Su obsesión

Doctor Incredulo

*

Merlina juraba que el aire olía diferente esa mañana, la mañana en que se despertó.

Se despertó y ya no estaba en su casa de Nueva Jersey, sino en la escuela Nevermore para excluidos. Cerca de ella, prácticamente casi allí.

Enid le prestaba atención a la neblina que rodeaba el carro en el que viajaban. Ellas dos se sentaban en el asiento trasero, esperando pacientemente a llegar.

Los últimos días habían sido... interesantes. Pero Merlina y Enid todavía se hablaban, por lo cual ella estaba agradecida. Bueno, un poco.

"Entonces... ¿estás... saliendo con el Hyde?" Enid había preguntado esa noche hace una semana.

"No."

Enid hizo una mueca que parecía que había visto un gato muerto en la carretera. "Ah, OK..."

Merlina se volteó. "¿Cuál es el problema?"

"La gente no se besa con la gente que no está saliendo," susurró Enid.

Merlina arqueo la ceja. "¿Eres la experta en el tema?"

Enid se encogió de hombros. "Más o menos."

Merlina abandonó la conversación y se volteó de nuevo, cerrando los ojos.

Silencio.

Pero ese silencio no duró mucho. "¿Te gusta?"

"Enid, estoy tratando de dormir. Así que, por favor, no me hagas preguntas que puedan tener respuestas increíblemente complicadas."

"Oh... está bien..." murmuró Enid.

Silencio de nuevo, dulce silencio. Pero Enid rápidamente comenzó a temblar, Merlina no podía descifrar si era de miedo o de frío.

"¿Qué?" Ella le preguntó.

"Es que... la gente solo besa a la gente que le gusta."

"Enid."

"¡Estoy haciendo preguntas importantes!"

La conversación no continúo después de eso.

Merlina no quería hablar sobre el Hyde o Tyler, ni nada relacionado a la escuela con los miembros de su familia. No porque estuviera avergonzada, sino porque le hacían preguntas que ella no quería responder. Pero ahora todo estaba bien, todo estaba en orden y era excelente.

Merlina regresaría a Nevermore para la siguiente mitad de su segundo año en la escuela y todo saldría como se suponía. Lo que sea que eso incluya.

"¡Estoy super emocionada de volver a la escuela, la taza de chismes está a punto de derramarse!" Enid aplaudió, escribiendo un mensaje en su teléfono.

Merlina recurrió a verla fijamente en lugar de hablar, como siempre, pero ahora estaba un poco preocupada. "Espero que esos dichosos chismes no me incluyan."