Ese primer día Yibo se sentó al costado de la cama en la que Zhan dormía plácidamente, su respiración lenta, su pelo cayendo sobre su hermoso rostro, la lluvia que cantaba una melodía que solo los poetas conocen y el ambiente cálido que se siente al estar cobijado dentro de la cabaña llevo al poeta a perder la noción del tiempo.
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La noche empezaba a caer lenta y la oscuridad se colaba por la ventana, Yibo se levantó mientras miraba al hombre que seguía dormido, acomodo el cabello sobre sus ojos, suspiro mirando a su perro y sonrió, su corazón se sentía cálido, aun no entendía por qué ese sentimiento estaba unido a algo llamado felicidad.
Yibo: vamos Black, tienes que hacer pis, después puedes regresar y cuidarlo
El perro miro entre los dos hombres y pareció entender la situación, aun así estaba un poco renuente a dejar al ocupante de la cama, su dueño acaricio sus orejas y lo guio fuera de la habitación.
Black tomo un poco de agua, fue a fuera por algunos minutos y regreso para que su dueño le secara las patas, Yibo lo había entrenado bien, volvió a acariciar sus orejas y con una media sonrisa en los labios dijo...puedes ir con él.
Después de cenar algo ligero y tomar una taza de té paso por la habitación de invitados ,Zhan seguía dormido así que lo arropo mejor ,no pudo evitar acariciar su rostro con suavidad mientras en un susurro decía , duerme bien Zhan.
Una vez que estaba en su cama se recostó en el respaldar ,el sueño había huido de él ,no podía dejar de pensar en el hombre que dormía en la habitación de al lado ,Zhan tenía un aura que iluminaba su alrededor ,con su sola presencia descubrió que ya no sentía soledad ,había algo en el hecho de tenerlo cerca ,bajo su mismo techo que aún no terminaba de comprender , hace muy poco que conoce al hombre ,no hablaron ,no compartieron más que las miradas a la distancia pero la perseverancia de Zhan hacia que su corazón estuviera dispuesto a conocerlo pero había mas ,el quería ,deseaba ,anhelaba que la presencia del otro permanezca haciendo eco entre las paredes de su casa ,de repente sintió la necesidad de retenerlo a su lado todo el tiempo que le fuera posible .
Cansado por el día y sus propios pensamientos que no lo dejaban dormir ,busco su computadora ,la puso sobre su regazo y abrió una página en blanco ,sus manos temblaron un poco al darse cuenta que su mente estaba llamando a los personajes de su cabeza después de mucho tiempo ,quería escribir ,lo necesitaba tanto como el aire para vivir ,pero la razón que hizo que su corazón latiera con fuerza y de que una lagrima rodara sobre su mejilla fue el hecho de caer en cuenta que esta necesidad nació en el momento que tuvo a Zhan cerca .
Antes de que pudiera pensar más o detener sus manos, estas empezaron a plasmar en aquella página en blanco la siguiente historia...
Título: El hombre de la cabaña
Autor: Wang Yibo
El hombre de la cabaña residía a los pies de una hermosa montaña, solitario por elección y bohemio de nacimiento había decidió esconderse del mundo que lo rodeaba, creyó que allí en su auto impuesta soledad era donde un día cerraría los ojos para siempre pero jamás imagino que el día menos pensado el sol tomaría la forma de un hermoso hombre un poco más joven que él y de repente comenzaría a caminar por frente a su cabaña calentando las mañanas con su hermosa y ruidosa risa...
