Capítulo 1

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Decir que mi nacimiento en este nuevo mundo fue pacífico y una entrada suave es una completa mentira. Recuperé la conciencia flotando en lo que parecía ser el vacío de alguna dimensión extraña en lugar de estar tirado en algún callejón o incluso en algún apartamento para aceptar estar en un nuevo universo.

Durante mucho tiempo, caminé sin rumbo a través de la dimensión del infierno sin saber dónde estaba ni en qué me habia convertido, ya que mi cuerpo regordete estadounidense, una vez pristino, se transformó horriblemente en una monstruosa forma semi humanoide que desde el momento mismo de mi despertar a esta dimensión todo lo que sentí fue un hambre que lo consumía todo que no podía ser aliviado comiendo la escasa vida vegetal que podía encontrar mientras luchaba contra los monstruosos habitantes dentro del paisaje infernal frente a mi.

Pero antes de que mi ya escasa cordura pudiera perderse mientras caminaba hacia otro árbol cargado de frutas para intentar saciar mi hambre interminable en la distancia, como de costumbre, estaba completamente rodeado de seres monstruosamente deformados.

Mi voz era un desastre gutural y solo a través de minutos enteros de práctica pude hacer que mi garganta blindada creara palabras inteligibles, pero incluso mientras gruñía, una energía roja brillante y ominosa creció a mi alrededor mientras gruñía a los monstruos frente a mi. "¡Fuera gusanos!"

Pero los monstruos. Los demonios frente a mi no me temian incluso cuando usé mis garras blindadas para atravesarlos e incluso usé los grandes cuernos sobre mi cabeza para matarlos con violentos cabezazos. No me temían, ni huveron hasta el último monstruo. También intentaron matarme a su vez mientras protegian el árbol lleno de frutas.

Un par de horas más tarde, después de que había recogido todas las frutas del árbol y las había consumido, todavía sentía el hambre interminable dentro de mi latiendo con necesidad, haciéndome aullar de frustración por no poder escapar nunca.

'Las frutas ya no pueden mantener mi mente despejada... pensé débilmente mientras mi hambre latía al ver la docena o más de extrañas formas monstruosas que vacían muertas en el suelo cubierto de azufre y con mi creciente hambre aparentemente empezando a apoderarse de mi mente mi boca se abrió de golpe enviando una niebla de aire caliente mientras agarraba la cabeza de uno de los demonios y un fuerte chasquido resonó cuando comencé a comer cada trozo de carne frente a mi sin ni siquiera huesos, uñas o cabello escapando de mis fauces que todo lo consumian...

Al final, incluso mientras saciaba mi hambre con todo, podia poner mis manos sobre, podía sentirme crecer mucho más hasta que comencé a escuchar voces en mi cabeza a medida que entidades más poderosas aparentemente comenzaban a cazarme por deporte.

Finalmente, después de quién sabe cuánto tiempo después de que comencé a comer la carne de mis enemigos caídos, comencé a caer al suelo de azufre y me envolví en una gran túnica negra aparentemente hecha de las voces inteligibles que alguna vez me acecharon por un tiempo pero con lo indistintas que eran, pude mantener mi propia mente intacta a pesar de sus constantes susurros.

Una vez que me levanté con mi mente despejada con nada más que mi hambre siempre presente, finalmente pude reconocer lo que era. Y lo que es más importante, cómo podría escapar de este mundo infernal.

"Soy un Menos. Un Hollow de Bleach... Esto puede ser un infierno, pero no es un infierno exclusivamente para mi". Hable con mi voz perforando la gran máscara de Menos frente a mi máscara.

Saber que, aunque estaba en un infierno, era desalentador, pero mi raza, la raza hueca, tenia formas de atravesar las barreras dimensionales y con los demonios débiles que había estado consumiendo, era solo cuestión de tiempo antes de que pudiera transformarme de un Menos a un Adjuchas y luego tal vez incluso a un Vasto Lord.

Un hueco en DC Y Más Allá.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora