Universos Shadamy_One-shots

Regalo (2/2)

-¡Feliz navidad!- gritaron todos al unísono.

La fiesta había empezado desde hace un rato y ya habían dado las 12.

Todos se estuvieron felicitando, excepto un erizo oscuro que andaba un poco apartado.

-Ven Shads, no seas amargado- le gritó Sonic, el mencionado sólo frunció el ceño un poco.

-Estoy bien aquí- respondió simple y Sonic rodó los ojos y siguió con lo suyo.

El de vetas rojas buscaba disimuladamente con la mirada la única razón por la que aceptó participar ese día.

Hasta que por fin la encontró saliendo de la cocina con una bandeja de galletas recién horneadas.

- ¡Feliz navidad a todos!- gritó feliz.

Los ojos de Shadow se iluminaron un poco al verla y por fin decidió acercarse cuando todos se alejaron de la rosada después de tomar una galleta.

- ¡Shadow!- habló feliz- mira, está galleta es especial para ti, ¡es de café!- apuntó con la mirada una galleta

Shadow le sonrío levemente.

-Sabes bien lo que me gusta- tomó la galleta y le dió un mordisco, el sabor a café lo invadió y no era algo muy dulce, estaba justo como le gustaba- delicioso-

Amy se sonrojó un poco por el cumplido y sonrió.

-¡Tus galletas son deliciosas Amy!- rápidamente Sonic se acercó y tomó otra galleta rompiendo el ambiente entre ellos dos.

Shadow lo miró mal y Sonic le dedicó una mirada similar pero sin perder la sonrisa.

-Gra-gracias, Sonic...- sonrió confundida, sin saber qué más decir- Llevaré la bandeja a la cocina- escapó.

-Ajá, ya vi lo que haces Shadow, no confundas la amistad de Amy con otra cosa- dijo en un tono sarcástico el azul.

-En primera, no sé de qué hablas y en segunda, no te metas en lo que no sabes- dijo molesto

El erizo sonrió socarrón.

-Solo digo, no quiero que mal interpretes las cosas- sin más se fue dejando al oscuro con la palabra en la boca.

Pero aunque no quería, le sembró una pequeña espina por más que odiase admitirlo.

-Maldito faker...- susurró para sí mismo.

-¡Es hora del intercambio de regalos!- gritó Cream emocionada llamando la atención de todos, Amy salió corriendo de la cocina.

Ya era el momento, cada quién le fue dando regalos a quién les había tocado, hasta que llegó la hora de la albina.

-Ejem- fingió toser Rouge- A mí...- pensó un poco sí decirlo o no, pero valía la pena por está persona- Me tocó una persona que es muy dulce, siempre está viéndole el lado positivo a las cosas y sonriendo no obstante, es bastante fuerte aunque algunos la subestimen, en ella pude encontrar una amiga a pesar de las circunstancias por mi pasado y gracias a ella... Conocí lo que en verdad significa amistad- sonrió feliz observando a Amy.

Desde que inició hablando ya se habían dado la idea de que se refería a Amy, pero les sorprendió la descripción que dio.

Sin embargo el equidna que la miraba sonreía orgulloso por dentro.

-Este regalo, es para Pinky- dijo feliz dejando sorprendida a la rosada.

-Eh! ¡Cómo! No me lo hubiera imaginado, muchas gracias Rouge- dijo muy feliz abrazándola con cariño.