VII.

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Varias horas de vuelo después, llegaron al hotel, donde Spreen hizo casi un berrinche por tener que pagar dos suites en consecuencia de no hacer la reserva antes.

-¿Quién quiere ir a la playa? - propuso Sally y ambos niños la siguieron.

- ¿Quien quiere embriagarse? - propuso el morocho, y tanto Quackity como Carre estuvieron de acuerdo.

Rodri - llamó Alex- se de provecho y lleva una bebida para mi, yo debo seguir a mis hijos.

El ojiverde asintió para empezar a seguir a Ivan al bar de afuera después de cambiarse. Los otros cuatro se cambiaron y fueron directo a la playa.

- Oye Sprite, ¿Qué debería escogerle a Quackity - Preguntó Rodri mientras veía la la cartilla de bebidas, recibiendo como respuesta la mirada de Spreen bajo los lentes de sol y el silencio de este -. Ya me golpeaste por haber besado a Alex - dijo con el ceño fruncido. Carre suspiró frustrado al no conseguir una respuesta.

- Lo que digas - volteo para ver la carta para después llamar al barman -. Un daiquiri - pidió mientras veía a Spreen de reojo.

- No seas boludo -- Spreen lo volteo a ver con el ceño fruncido mientras lo reprendia antes de que el barman prepare la bebida, le entrego la carta con los nombres de las bebidas.- Quackity prefiere las piñas coladas, un bloddy Mary o un Mai Tai.

Ivan ignoró la rara sonrisa y los codeos de Rodrigo le empezó a dirigir y se encaminó a la playa. La castaña infundaba un lindo traje de baño amarillo que hacia resaltar su cuerpo y su piel lechosa se dirigió a su novio.

- Ya entendí - dijo Carre miró de arriba a bajo a Sally antes de que estuviera lo suficientemente cerca como para escuchar -. Si no estuviera con Rob yo también inventara una vida falsa por esa hermosura, pero admito que Rob y tu estan mejor - dijo lo último refiriéndose a Quackity.

- Mami - Samy llegó corriendo a su lado -, ven a nadar; el agua es igual de fresca como en Francia.

- Hoy no cariño - sonrió Alex y secó a su hija menor antes de pasarle una toalla a Roier, viendo de reojo cómo Spreen envolvía a Sally en una toalla.

Al acercarse la hora de cenar, todos fueron a sus habitaciones, con la promesa de bajar y cenar afuera.

Spreen se dirigió a una de las joyerías, con la idea de que nadie se dio cuenta de que se desvio, pero como el es más salado que coleto de barco, Carre lo siguió.

-¿Enserió? ¿Anillos de compromiso? -dijo detrás de él, Ivan se giró rápidamente, al darse cuenta lo miró con el ceño fruncido. Carrera lo miró extrañado - ¿Qué?

- De verdad, me veo sentando cabeza con ella - dijo ignorandolo y siguió con su búsqueda.

-Di lo que quieras, Spreen, pero ambos sabemos que en unas semanas te cansaras de ella y volverás a la caza.

-¿Por qué todos dicen eso? - cuestiono con fastidio, ya era la tercera vez que se lo decían.

- Porque es la verdad y aunque es muy bonita no lo niego - opinó -, lo que sientes no es más que pura atracción - dijo dudando lo siguiente que iba a decir - ¿O me vas a decir que sientes lo mismo que sientes por Alex? - Pregunto para cruzarse de brazos y mirarlo con una ceja alzada.

Rodrigo no recibió más que el silencio de Spreen para después sonreír levemente - eso quería saber, ahora vamos, se hace tarde para la cena.

A regañadientes Spreen empezó a seguir a Carre con las manos en sus bolsillos, sin el anillo, pero, con la cabeza llena de preguntas por lo que le dijo su mejor amigo.

La mesa estaba llena de comida y cinco personas, todas en silencio. Hasta que la atención se centro en Carrera, a quien se le ocurrió la grandiosa idea de decir que era ovejero y por los tragos que había tomado, empezó a soltar uno que otro comentario no apto para menores.

Quackity miró a Spreen y le pidió, con la sonrisa más tensa que había visto desde que lo conocía, hablar en privado.
Caminaron lejos de la mesa, mientras Alex apretaba los puños, molesto.

- Lo siento Ivan, pero ya llegue a mi limite - exclamó Quackity con cansancio y molesto -. Le voy a dar un tiro por la cabeza a Rodrigo si lo sigo escuchando.

-¿Y si lo golpeo? - ofreció- lo golpeamos juntos y terminamos este fin de semana, por favor no me dejes.

-No me hagas esa cara - Alex frunció el entrecejo -. Simplemente no puedo aguantar más.

-¿Quackity? - llamo una voz extraña que paro la discusión del matrimonio falso -- ¿Alex Quackity?

-Oh, por dios ¿karl Jacobs? - exclamó Alex cuando el extraño se acerco y lo abrazo - Pero si es mi compañero favorito de la escuela.

-No puedo creerlo - exclamó el chico tomando sus manos, - Ambos aquí, en este hotel. Jamás creí que este era tu estilo.

Quackity hizo una mueca hacia Spreen mientras karl lo arrastraba a otra mesa.

- Te quiero presentar - Sonrió Jacobs - a mi esposo; Nicolas Sapnap.

Luego de un agradable saludo al inventor del IPod, Nicolas Sapnap, karl dio un comentario que le quito toda la tranquilidad que acaba de recuperar, o lo poco de ella.

-Ay, no sabes - exclamó con interés - Me encontré a Mónica hace unas semanas, la ex de Auron, seguro debes recordarla. La pobrecita se divorcio, ¡Y con un hijo! Ahora es madre soltera, como lamento su situación - aunque por su tono, no pareciera de verdad afectado, y con malicia agregó - ¿Y tu estas casado?

- Amm. Si - respondió de inmediato y señaló a Spreen, confiado de que ahora el alfa le seguirá la mentira -. Olvide presentarles a Iván Buhaje, mi esposo - se acercó y beso suavemente su mejilla, para luego rodearnos por la cintura y acercarlo a los otros dos .- Iván, te presento a Karl y Sapnap.

Spreen le siguió la corriente y saludo a la pareja cortesmente.

- Es cirujano, Cirujano plástico, si tenemos que irnos -- dijo apresuradamente Alex - los niños nos deben estar esperando.

-¿Tienes hijos? - Preguntó con genuina curiosidad Karl.

- Si - esta vez respondió Ivan - Dos pequeños, es que nos urgía tener descendencia.

Con una rápida despedida, y una promesa de salir a cenar los cuatro Alex se llevó a Ivan lo más alejado posible de ese par.

- ¿Y esos quienes eran? - Preguntó Ivan ya estando lo suficientemente alejados.

- La Segunda opción para "Hacer del George" - se limito a responder Quackity y volvieron a la mesa, a terminar por fin esa tormentosa noche.

Un esposo de mentira. - SpreeckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora