𝘽𝙪𝙙𝙙𝙮! • 𝘚𝘢𝘵𝘰𝘚𝘶𝘨𝘶

01

Gojo Satoru, un alfa de tercero que trae locas a muchas adolescentes omegas y betas desde su llegada a Jujutsu High.
Si bien lo trasladaron de instituto como "castigo" debido asu comportamiento.
Aunque siempre causando algunos problemas con alumnos de diferentes clases o maestros. Cómo el viejo de Yaga
Siempre su familia terminaba pagando tal precio para no hacer públicas sus idioteces.

— Ahh. — Soltó un alarido de dolor mientras se componía en la dura silla en lase encontraba sentado.

Su familia era reconocida por ser una de las familias con más fortuna y con buenos reconocimiento económicos y sociales.

— Pss! Gojo! — Volteo a los llamado de Haibara el cual empezaba a hacerle burla al maestro, no puedo evitar lanzar pequeñas risas.

Haibara Yū, un omega de 16 años, que se mudo a Tokio con el sueño de estudiar en Jujutsu High el cual le mantenia un gran aprecio asu persona.

— Gojo, Yū, ¿Podrían dejar de molestar en mi clase? — Pregunto Yaga en un tono fuerte, llamando la atención de todos los presentes en el salón.

Antes de que pudiera responderle de forma burlona escucho el timbre justo acabando así con la última clase.

— Bien, eso es todo por hoy, disfruten el fin de semana. — Hablo en un tono fuerte, tomando sus pertenencias del escritorio y retirándose casi al instante.

— Si, si, mientras no tenga que verlo es bueno. — Dijo Satoru mientras se enderezaba en su pupitre. —Maldita calidad de madera está.— Se quejo con una expresión de fastidio.

— Al parecer el increíble Satoru Gojo no está acostumbrado a los pupitres de institutos públicos. — Escuchó a Shoko hablar justo atrás sacándole una sonrisa.

Shoko Leiri, una beta de 17 años, su único deseo es irse y sacar un título de medicina, aunque menos le importa una mierda lo que quiera hacer.

— No entiendo cómo aguantan tanto en esto. — Dijo con un tono burlón.

— Jumm... La costumbre. — Termino mientras empezaba a mensajear en su teléfono.

-— ¿Que planean hacer el fin de semana chicos? — Está vez fue Haibara quien lo sacó de sus pensamientos. Este se unía al grupo y se sentaba en cualquier pupitre desocupado.

— Pienso Fumar y talvez salir con la Señorita Utahime — Respondió Shoko.

— Umm, que aburrido suena eso. — soltó Gojo reposando una de sus manos en el hombro de Haibara, cosa que provocó un pequeño salto.

Algo ya comun que Gojo invada el espacio personal de sus amigos.

— Dime Nanami, ¿hay información sobre alguna fiesta este fin? — pregunto Gojo mientras metía sus manos en sus bolsillos delanteros.

Nanami Kento, un alfa de clase alta, con 16 años de edad y altamente respetado por algunos. Incluso por Gojo.

— Por lo que escuché Naoya piensa hacer una de sus típicas fiesta este sábado. -— Oh vaya, ahora el pito corto piensa aburrir ala personas con sus fiestas seguidas.

— Y al parecer invito a todos lo grados menores. — Finalizó Kento para luego posar su mirada en Haibara.

— Ehww, no mires haci al pobre Haibara. — Dijo notando la mirada molesta que le tiraba Nanami y notando el cambio de feromonas en Haibara.

Suspiró, enserio esos dos algún día tenían que ser novios quieran o no.

— Bueno, tengo unas asuntos más importantes que hacer.  — Salió de la aula dejando solo a los tres en el salón.

— Tsk, Naoya pensado que todos quieren ir a sus estúpidas fiesta. — se rió de lado mientras seguía su ritmo por el pasillo.

Conocía a Naoya por diferentes cosas, una de esas eran las fiestas aburridas que hacían sus padre e invitaban a la familia Zen'in y Kamo, bueno casi no se llevaba bien con nadie, ponía una escusa y se dirigia justo a su habitación a ver programas de televisión o a tomar algunos vinos de sus padres hasta terminar medio inconsciente en su cama.

No Hiba a juzgarlo, después de todo es el único imbécil que le sigue pidiendo peleas en este instituto. Después de todo los metieron a los dos al mismo tiempo, por una misma pelea que ambos ocasionaron.

Hiba tan sumido en sus pensamientos que no se dió cuenta en el momento que un aroma lo en volvió en su dulce calidez. Era un omega.

Su seño se frunció casi al instante cuando aquel delicioso aroma se coló por su nariz.

El aroma era dulce y empalagoso, casi puede saborear el dulce aroma.
Aunque el era uno de esos alfas que siempre buscaba la mejor de cada omega.

Pero el aroma de este era muy bueno y parecía que en cualquier momento correría a buscar el causante de dicho aroma. No sé parecía nada al de cualquier otro, este tenía un afrodisíaco que lo hacía enloquecer y querer morder.
Estaba empezando a salivar un poco por dicho aroma, sentía la necesidad de morder y lamber.

Bueno todo se fue ala mierda cuando sono nuevamente el timbre dando la señal que ya era hora de desalojar el instituto, noto las puertas abrirse y dejar salir a todos, haciendo perder el pequeño pero fuerte rastro de aroma, así mezclándose con todos los hormonales que pasaban a su lado uno que otro que lo empujaba con los hombros y otros que solamente pedía permiso y lo esquivaba.

— Maldita sea.  —Maldijo desde sus adentros, tenía la necesidad de buscar nuevamente el aroma pero sabía que era un desperdicio total buscar entre tantos idiotas.

Con algo de prisa se dirigió hacia la salida y con el seño fruncido ¿Por qué estaba enojado? Solo era un aroma como cualquier otro no era la gran cosa como para hacerlo enojar. Que ridículo.

Diviso con la mirada el coche negro que lo estaba esperando en una esquina.
Vaya mierda, solo quiera llegar a su casa y dormir toda la tarde si es posible.

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Holiss, Disculpen los errores ortográficos, comenten que les pareció xfiss!