Causa perdida: La vida después de la muerte.

3 | 🗡️

Lia miro hacia esos monstruos con alas en el aire. Eran las reinas que se suponía que estarían en otro piso. Rápido tomo su arco y comenzó a inyectar mana en las flechas para después dispararles una tras otra.

―¡Asegura un camino! ―La profesora le grito a Arthur.―¡Yo y Lia nos encargaremos de los monstruos! ―Finalizo al ver la habilidad de Lia.

La profesora y Lia continuaron reprimiendo a los monstruos. Hasta que la menor siento un escalofrío y miro hacia arriba con pánico.

―¡Todos corr... ! ―No puedo terminar porque fue golpeada por un monstruo. Era cinco veces más grande que los monstruos normales.

Lia le disparo con rapidez para que la atención de ese monstruo se enfocara en ella al las intenciones de ir con sus compañeros. Al ver la distracción del monstruo, la profesora se lanzó a atacarlo sin dudar.

―¡No creo que podamos matar a esta cosa! ―Le grito Lia a la profesora Glory, que estaba al otro lado de la reina.

―Necesitaremos al menos atarla de alguna manera para poder escapar. No creo que la reina nos siga fuera de la mazmorra.

―Necesito que lo mantengan ocupado durante cinco segundos

La profesora no cuestionó lo que estaba a punto de hacer Arthur mientras liberaba otra ráfaga de mana de su núcleo y la ataco.

―¡Muévete!―A su señal, la profesora Glory se apartó de un salto mientras Arthur clavaba su espada en una herida ya existente que había logrado infligir justo antes entre sus omóplatos.

El crepitar de la electricidad abriéndose paso a través de la costura hizo que la reina lanzara un chillido agudo mientras comenzaba a sufrir espasmos.

― ¡Vamos! 

Corrían hacia la entrada principal cuando de repente, una sombra oscura paso encima de ellos. Era la reina aún con la espada de Arthur incrustada. 

―¡No se detengan!

Al llegar al final del pasillo, donde empezaban a subir las escaleras, Lia noto algo extraño en la reina que estaba a un par de metros.

 A medida que se acercaba más y más a la parte superior de la escalera, donde estaban, su cara y su cuerpo comenzaron a palpitar. Los tumores comenzaron a crecer esporádicamente en partes aleatorias de su cuerpo y cara.

"¿Intenta explot... ?"

Antes de que pudiera terminar mi pensamiento, la reina estalló en una explosión de tripas, sangre y fragmentos de exoesqueleto.

Antes de que la profesora Glory pudiera darse la vuelta, la fuerza de la explosión la empujó hacia delante junto con Arthur.

Como si eso no fuera lo suficientemente malo, la explosión causada por la reina monstruo abrió un gran agujero debajo de ella.

―¡Aeryn!

Lo último que vio Lia antes de quedarse inconsciente, fue la mano extendida de Arthur, intentando agarrala al verla caer al precipicio.

(...)

Lia abrió sus ojos escarlatas con algo de dificultad pero no podría ver bien. Solo pudo notar que estaba en brazos de alguien y tenía una larga cabellera negra. Era raro, pero sentía una leve familiaridad.

―Vuelve a dormir, Aeryn. ―Exclamo el hombre al sentir su mirada.

La nombrada cierro los ojos al escuchar eso y se durmió nuevamente.