LA ALIANZA DE CLANES (YOONMIN) (EN EDICION)

UNO POR CIENTO

"En la ignorancia está la felicidad."

Joe Pantoliano

Vivir y morir con honor.

Cuidar y proteger a los míos hasta el último aliento.

Esas son las máximas que rigen mi vida.

Haberme transformado a la edad de tres años hizo fácil determinar el camino que debía tomar como un cambiaformas cuando ya tuviera la edad necesaria para enlistarme; abrace mi vocación desde que tengo uso de razón, eso me llevó a ganarme el liderato del Clan Jeon a temprana edad pero la decisión de hacerme cargo de la seguridad de los líderes de nuestra alianza la tomé ese fatídico día, cuando Nam y Hobi perdieron a su madre.

Me juré a mí mismo que haría lo imposible para proteger a los miembros de mi familia. Sin embargo toda decisión lleva de la mano una consecuencia y la mía es haber crecido evitando los vínculos emocionales que pongan en riesgo a otros seres por mi culpa, soy un Líder, mi cabeza tiene un precio solo por esa razón.

Lo mismo sucede con los demás líderes, esta realidad nos ha llevado a tener una vida solitaria, aunque por decisión propia, cualquiera cercano a nosotros puede ser utilizado como un arma en nuestra contra o en contra de sí mismos, esto lo pudimos constatar cuando Nam trató de mantener una relación con Seokjin, la madre del Vampiro envió a sus sicarios a acabar con él, no pudo matarlo pero se llevó la vida de su madre humana en lugar. La relación terminó con un Vampiro con el corazón roto y con un lobo más solitario que antes, aunque ganamos un aliado de por vida y esto es literal ya que Seokjin es inmortal. 

Ni que decir que eso influenció aún más la forma de manejar nuestra vida privada hasta el punto de ver a Yoongi renunciar a la posibilidad de conocer la felicidad, eso ha sido un punto difícil de encarar.

Mi profesión no da espacio a la duda, el porcentaje de mi efectividad debe ser del noventa y nueve por ciento si quiero sobrevivir en una batalla, el éxito es parte de mi rutina sin embargo hace unos meses, ese uno por ciento faltante comenzó a transformarse en el elefante en mi habitación gracias al patrocinio de dos Alfas foráneos al Clan.

Mi primera derrota dolorosa  en términos de autoestima, vino cómo obsequio de un pequeño y rubio lobo que parecía un hada escapando de una jaula de hierro y no la letal máquina de combate que resultó ser. 

Ese día entendí que aunque pueda ser el mejor en todo lo que me proponga siempre podría haber alguien que logre superarme y si no hay forma de cambiar esa realidad al menos la utilizaría a mi favor, fui directo y claro en comunicarle mi deseo de tenerlo en mi equipo, de la misma forma espero una respuesta positiva de su parte, ese sería un logro más a mi récord de éxitos.

Sin embargo, hay una cosa en la que he fracasado una y otra vez y es tener el poder de ignorar a Kim Taehyung, el extraño lobo de sonrisa cuadrada.

Por el contrario, él ha salido triunfante ante el hecho de pasar por alto mi existencia, cuando de mala suerte coincidimos en algún lugar, hasta he dudado si recuerda que me conoce.

Aunque pensándolo bien, es obvio que me recuerda, lo he descubierto viéndome fijo cuando cree que no estoy prestando atención en él y este detalle hace que en mi cabeza las cosas se vuelvan confusas, he intentado hacer un acercamiento pero soy recibido por una sólida pared de rechazo, eso me desmotiva, me confirma una y otra vez que me odia a muerte. 

Me he preparado para la retirada demasiadas veces pero sus pequeñas sonrisas me dicen que tal vez estoy equivocado...y allí voy de nuevo listo para el siguiente rechazo.