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Miraba consentrada su celular sin prestarle mucha atención a los tres chicos que hablaban animadamente haciendo ruido mientras que ella estaba tratando de responder los mensajes de su madre quien preguntaba cada dos por tres "¿como estas?, ¿Ya comieron?, ¿Que hora es allí?, ¿Como esta osvaldo? ¿se mejoro?" Y más preguntas así.
La verdad que no le molestaba, es decir, como le iba a molestar los mensajes de su madre que solo se preocupaba por ella y su pareja, le gustaba esa atención y amor que le brinda esa mujer que ella quería mucho; dejó a un lado su móvil fijándose ahora en los tres muchachos que hablaban animadamente y jodia a su novio que no lograba entender los modismo o chistes de los argentinos.
— Tanto los mexicanos como los argentinos son poco... osea no se les entiende cuando hablan. - explicó el de lentes — Ustedes empiezan a decir que el boludo o el boliche, el boliche es ese el que tiras la pelota y tira los bolos.
— Pero entende el contexto pelotudito, si te dicen vamos a tomar en el boliche... te voy a besar creo - No termino de explicar ya que cambio el tema enseguida tratando de darle un beso a osvaldo.
— Ey ey, ¿que haces? - interrumpió Elisa en tono de broma causando la risa de los tres. — ¿le tienes ganas a mi novio o que wey?
— ay es su novio - empezó a molestar carrera ocasionado la risa nerviosa del chico. — Y sabes que si, si no estuvieras acá ya le hubiera dado un beso - bromeo sacandole una carcajada a la muchacha.
— a lo único que le darías beso es mi puño en tu cara, carretera - bromeo haciendo pose de pelea.
— Uuu bardeo mal - hablo spreen riendo al ver como carre se levantaba y también se ponía en pose de pelea.
— Dale, nos cagamos a piña por el amor de mariana acá nomas - dijo tirando unos golpes al aire — Vas a ver como me quedo con tu hombre.
— Te voy a demostrar todo lo que aprendí para la velada y te voy hacer volver al jardín de donde saliste. - volvio a bromear sacandole una risa a los tres.
— Me parece que te fuiste a la mierda. - contesto el ojiverde quien se sentó nuevamente en la silla haciendose el ofendido.
— ¿Enserió pelearas en la velada? Creo que eso no se decía - agrego osvaldo ocasionado que las risas aumentarán.
— No amor, no voy a pelear - aclaró queriendo sentarse al lado de su novio pero este rápidamente se levanto y le indico que se sentara. — Gracias corazón.
— De nada eli. - dijo amablemente sentándose en la mesa ratona que había ahí.
— Eli ¿te subirias a pelear en la velada 4? - pregunto spreen con curiosidad fijándose en la reacción del de lentes.
