Capítulo 5

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Muchos días pasaron desde ese pequeño encuentro con Bakugou "no confias en mi " esas palabras retumban en mi cabeza, la cara de angustia de él no se borra de mi mente es una tortura para mi, tal vez... sea la salida que tanto he anhelado, podría contarle todo lo que pasa en mi casa y salir al fin de ese lugar pero... a donde ir? no tengo mas familia, lo mas logico es que vaya a una casa hogar y por lo que me han contado no son muy buenos esos lugares, te tratan muy mal, esas personas solo les interesa el ingreso por cada niño que entra a sus puertas.

Suspiro derrotado, no puedo contar con Bakugou necesito otra manera de salir de esa casa pero ¿como? , lo he intentado muchas veces y siempre sale mal ¿cuales son mis opciones? escapar no es una buena opción, tal vez hablarlo con aizawa-sensei? no, no, no, ya tiene muchos problemas con nosotros creo que es mejor no meterlo en esto... siempre escuche que la esperanza es lo último que se pierde, siendo sincero la mía ya desapareció no importa lo que haga para salir de hay siempre termino peor, mi cuerpo hecho un asco, mi ropa llena de sangre, mi cuerpo lleno de moretones... que asco me da... ¿acaso es normal sentir asco a ti mismo? No es solo cuando el me golpea, por que me pasa esto? solo quiero desaparecer estar tranquilo ser yo... ser... ser... ser... solo ser feliz... solo estar tranquilo lejos de sus asquerosas garras me levanté de la esquina en donde estaba sentado, del frío suelo y comencé a organizar lo que queda de la casa, mi padre regresara pronto así que tengo que terminar, termine de poner la cerveza en la mesa justo a tiempo y el demonio regresó a casa, rápidamente me aleje de la mesa solo para ver como mi maltratador se sentada en la mesa para comer con descaro.

- Lárgate a tu habitación, no te quiero ver.

Fue lo único que mencionó no lo pensé dos veces y me fui con dirección a mi habitación tome mi manta y me enrolle en ella, me volví a sentar en aquella esquina de mi habitación temeroso de lo que pudiera pensar mientras mis emociones y pensamientos me consumían lentamente...

Quiero ser feliz...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora