos fue inesperado pero, todo era mejor estando con ella.

Y así empezó nuestra historia.

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