‟amar a alma se siente bien porque ella tiene un 𝒂𝒍𝒎𝒂 𝒑𝒖𝒓𝒂 y, sin duda, es algo que no todos tienen. "
no permito copias ni adaptaciones sin mi permiso.
fanfic 100% mia.
⚠️mención de TCA, si es un tema sensible para ustedes, pasen el capítulo, trataré de que no sea un tema esencial para la historia.
alma;
conocí a los trillizos cuando nos mudamos a boston, en ese entonces tenía dieciséis, veníamos de argentina con mi prima y era un mundo completamente nuevo. idioma nuevo, ningún amigo ni conocido, vida nueva.
un día estábamos sentadas comiendo en el recreo y se acercaron tres chicos iguales a hablarnos, estaban en la clase de agus, eran un año más grandes que yo. se veían amigables, y desde ese día nos volvimos inseparables, nos sentábamos en los recreos juntos y en la tarde íbamos a cualquier lado a pasar el rato.
fue horrible mi último año, ya que al ser un año menor que los cuatro ellos ya habían salido de la escuela, pero yo no. por suerte no se me complicaba socializar y solamente eran unas pocas horas que debía estar sin ellos, aunque ya no los veía tanto como antes porque tenían trabajos, solo mantenía contacto constante con mi prima y chris.
ese año comencé a tener problemas con mi alimentación, al ser mi último año me llenaban de trabajos y tareas, lo que generaba que mi alimentación no sea de la mejor. un día me vi en el espejo, y me gustó como me veía, así que tomé la peor decisión de mi vida, dejé de comer.
usaba de excusa mi tiempo, "no tengo tiempo para almorzar.", "ya son las cinco! tengo que ir a hacer el trabajo de biología a la casa de maddie, no llego a comer nada.", "luke no tenemos tiempo de comer, necesitamos el trabajo listo en una hora."
miles de excusas pasaban por mi mente día a día. el primero que fue notando esto fue chris, cuando me abrazaba me notaba más flaca o también notaba un comportamiento distinto en mi a la hora de ingerir algún alimento. todo se derrumbó un día que vio una foto mía de hacía unos meses, donde mi cuerpo estaba notoriamente cambiado.
flashback...
almita, podemos hablar? -dijo chris adentrándose en mi cuarto por la noche, no esperaba su llegada.
chirs, hola, no sabía que ibas a venir hoy. -sonreí, aunque la cara del chico no era de la más contenta. -pasa algo?
se sentó en mi cama y agarró mis frías manos. -estás comiendo bien vos?
mi respiración se frenó por un segundo, lo había notado, mierda. su cara tenía mucha preocupación, y su tono de voz también.
eeh si, por que decís eso? -hasta yo noté el nerviosismo en mi voz, no había caso con seguir mintiendo.
segura? no quiero que te hagas ese mal mi vida. -verlo preocuparse por mi me estaba matando, odio que se preocupen por mi.
por amor a él, decidí contarle todo. lo hice con la mirada baja todo el tiempo, no podía mirarlo a la cara, me avergonzaba y sabía que si lo miraba lloraba.
cuando terminé de decirle todo nos quedamos en silencio por uno o dos minutos, él nunca soltó mi mano, la acariciaba. decidí armarme de valor y mirarlo, en mi mente se me ocurría que iba a tener una cara de enojo y decepción, pero al elevar la mirada vi como una lágrima se resbalaba por su mejilla, estaba llorando. por mi culpa.
no aguanté y me desmoroné, lágrimas y sollozos era lo único que salía de mi. nos abrazamos fuerte, si bien no quería contarlo, me había sacado un peso de encima.
no te hagas esto alma, tenes un cuerpo perfecto desde que te conocí. -dijo al calmarse un poco.
perdón. -perdón, era lo único que me salía decirle a aquel pobre chico de ojos celestes que estaba teniendo que pasar por esta situación gracias a mi.
no pidas perdón, no es tu culpa pasar por esto. pero desde hoy te voy a ayudar a salir de esta, te lo prometo. -esas palabras que salieron de su boca me hicieron darme cuenta que el amor que yo sentía por él era inigualable.
esa noche chris se quedó conmigo, no estoy segura si pudo dormir algo, dijo que se iba a quedar cuidándome toda la noche, y eso hizo. esa noche dormí en paz.
fin del flashback.
tiempo después de ese día, le conté a mi prima, a los otros dos hermanos y a mis padres. chris me hizo darme cuenta que no me estaba haciendo bien y que a él tampoco. mi prima se echó la culpa de no haberlo notado antes, que con el tiempo la convencí de que no lo hiciera. matt al enterarse se quedó sin saber que decir, no lo juzgo, me abrazó durante horas y horas repitiendome que era muy hermosa y que eso no es sano. nick tuvo una reacción distinta, él me comprendió más que ninguno, en su adolescencia había pasado por estas cosas. hablamos del tema durante una noche entera, eso hizo que mi relación con él se vuelva más fuerte que antes.
por último le conté a mis padres, al principio fui juzgada pero después me asignaron una nutrcionista y psicóloga para ayudarme.
este suceso nos hizo más cercanos a todos otra vez, ya que todos estaban pendientes a mi y eso hacía que nos veamos todos los días, como antes. chris fue una persona esencial en mi recuperación, desde que esas palabras salieron de su boca, "te voy a ayudar a salir de esta, te lo prometo", todos los días sin falta, el chico se presentaba en donde sea que esté a comer nuestro plato de comida juntos.
soy una fiel creyente de la frase "todo pasa por algo", porque si esto no se hubiese interpuesto en mi camino, no sé cómo sería mi relación con los tres dulces chicos en este momento.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
un poco sobre la vida de nuestra querida alma para q la conozcan más, mandemos abrazos para ella.
