𝐒𝐜𝐚𝐧𝐝𝐚𝐥𝐨𝐮𝐬[2° 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚]©𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚✓

CHAPTER 8

❝MUSEUM❞

AL DÍA SIGUIENTE...

N.ALÉTHEIA.

El sol se puso, indicando que era de día. Este pegaba contra mis ojos, molestandome, haciendo que me diese la vuelta, chocando con el rostro de mi hermano.

—¡Auch!—Me quejo.—Luca, tira para un lado.

Anoche ambos dormimos juntos, cediéndole mi cama a madre y a Bianca, ya que no nos agradaba la idea de que se fuesen a dormir a otro lado.

—Hora de levantarse—Nos avisó Dafne, entrando por la puerta.

—¡Ya!—Se quejó esta vez William, tapándose la cabeza con las sábanas.

—¿Por qué os tenéis que parecer a vuestros padres?—Se preguntó al aire Bianca,levantándose de la cama.

—Mirala a ella—Señaló Dafne a Aria.—Y luego mira a sus hijos.

—¿Qué mis hijos qué?—Pregunta madre, restregándose un ojo.

—Ves, Bianca—Señala Dafne a Aria.

—Lucy también está dormida aún—Dice Bianca.

—Fácil, la despierto con un cañón de agua. A ella y al hijo—Se acerca Dafne a la cama donde descansa Lucy, y usa sus poderes en ella, causando que se despertara.

—¡HEY!—Le grita Lucy a Dafne.

—¿Qué son esos gritos?—Pregunta Jiyu.

—Hora de levantarse—Le contesta Dafne.— Levanta a Will, me encargaré del resto. Y Lucy no hagas ningún show ya que estás grande—Se fue de allí en dirección a la habitación del resto.

—Ya la oyeron, está muy cascarrabias—Nos dice madre.

—No voy a enfadarme, hoy no me voy a enfadar—Dice tía Lucy.

—¿Qué pasa? Que Matthew te enfada demasiado—Se ríe pícaramente Bianca.

—Callense, no voy a hablar de esas cosas delante de los niños—Se levantó Lucy de la cama, dirigiéndose al baño.

—Will ya está despierto—Nos avisa Jiyu.

—Genial, ahora el que se tiene que despertar es Luca. Luca, ¡Ya, levántate!—Lo muevo un poco.

—Ya voy—Me dice con pereza.

Una vez ya todos listos, bajamos a la planta baja de la academia, donde se encuentran todos, incluido Dafne y la tropa.

Decido ir con Will, ya molestaría a mi hermano luego.

—¿Eres difícil de despertar, eh?—Me meto con él.—Pobrecito el ser que acabe contigo.

—¿Tan graciosa como siempre?—Me responde sarcástico.

—¡Vamos!... No te piques.

Él no dice nada, sin embargo me ofrece su brazo para que me agarre a él mientras andamos.