BLACKPINK - ONE SHOTS

You're not for me Pt. 2

You're not for me Pt. 2⪻Chaennie⪼

Jennie no espero que luego de lo ocurrido, en una mañana al abrir su puerta, en esta se encontrara un pequeño papel, el cual noto era una invitación para la boda de Roseanne.

Sobra decir que no asistió.

Ya era mucho el sufrimiento que sentía la chica de baja estatura, azabache y ojos gatunos, que ir a ese lugar y ver a su rubia favorita siendo entregada a los brazos de otra persona, definitivamente la destrozaría más aún.

Decidió trabajar en otro lugar.

Pensó que era buena idea hacerlo en una biblioteca del pueblo, la cual era asistida por casi todas las personas del lugar. No ganaba mucho, de hecho ganaba menos que en donde trabajaba anteriormente, pero eso no le importaba, después de todo, decidió ese lugar por dos razones : Por no encontrarse con Rosé, y porque amaba los libros. No es muy tarde para mencionar su gran afición por los libros, solo que antes no pudo desarrollarla ya que en casa apenas tenía Atlas, algunos que otros libros de historia antigua y Ciencia ficción, no era exactamente lo que buscan, ella buscaba una novela, dramática preferiblemente, una con la que ella se sintiera identificada. Probablemente los lectores me entiendan, ese momento determinado de nuestras vidas en el cual nos intentamos apoyar en un libro e identificar con el, y luego lloras por horas cuando te das cuenta que incluso un libro termino mejor que tu, y quisieras ser como el personaje bueno, pero te das cuenta que tu vida apesta tanto que podrias ser el villano, pero luego al terminarla o en un momento determinado de la historia sientes que no puedes más y te echas a llorar, algo asi buscaba Jennie. Y cuando se percató de que en ese lugar estaba justo lo que necesitaba, supo que había elegido el trabajo adecuado.

Luego de días enteros trabajando en esa biblioteca, se llevaba libros que devolvería después. También se le había hecho una costumbre pasar por una taberna y comprar cerveza, después de todo vivía sola.

Su vida actual se resumía en 5 cosas : Trabajar. Leer. Beber. Llorar y pensar en Rosé.

—¿En serio Chris? ¡Imbécil! ¿¡Como la dejaste irse con ese, Idiota!? —La azabache de mirada gatuna le dio un sorbo a la botella de cerveza que yacia a su lado. Se puso correctamente los lentes y continuó su lectura.

Jennie no tenía idea de cuanto tiempo había pasado.

Justo ahora se encontraba caminando por el camino que acostumbraba tomar. Saludando a conocidos, e incluso desconocidos por pura cortesía. Un día menos de trabajo, pensaba ella.

En su mano izquierda llevaba un montón de libros, ya se le hacía costumbre. En al espalda llevaba una mochila con las bebidas que serían consumidas por ella esa misma noche, mientras se hundía en el mundo de la lectura.

Dobla una esquina, e inconscientemente le llueven pequeños flashbacks. Suspira y agita su cabeza, como si aquello eliminara todo tipo de pensamientos.

Pasa por un callejón muy conocido, y escucha sollozos. Se detiene en seco, y tiene un pequeño deja vu. Siente su corazón latir rápidamente, y justo cuando quiso alejarse, sus pies ya se encontraban caminando hasta el sonido. Malditos  pies que se mueven solos, maldito corazón que late sin conciencia y maldita piel de gallina que se erizo cuando se percato que otro deja vu la azotaba, en el momento que noto a una muy conocida cabellera rubia, justo como hacia 8 años.

—¿Rosé? —Pregunto solo para cerciorarse  de que no era un sueño. Penso nunca más volverla a ver. Justo cuando ella levanto su mirada y la poso en la de ojos gatunos, sus orbes marrones la miraban con notable arrepentimiento. Pudo notar sus mejillas de ardilla mojadas por esas gotas saladas que todos llamamos lágrimas.

Intento acercarse a ella, pero unas voces masculinas se lo impidieron. Unos hombres con unos trajes muy raros corrieron a ellas, y supuso que venían por Rosé cuando noto sus ojos cargados de terror, y esa mirada que ponen los niños cuando han sido agarrados haciendo algo malo.

Tragandose nuevamente su orgullo agarro su mochila y se la lanzó a uno de los hombres, provocando que cayera al suelo. Lanzo los libros y eran tan pesados que terminaron los otros dos cayendo.

No pregunto nada y solo agarro la mano de su rubia y asustada contraria.

—¿Que pasó? —Interrogo mientras corría lo más rápido que podía.

—Me escape. Mi esposa no resultó ser quien yo crei que era, es una completa imbécil, y no pude seguir a su lado —Agachó la mirada —¿Es muy tarde para pedir disculpas? —

Al instante se le dibujo una sonrisa a la de mirada gatuna. Suspiro y se detuvo en seco justo cuando se dio cuenta que delante de ellas estaba un precipicio muy alto.

La rubia agarro los anillos que yacían en su dedo anular y los lanzo lejos.

Se miraron fijamente sin decir nada, solo se acercaron y se besaron. Después de todo Rosé nunca dejó de tener sentimientos por Jennie, solo estaba confundida.

Se separaron con sus corazones latiendo desbocados, y cuando se percataron que los hombres ya iban a alcanzarlas, se lanzaron.

En ningún momento soltaron sus manos.

—...después de todo si eras para mi... —

Ambas cerraron sus ojos, pretendiendo que morirían una vez sus cuerpos impactaran en el agua o en alguna  roca.