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Las cosas en la fortaleza se encontraba tensas, todos lo sabían. Mientras que la reina se movía de un lado a otro aguntiasda por las nuevas noticias, Rhaenyra estaba más alegre pues ahora su omega estaba más tranquilo y ocupaba al cien porciento de su tiempo con sus cachorros. Su amigo harwin ahora era su caballero juramentado y aunque había pasado un regaño severo, fue peor para sir criston ya que la acusación en su contra casí le cuesta la lengua.

Aún así ella se mantenía con cuidado, la reina cada vez estaba más picosa y era casí imposible ver a sus hermanos, si no fuera porque sus cachorros eran muy inteligentes y curiosos no hubiera sabido que les enseñaron a sus hermanos sobre los túneles que ella también descubrió cuando solo tenía diez y siete. Sus hermanos pasaban la mayoría del tiempo en su habitación jugando y corriendo, quien más le alegraba era la pequeña Rhaelys, ella era toda una ternura cuando traía flores en el cabello y esos hermosos vestidos de colores que animaba cada que pasaba, esa niña era un angel completamente y cada vez que estaba a su lado sentía una cierta posesión por ella. Era como si la necesitara a su lado, la sentía como suya.

La alfa se sentó mientras miraba a sus hijos jugar con sus tios, laenor estaba en el suelo con joffrey en sus brazos y Daeron a su lado jugando con el pequeño. Rhaelys se aserco a su hermana y dejo muchas flores llenas de tierra y suciedad en su vestido, pero aún así eran muy bellas y olían muy bien.

— Hermana te he traído unas flores, me acordaban mucho a ti. A tus ojos— la alfa se sintió feliz al ver a la pequeña con esas flores, ella tenía más en su cabello y parecía que había corrido mucho para llegar a ahí ya que sus mejillas estaban de un tono rojizo, sus ojos la miraban con felicidad así que la alfa se levantó y puso las flores en agua volviendo con la pequeña.

— Son hermosas mi niña, ven— ella cargó a la pequeña beta y acomodo sus cabellos con suavidad

— Dime como te fue hoy en tu valyrio, espero puedas mejorar— la niña se emocionó y comenzó a contar todo con detalles, incluso habló un poco en valyrio y la alfa la corrigió en algunas palabras hasta que alguien paso a la habitación haciendo que todos voltearan.

— La reina está aquí, mi señora— dijo harwin viendo a la peliplata tratando de calmar sus nervios e hicieron lo que siempre hacían cuando llegaba la reina, todos se metieron al tunel menos la familia y asumieron un porte normal.

La reina entro con la elegancia que poseía siempre y miro con superioridad a Rhaenyra, siempre la misma mirada que la alfa ya estaba acostumbrada incluso le aburría, al parecer la reina lo notó porque miro a otro lado tocando sus manos, cada vez que tiene nervios lo hace, era su manera de sacar su frustración. Rhaenyra la ponía mal, aún así la volvió a mirar mordiendo su labio.

— Donde están mis hijos Rhaenyra, se que están aquí — Solto la omega acercandose más, sentía la necesidad de estar más cerca de la alfa, pero la alfa la miro casí con fastidió y eso hizo que su pecho se hundiera, no lo demostro y solo apreto más sus uñas contra su piel.

— No están aquí, si no sabes tu donde están tus cachorros menos yo sabre— solto y paso por su lado separando las manos de Alicent, verla lastimarse era una de las cosas que más odiaba, la alfa apoyo su cuerpo contra una mesa que está cerca de unos sofás, vio a laenor y esté fingia jugar con los niños, los niños tenían su mirada fijas en sus juguetes ejecutando el papel de desentendidos. Sin embargo, la omega volteo viendo a la alfa con una mirada que sólo ellas podían dedicarse, trató de ver si ella mentía pero su mirada era como ver hacia un muro, no había nada.

— Bien, cualquier informe que tengas, dile a tu guardia y que le diga a los mios— le creyo, camino pero antes de terminar de pasar por su lado rhaenyra la agarro del brazo con tanta rapidez que nisiquiera se dio cuenta hasta que ella la atrajo.

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