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Lia

¿Cómo demonios sobreviví al precipicio? Sabrá dios, porque yo no.

No recuerdo nada, absolutamente nada de lo que paso ese día. Ni siquiera tengo idea si la profesora Glory y Arthur se encuentran bien.

―¡¿Quién eres?! ¡Cómo te atreves a interrumpir el carruaje de m!

Ignore las palabras del guardia y entre al carruaje donde siento la presencia de mi abuelo y Tess. Y efectivamente, si era mi familia.

―¡Tú, insolent...!

―Abuelo, ¿por qué me llamas así? ―Me queje mientras me inclinaba hacia Tess, dejando ver mi cabello rubio―Gracias a dios, estás bien.

En eso siento como mi abuelo me jala hacia sus abrazos.

―Nosotros deberíamos de decirte eso, mocosa. ¿Te duele algo? 

―Antes me dolía mi brazo, pero ya estoy bien. 

―El collar de tu madre... 

―¿Eh? ― Mire al collar que adquirió un tono Escarlata.―Oh. No sé que le paso, pero cuando desperté, su tono ámbar ya no estaba más.

Era raro, la única explicación para mí. Es que el collar todavía tenía poder de mi madre y a lo mejor eso fue lo que me salvo la vida pero al ver la expresión de mi abuelo, creo que eso fue solo mi imaginación.

―Dejame revisarlo. ―Mi abuelo me extendió su mano.

Sí... bueno... Allí esta el otro problema.

―No me lo puedo quitar. ―Dije antes de intentar quitarme el collar.

―Respondeme con la verdad Aeryn, ¿cómo saliste con vida de allí?

Fruncí el ceño, viéndolo con confusión.

―No lo sé abuelo. Yo solo desperté en las afueras de la mazmorra.

Mi abuelo me miro como si no creyera en mis palabras provocando una molestia en mí. Le estoy diciendo la verdad. No recuerdo nada.

Iba a decir algo, cuando siento un gran peso en mi regazo, mire con sorpresa a Sylvie antes de abrazarla.―Oh, mi preciosa hija esta aquí.

―Yo también, estoy aquí Lia. ―Levante la vista para encontrarme con los ojos azules de Arthur y sonreí. Ni siquiera lo note.

―Lo siento, no te vi. ―Exclame avergonzada.―Me alegra que estés bien Art, ¿la profesora también se encuentra bien?

―Lo está.

(...)

―¿Arthur, a ti te gusta mi nieta Tessia?

―No. ―Arthur respondí sin dudar, mirando a la de cabellos blancos.

―Ah, me lo imaginé .―El abuelo de Tessia soltó un suspiro. No quería que su nieta tuviera un corazón roto.―Te gusta Aeryn, ¿no?

Arthur se quedó callado, sus ojos ahora estaban puestos en Lia que esta dormida en su hombro. Se miraba como un ángel cuando no estaba causando problemas e inconscientemente, Arthur sonrió.

―Si ella me gusta, pero aún no estoy seguro si lo que siento es amor o solo la veo como una hermana. Estoy seguro de que lo descubriré.

―Ya veo. 

Él ya lo sabía. Sabía que el corazón de Arthur ya latía por su nieta menor. La cual, no estaba enamorada de él al contrario de la otra.

Solo esperaba que Tessia no sufriera tanto.

Causa perdida: La vida después de la muerte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora