IV.

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Condujo de regreso al consultorio lo más relajado que podía. Había mentido de una manera tan buena, que por un momento se sintió orgulloso, pero al recordar al híbrido pato todo se vino abajo.
Rogaba a todos los dioses existentes que Quackity acepte ayudarlo, aunque estaba seguro que lo haría, después de todo, Quackity era una persona desinteresada que ayudaba a todo aquel que lo necesite.

Alex supo que algo estaba fuera de lugar cuando Spreen lo invito a comer a él y a Rivers McDonald's por una hamburguesa y papas fritas con queso derretido y tocino junto con dos cajitas felices para rivers e roier, Porque Roier estaba ocupado haciendo un trabajo en casa de un amigo. Contadas eran las ocasiones en las que Spreen lo invitaba a comer y pedía su comida favorita, y no quería sonar desagradecido o protervo, pero la mayoría de veces era por un favor.

- Dime - dijo Quackity mientras veía como Rivers jugaba en la zona de juegos del restaurante, para después tomar un poco de su baso de refresco de Coca cola -, ¿Cómo salieron las cosas con Sally?

- Bien - sonrió nervioso -, pero puede que haya inventado un matrimonio falso y ahora el quiera conocer a mi futuro ex esposo.

- Entonces esa es la razón - dedujo -, quieres que finja ser tu esposo y hable con ella.

- Eres George y me engañaste con un tipo llamado Wilbur Soot.

-¿Y no se te ocurrió otro nombre? - pregunto con una mueca.

- Vamos - se quejó --, casi me hago George en el pantalón cuando preguntó. Entre en pánico.

- ¿Tu? - Preguntó incrédulo - Spreen Buhaje, el que inventa un matrimonio nuevo cada viernes, ¿Entró en pánico?

- ¿No te da una idea de mis sentimientos por ella? De verdad, Quackity, no quiero arruinar esto.

- Ya empezaste mal con tan solo mentirle
- recriminó para voltear a ver a la pequeña niña de cabello azabache con rasgos parecidos a los de Spreen, que estaba peleando con un niño por haberla empujado del tobogan, pero suspiro al voltear a verlo -- . Ni siquiera pensaste en el hecho de que cuando vaya a visitarte, y me vea que soy tu asistente y recepcionista.

- No eres sólo mi asistente - dijo con sinceridad - Eres mi amigo e "madre" de mi Hija.

Quackity suspiró exasperado y se terminó su refresco con rapidez.

- Además - siguió Spreen -, soy uno de los mejores cirujanos plásticos; tendrás una nueva cara en un santiamén -- Alex lo miró molesto aunque sabía que Spreen no dejaría que se deshiciera de esos hermosos lunares que tenía por toda la cara - No es cierto, te daré un bigote falso.

- De verdad, no puedo creerlo, no pensaste en nada.

- No te preocupes- aunque le dio una sonrisa tranquilizadora, Quackity no se relajó -. Vamos por ropa nueva.

- Tengo ropa - dijo mientras veía como Spreen cargaba a Rivers que hace rato se había quedado dormida sobre la mesa después de llegar de jugar.

Spreen ya había salido de la zona de comida con Rivers en brazos y Quackity lo siguió.

- Quiero dar la impresión de que tuve un esposo guapo - afirmó el oso y Quackity lo miró molesto -. Ya sabes, debes parecer el esposo de un cirujano plástico. Además - dijo conectando su mirada -, debes cortarte el cabello.

- Eres un... - Quackity se guardó la gran cantidad de insultos para luego, aceptando la situación.

Recorriendo varias tiendas, Quackity aprovechó para cambiar su guardarropa sin verse afectado su salario y comprarse uno que otro regalito y Spreen aprovecho de comprarle el juguete que rivers tanto quería. Pero a la hora de cortarse el cabello, se resistió; no quería cortárselo, le gustaba cómo estaba; largo hasta los hombros pero terminó aceptando, sólo cuando Spreen prometió aumentarle el sueldo y darle más días libres por tres meses.

Un esposo de mentira. - SpreeckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora