Tengo ganas de contarte cosas de mí que me han pasado. Y tengo ganas de que lo celebremos como siempre hemos celebrado nuestros logros.
Tengo ganas de sentarme a hablar, simplemente, sin rencores, sin miedo y como solíamos hacerlo. Tengo ganas de que tú tengas ganas de hacer lo mismo.
Tengo ganas de perder el orgullo y recibir un mensaje tuyo. Tengo ganas de que lo hagas, de que lo hagáis. Quiero que, por favor, vuelvas a ser la misma persona de la que me enamoré.
Tengo ganas de sentir y crear. De verte. De tenerte. De poner decir que hemos podido.
Tengo ganas de ti. Pero odio no poder saber si tú también las tienes de mí.
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El desorden de los sentimientos
PoetryFragmentos de un corazón que busca encontrarse y volver a ser uno. Sin embargo, la ausencia de ella, del amor y de la felicidad que la dependencia emocional le quitó sigue marcando huellas en su doloroso camino. ---- Todos los derechos reservados.