Heaven | Geminifourth

⚘ 08

—Le dije a Satang que viniera hoy a casa.

Fourth traía su pijama puesta y un tarrito con palomitas recién hechas en sus manos.

Se acercó y se sentó en el suelo junto con Gemini, quién lo veía con confusión.

—Pensé que estaríamos juntos tú y yo nada más hoy —llevó una palomita a su boca.

En teoría, luego de haber ido al departamento de Gemini por algunas de sus cosas, pasarían el resto de la tarde viendo películas y disfrutando de ellos juntos.

Sin embargo, recordó que el lunes tenía que presentar un proyecto junto con Satang, y no tendría tiempo de hacerlo mañana ya que estaría en la pequeña fiesta de Ford.

Por lo que en un momento, mientras preparaba las palomitas en la cocina, le escribió al rubio, preguntándole si podía llegar en un rato, a lo que él dijo que sí.

Ahora tendría que pasar su tarde junto con su amigo y su novio.

Nada mal, ya que los dos se llevaban, algo que era bastante extraño, pocas veces Gemini socializaba, sin embargo, con Satang, logró congeniar.

No eran grandes amigos, pero sabían cómo hablarse.

—Tenemos un trabajo que hacer, pero no es tan largo, así que cuando terminemos, amablemente le pediré que abandone mi domicilio para poder tener tiempo tú y yo, ¿te parece?

—... O sea, en otras palabras, lo vas a echar cuando terminen.

-Así suena más feo -se encogió de hombros. —, pero sí. Algo así.

—De todos modos no me molesta que esté aquí.

Fourth se levantó, limpiando un poco sus manos, tomando su teléfono, que recién había vibrado con un mensaje.

—Perfecto, porque ya está aquí.

Gemini sólo parpadeó varias veces, desconcertado.

🌻🪥

Otra de las razones por las cuales él amaba música, era que los proyectos, sea en grupo o no, eran rápidos y sencillos.

Esta vez no fue la excepción.

Terminaron en menos de una hora. Lo que les llevó más tiempo fue buscar parte de la historia de la música, viejos compositores y letras.

Pero nada que buscar en línea no resuelva.

Luego de que terminaran, Fourth estuvo a punto de casi echar a Satang para tener tiempo con Gemini.

El sólo fue por un vaso de agua, y cuando regresó, ya le estaba contando a Gemini sobre su crush.

Extrañamente, el pelinegro le estaba prestando atención.

Resulta que Thanawin Pholcharoenrat (Winny) fue compañero de Gemini y otro amigo en la secundaria, sabía quién era y habían compartido algunas palabras un par de veces.

Fourth sólo tuvo opción de sentarse a escuchar cómo hablaban del otro pelinegro.

—A todo esto, ¿entonces no eres gay? —Gemini frunció el ceño.

—No, bueno, sí, o sea, soy bisexual —el pelinegro asintió.

—Interesante —cruzó sus piernas. —Punto a tu favor porque Winny sí es.

—Amor, eso seguro que ya lo sabi-

—De hecho no —le interrumpió Satang a Fourth con una sonrisa. —Dios, necesito graduarme ya.

—Ajá, ¿y tu plan es hablarle cuando te gradúes? —elevó sus cejas, viendo como el rubio asintió. —A ese paso, alguien se te va a adelantar, Satang.

—Pero si le hablo ya, para él sería raro porque va a salir con la excusa de que es mi profesor y ese cuento.

—Ah, pero tú quieres ir al punto, ¿no?

—Pues sí, qué esperabas.

—Nunca pensé que te lanzarías al agua de un sólo clavado -suspiró el pelinegro, pensando bien lo que diría después. —Yo puedo darte consejos.

—Acepto.

—Oh Dios —Fourth palmeó su frente por la ocurrencia de su novio.

—¿Qué? El estuvo en mis mismos zapatos hace un tiempo, y mira, se le dio.

Gemini dirigió su mirada a Fourth y guiñó su ojo, con una sonrisa, haciendo que el corazón del otro latiera fuertemente.

—Bueno sí, hazle caso, él sabe de esto —asintió el pelicastaño.

—Lo sé —se encogió de hombros. —Te decía que no te mandes de una vez, empieza despacio. Qué sé yo, invítalo un día por un café, o no sé.

—Lo llevaré al café donde trabaja Fo-

—Oh no, no, no, no.

—¿Por qué no?

—Ya es suficiente verlo en clase, no quiero tener que verlos a ustedes dos hacer quién sabe qué en mi lugar de trabajo —se echó hacia atrás en su asiento.

—Tengo una idea.

—Sí, sí, deja que el sabio hable.

—Puedo hablar con él.

—... ¿Qué? ¿En serio?

—Sí, déjame esa parte a mí, verás que en unos días ustedes va se llevarán bien.

—¿Cómo? -elevó sus cejas.

—Va a haber una fiesta en casa del novio un amigo, Fourth te iba a decir que si querías ir.

—¿Y tú supones que yo hable con él ahí?

—Que me lo dejes a mí, sólo haz lo que te diga cuando sea el momento —bufó. —Mira lo que logré solo —volteó nuevamente a Fourth.

—¡Ya, no me veas así que me sonrojo! —chilló tocándose las mejillas.

—¿Viste? —se encogió de hombros, sonriente. —Descuida, Tang, ese chico va a amarte.

Satang volteó hacia Fourth, con una sonrisa. —Cásate con él.

—Eso iba a hacer de todos modos —le guiñó el ojo.

Por fuera, Gemini lo disimuló con una mueca, nada parecido a cómo su corazón corrió rápidamente mientras sentía "mariposas" en el estómago.