_________ Armstrong está enamorada de su mejor amiga; Amy Rose. Al darse cuenta de que la rosada no está interesada en ella de esa forma, toma la desesperada acción de comprarle una poción de amor a un extraño para darsela a Amy. Su sorpresa es gran...
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Pov: _______
Suspire con pedadez cayendo rendida en mi cama, estaba cansada, cansada de saber que sin importar que tantas indirectas, cumplidos o gestos lindos le mando, no podía conquistarla, no conseguía ser la novia de Amy Rose.
Lo se, se que es ridículo pensar así, pero no es mi culpa, es culpa de Amy por ser tán perfecta y hermosa, es decir, su dulce voz que parece un coro de angeles, su pelaje rosado como el algodon de azucar, sus grandes y brillantes ojos verdes, ¿Quién no se enamoraría de ella? No por nada es una de las chicas más codiciadas de la villa.
Perdón, creo me estoy desviando un poco, porque aquí el problema no es mi enamoramiento en si, si no más bien que por más que lo intento, no consigo ningún avance con Amy, y el hecho de que cuando estabamos completamente solas y en un buen ambiente me haya llamado su "mejor amiga" tiro todas mis esperanzas por el caño.
No quería rendirme, realmente me gusta Amy y en serio que quiero salir con ella, pero parece que soy la única.
Volví a suspirar, son las 5:32 pm, no era tarde asi que me pare de mi cama, me puse zapatos y salí de mi casa para dar un paseo, necesito despejar mi mente de todas estas cosas.
Decidí ir a la playa a dar una caminata, quedaba muy cerca de mi casa y adoro el sonido del mar, eso siempre me ayuda a relajarme, y acompañado con la puesta de sol sería aún mejor.
Cuando ya estaba por llegar, me detuve al escuchar a alguien pronunciar mi nombre de una forma muy delicada, que parecía un susurro, mire a todas partes pero no había nadie cerca, si habían muchas personas pero ningúna me prestaba atención, solo esa escalofriante voz llamandome.
Empece a tener miedo, no recuerdo haber invocado a un fantasma, o eso pense que era hasta que a lo lejos divise a una carpa de color morado y que estaba completamente oscura en el interior, de ahí venían las voces.
"_______" "________" "_________" repetían, creo que me estoy volviendo loca.
Cualquier persona que tenga un mínimo de sentido de supervivencia saldría corriendo y cerraría todas las puertas de su casa con llave, pero recorde que a mi me gusta ser especial asi que entré.
El lugar era bastante raro, estaba lleno de mesas y repisas que tenían encima frascos con sustancias extrañas, también habían algúnos cristales colgando del techo que le daban un toque más macábro.
Seguí caminando hasta encontrarme con una luz que era cubierta por una manta, me acerque y la quite de un solo jalón, dejando ver a una nutria anciana llevando una túnica mientras estaba meditando.
Solo me quede ahí parada viendolo, diablos, pense que me encontraría con algo genial como un cofre del tesoro, una criatura mística o una lampara con un genio adentro, no a un anciano arrugado como una pasa que seguramente se quedo ahí sentado porque ya no podía pararse.
