LA ALIANZA DE CLANES (YOONMIN) (EN EDICION)

COMPLETO CULPABLE

Si lo que quieres es romperme el corazón, no lo sigas intentando, ya lo hiciste.

Anónimo.

Estoy cómodo y cobijado pero un calor inesperado me despierta, además siento que algo peludo me rodea, cuando me estiro una ráfaga helada de viento se cuela hasta mis huesos, está oscuro, me muevo con lentitud para no congelarme, escucho una respiración fuerte pero calmada, tocó con cuidado y descubro que lo que está a mi lado es un cuerpo gigante y lleno de pelaje, enfoco mi visión para lograr ver que rayos esta pasando, lentamente las imágenes van tomando forma, como si mis pupilas recién aprendieran a enfocar, estoy fuera de la cabaña y a la par mía yace un lobo...¿un lobo?

Debería estar corriendo del pánico pero en realidad solo siento curiosidad, es un gran lobo de pelaje blanco que parece protegerme del frío.

Me emociona ser merecedor de semejante privilegio, no puedo evitar acariciarlo, su pelaje es grueso pero es suave al tacto, cuando siente mis manos se acomoda mostrando un poco la barriga pero sigue dormido, es un muñeco de peluche gigante y hermoso, recorro su panza suavemente, esta se mueve al ritmo de su respiración, es una experiencia extraña, increíble y muy placentera a nivel sensorial, acariciar un lobo debe ser la terapia anti estrés más efectiva del mundo.

Sin previo aviso el cuerpo a mi lado parece encogerse, veo como el lobo va cambiando su forma a una más ¿humana? ¿acaso estoy al lado de un cambiaformas? el miedo comienza a llegar a través de mi estómago, conforme el cuerpo se va reduciendo, el frío me va atacando, sigo desnudo, rayos, ¿otra vez?, el cuerpo a mi lado se despierta de un respingo, creo que el frío también le ha calado, está desnudo como yo, me atrevo a ver su rostro.

—¿Yoongi eres tú?

—¿Jimin? ¿Qué estamos haciendo acá? ¡Me estoy congelando!   —grita y se para como un loco.

—No lo sé pero yo también me congelo —me pongo de pie y trato de cubrirme.

—Esto es una locura —se ríe tiritando—Jiminie tenemos que entrar sino moriremos en dos minutos, tu vas primero, te cedo el espacio.

—Estas loco si piensas que veras mi trasero desnudo otra vez en este día.

—Si mi suerte no cambia, no será la última —dice descarado— pensándolo bien prefiero perder el pudor que la vida, no disfrutes tanto la vista de mi culo —me jala de una mano y entramos directamente hacia la cabaña, corre como un anciano mientras grita y hace ruidos exagerados como un loco, el líder Min es un completo tonto.

Entramos haciendo un escándalo espantoso, no nos percatamos que en la sala de la cabaña esta Soobin dando instrucciones a un grupo de personas que acomodan maletas y cajas, este es el número uno de mis momentos vergonzosos de esta vida, todos voltean a vernos un poco sorprendidos, Yoongi coge un par de cojines de los sillones a nuestro lado para intentar cubrir cualquier parte del cuerpo que el frío no haya encogido.

—Lider Min —dice Soobin con una gran sonrisa— me recuerdan a mi niñez cuando a mi lobo le encantaba ir a corretear nutrias a la orilla del río, él la pasaba espectacular mientras yo cogía un tono azulado por la hipotermia.

Se acerca con un par de mantas para cubrir nuestras miserias casi congeladas, me envuelvo en una de ellas como si de una toalla se tratara y corro hacia mi habitación a tomar un baño pero a dos pasos me doy cuenta que no recuerdo cual es la mía, Yoongi me alcanza y me guía directo hacia una puerta al final del pasillo, abre la habitación y me conduce hacia el baño, él se acerca a la tina y comienza a llenarla mientras gradúa la temperatura.

—Bienvenido al mundo de las anécdotas cambiaformosas —dice divertido.

—Esa palabra no existe.

—Cambiaformistas se escucha muy aburrido —contesta mientras se agacha a tocar el agua.