Un Nuevo Comienzo

Parte 11: Defiende a los tuyos Son Gohan!!

Issei se encontraba observando la televisión junto con Motohama y Matsuda. Al parecer, el trío pervertido había acordado ir a casa de Matsuda, ya que el chico pelón había conseguido de alguna manera el último lanzamiento de su serie erótica, "Kamen Rider Pinky". De hecho, intentaron invitar al Demi Saiyajin con ellos. Sin embargo, no pudieron encontrarlo durante el almuerzo, lo cual era curioso, ya que Gohan parecía tener un gran gusto por la comida.

"Aún no puedo creer que sea un demonio" Pensó Issei, recordando los acontecimientos del día anterior.

Recordaba la charla que tuvo con Rias la noche anterior en el Club de lo Oculto. Al parecer, ese "Sueño" que tuvo realmente había sucedido, y Yumma lo había asesinado en su cita.

Issei frunció el ceño al recordar a la pelinegra y se maldijo por haber sido tan estúpido y dejar que la chica lo engañara tan fácilmente. Por un lado, culpaba a su lado pervertido por ello. Sin embargo, realmente comenzó a gustarle Yumma; era tan divertida y linda cuando sonreía.

"Pero todo era una farsa..." Murmuró para sí mismo, recordando vívidamente la crueldad con la que lo mató esa noche en el parque.

"¿Dijiste algo, Issei-san?" Preguntó Motohama al escuchar a su amigo murmurar para sí mismo.

"¿Eh?..." Comenzó el castaño, sorprendido por la pregunta del chico. "N-no, no es nada, Matsuda" Le dijo mientras sacudía las manos frente a él para enfatizar su punto.

"No me engañas, Issei-san" Le dijo Motohama, mirándolo seriamente. "He notado que has estado actuando muy raro en la Academia. ¿Tiene algo que ver con esa tal Yumma?" Preguntó curioso, recordando que esta mañana su amigo les había preguntado si conocían a esa chica.

"N-no, de verdad estoy hablando en serio, Motohama" Aseguró Issei torpemente, intentando calmar a su amigo.

Era cierto, después de la conversación que tuvo con Rias, el castaño les había preguntado a sus amigos si conocían a Yumma, ya que según la Presidenta del Club de Ocultismo; habían borrado la memoria de todos aquellos que habían entrado en contacto con Yumma, excepto él, por supuesto.

Motohama lo miró críticamente durante un buen rato, mientras Matsuda miraba desconcertado entre los dos, hasta que finalmente el chico con anteojos suspiró en derrota, sabiendo que no sacaría nada más del castaño.

"Bien, si tú lo dices" Resopló antes de regresar su mirada al televisor.

Issei suspiró por eso, sabía que Motohama, a diferencia de Matsuda, era alguien listo. Se demostró al ver a su amigo calvo encogerse de hombros solo para adoptar una expresión tonta cuando sus ojos regresaron a la serie erótica en el televisor.

El castaño era consciente de que no podía revelar nada sobre lo que le había dicho Rias a sus dos mejores amigos... ¡Diablos! Él aún era escéptico acerca de lo que le dijeron: demonios, ángeles y ángeles caídos eran cosas que Issei pensaba que solo existían en Películas o Mangas.

Con esto en mente, decidió prestar atención al televisor, con la esperanza de despejar esos pensamientos complicados.

Algún tiempo después.

Vemos a Issei caminando por un largo sendero bañado por la luz de la luna. Al parecer, se le había hecho tarde y si no fuera porque su madre lo llamó exigiendo saber su paradero, seguramente habría permanecido más tiempo en casa de Matsuda.

"Es curioso cómo puedo ver tan claramente incluso estando tan oscuro" Murmuró Issei mientras veía a un gato negro escabullirse entre los callejones del lugar.

Recordó cómo Rias le había dicho que podría sentirse extraño estos días, ya que todos sus sentidos tendrían que adaptarse a sus nuevas habilidades. Todo esto mientras dejaba ver un par de alas negras de su espalda, al igual que Akeno, solo para enfatizar su punto.