⌈Lᴏᴠᴇʀ⌋ •SungSun•

↬𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰𝟷𝟶°᭄

Hoy definitivamente se esmero.

Tenía entre sus manos una tarta de coco, dentro de una cajita de color blanco, con detalles de corazones por todos lados, muy chiquitos, envuelta en un moño rojo y con la tarjeta correspondiente, amarrada al listón.

Se felicitaba mentalmente por como decoraba sus regalos para Hoonnie, hasta sabe que son esos pequeños detalles lo que hacen sonreir un poco más al mayor y eso le encanta, adora saber que todo lo que le da le genera una sonrisa que le derrite su corazón.

Estaba caminando por el pasillo en dirección al taller, donde se vería con su Hyung, esta vez iba solo porque Jungwon fue secuestrado por Jay Hyung, algo que para Sunoo no era nada sorprendentemente, últimamente esos dos andan muy sospechosos y algo de su instinto le dijo que se gusta mucho mucho mucho.

En fin.

Ahora que iba entre saltitos a entregar su regalo, no se percató de que detrás suyo una persona se encontraba siguiéndole el paso, tan silenciosa o no, Sunoo no le podia prestar atención por estar tan sumergido en su burbuja llamada Park Sunghoon.

Y cuando entró al taller, se llevó una sorpresa.

Sunghoon aún no había llegado.

No se quedó tanto tiempo analizando la situación, tal vez tuvo que ayudar a Heeseung o se encontraba en los baños, o haciendo seguramente cualquier otra cosa, pero nada le preocupó, no cuando se abrió paso para dirigirse a su asiento y poder esperar paciente.

－Kim Sunoo…

En medio de su caminata se llevó una mano al corazón y con todo el resto de su cuerpo saltó en el lugar completamente aterrado, la mención de su nombre y de que no escuchó a nadie atras suyo, lo hizo asustar tanto, que no pudo evitar. mirar. con el ceño fruncido a la persona que lo sorprenderá de esa manera.

－¡Santa mierda!－ grito enojado, odiaba que lo hagan asustar, es muy miedoso de por si y gritar en esas situaciones le causaba mucho terror y verguenza, odiaba ese tipo de bromas －¿Han-Hanbin?…

Pudo haberlo puteado en mil idiomas, pero se quedó confundido al ver a Hanbin, tardó en reconocerlo la verdad, no lo vio hace mucho tiempo, incluso casi que se olvida del nombre y pudo haber dicho más, pero el chico se le acercó tanto que Tuvo que retroceder con el ceño fruncido por su expresión tajante.

－¿Qué quieres?－ pregunto poniendo su mano como distancia, ya que el chico parecia empeñado en invadir su espacio personal.

Hanbin al frente suyo lo miraba con desesperación, como si quisiera atacarlo o algo por el estilo, Sunoo por supuesto que no quería, con una mano intentaba detenerlo y con la otra proteger el regalo de Sunghoon.

－Sera mejor que te vayas y no jodas－ hablo de manera seria, Hanbin tenia las mejillas rojas y no sabia lo queria, literalmente, pero el pelirosa no estaba para estupideses －pense que había sido lo suficientemente claro la ultima vez que nos vimos…

－No puedo, no puedo dejar de pensar en ti Sunoo－ con una cara suplicante Hanbin coloco sus manos sobre la que tenia en su pecho, espesificamente la de Sunoo, quien lo miraba con una cara de culo －por favor, dame una oportunidad…

Sunoo esta vez lo empujo fuertemente y colocó el postre sobre una de las sillas.

－No me interesas Hanbin, ¿acaso te lo tengo que explicar con dibujitos?－ odiaba tanto haber metido con este chico, rodo lo ojos cansados, de haber sabido que iba a ser así, nunca se hubiera acostado con Hanbin, siempre lo molestaba e intentaba contactarse con el, pero Sunoo solo tenia ojos para una sola persona －no es no, dejame en paz, ¿si?…