Caos

Especial 1: Hades y Qin

Advertencia: Final triste

Toma tu caja de pañuelos, agüita para hidratarte y un dulce para endulzarte la vida después de leer esto, porque no se ustedes pero yo lloré mientras escribía.

Para más sufrimiento escuchen la canción de la multimedia cuando Hades y Qin se encuentren con la gente del pueblo intentando huir, fue la que inspiró todo

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Hades despertó ese día con una sensación extraña en el pecho, como presintiendo que algo pasaría, aunque no necesariamente malo.

Había reencarnado esta vez en un pueblo bastante pequeño durante los años 60, el ambiente era tranquilo, aunque algo opresivo según la percepción del exdios quien estaba acostumbrado a hacer siempre lo que él quería, pero ahora era hijo del detestable Cronos quien era un inversionista importante ya que trabajaba con joyería y plata, mismo negocio que lo hacía respetado en el lugar, Hades algún día heredaría aquello según su padre, pero el alfa no podría darle más igual todo. Lo único que le importaba era quitarse el recuerdo de aquella hermosa omega de rasgos asiáticos a quien decepciono en otra vida y su hermanito Adamás que reencarno con el solo que como omega y actualmente tenía 10 años de edad.

Caminó sin mucho animo a su empleo, actualmente Hades tenía ya 25 años y se encargaba de la tienda de joyería de su padre, pues éste aun no le permitía tomar acción en los grandes negocios, no es como si Hades quisiera, él podría hacer lo que se propusiera gracias a los conocimientos que una eternidad de existencia le daban, sin embargo, la depresión de su vida pasada no parece haberse ido por completo. Saludó a la alfa que era su compañera de trabajo, una mujer joven a quienes sus padres permitían trabajar por ser alfa con la esperanza de que conociera un lindo chico omega y casarla con él, así era todo en la actualidad, una alfa con un omega, un alfa con una omega, los omegas varones servían solo para mujeres alfas, las mujeres alfas tienen un poquito más de derechos que las omegas pero no más que los hombres alfas, a Hades todo esto le parecía una reverenda estupidez y a veces le daban ganas de matarlos a todos porque nadie tenía derecho a decidir eso sobre otros, porque Hades estaba enojado con el mundo porque perdió a Qin en su otra vida por su propia estupidez.

- ¿mala noche?

-siempre son malas noches

-si sigues así no encontraras pareja, ya se te está pasando el tiempo

-no es algo que me interese

-a mi menos, pero creo que no tenemos opción

Akami era una alfa igual de enojada con la vida que él, lo comprendía muy bien

-hay un chisme nuevo en el pueblo -aunque también se metía en asuntos que no debería

-no me interesa

-yo creo que sí, dicen que llego un carro lleno de citadinos hippies, son lo más hablado ahora porque tienen a omegas y alfas viviendo juntos en carros ¿puedes creerlo? las orgías que se harán en las noches -comentó entre sarcástica y celosa de la libertad que aquellas personas tenían

-realmente no es algo que me interés

-y vienen de todas las culturas, creo que había asiáticos ahí

La mente de Hades solo recordaba la cara asiática de una persona, un rey firme y valiente, una omega terca y decidida de ojos de estrellas que le seguían en cada vida.

-si nadie tiene las estrellas en sus ojos no me interesa- murmuró

- ¿ah? ¿eras así de romántico Hades? -pregunto la alfa con burla, pero el chico solo la ignoró