Capítulo 74: El Refugio de la Montaña
Zhao estaba descalzo, sintiendo la tierra bajo sus pies mientras observaba las verdes montañas que lo rodeaban. Una sonrisa se dibujó en su rostro. El paisaje, aunque áspero, tenía un encanto que le hablaba al alma.
Cuando Green le mencionó por primera vez que había comprado una pequeña montaña junto con una mansión por solo cien monedas de oro, Zhao no pudo evitar preguntarse si había alguna trampa. ¿Cómo podía ser tan barato? Pero al llegar a la montaña, comprendió por qué. El terreno, más que idílico, parecía un desafío. Se sorprendió de que no hubiera costado aún menos.
La montaña era un cúmulo de rocas azuladas, con apenas vegetación luchando por crecer entre las grietas. No era precisamente una joya escondida. De hecho, toda la montaña daba la sensación de alguien con un sombrero demasiado pequeño, dejando la mitad de su cabeza al descubierto. Era, en una palabra, incómoda.
Green, al notar la expresión en el rostro de Zhao, sintió un toque de vergüenza. Sabía que la montaña no era nada especial, pero con el poco dinero que tenían, había pocas opciones cerca de la ciudad de Casa. Sin embargo, viendo la preocupación de Green, Zhao dijo con suavidad: "Puede que no sea el lugar más hermoso, pero tiene su encanto."
Al escuchar esto, Green asintió con alivio. Para él, la cercanía a la ciudad de Casa y el bajo costo eran lo que realmente importaba. Si Zhao estaba satisfecho, eso era suficiente.
Merine y Meg también estaban a su lado, y aunque no lo expresaron, era evidente que la montaña no les impresionaba. Pero Zhao no quería centrarse en lo negativo. Decidió explorar la propiedad y ver qué más podía ofrecer.
Subieron por un camino de piedra que conducía desde la base hasta la cima de la colina. El camino, de unos cinco metros de ancho, estaba formado por piedras naturales encontradas en la misma montaña, lo que le daba un aspecto rústico y antiguo. Zhao, que en su vida anterior había aprendido sobre montañas, se sorprendió de que el camino subiera en línea recta, sin las curvas habituales que facilitan el ascenso. Pero decidió no hacer comentarios. Después de todo, este no era su mundo anterior.
Pronto llegaron a la mansión. Las paredes de piedra azul, de tres metros de altura, parecían fuertes, aunque cubiertas por musgo y con la pintura de las puertas de madera en un estado lamentable. Era evidente que nadie había vivido aquí en mucho tiempo.
Zhao y los demás bajaron del carruaje no-muerto y se acercaron a la puerta. Era una estructura imponente, de dos metros de altura y casi cinco metros de ancho, pero el paso del tiempo había dejado su huella. Green se adelantó y, con esfuerzo, abrió la puerta, que rechinó al moverse.
Al entrar, Zhao quedó gratamente sorprendido. Frente a él se extendía un patio amplio, que recordaba a la plaza de su castillo. Cuatro casas de piedra y madera se alineaban en un lado, con techos planos y ventanas anchas. Aunque las casas estaban un poco deterioradas, parecían suficientemente robustas para proteger a sus ocupantes de los elementos.
Zhao inspeccionó las casas y se sintió más optimista. Aunque no eran lujosas, las estructuras eran sólidas. Con un poco de trabajo, podrían convertirlas en un hogar acogedor.
Continuaron explorando y llegaron a un segundo patio, aún más encantador. En el centro, un árbol con hojas parecidas a las del ginkgo proyectaba una sombra refrescante. A un lado, una pequeña zanja permitía que el agua fluyera suavemente, y Zhao se sorprendió al ver pequeños peces nadando en ella.
El ambiente era sereno, casi mágico. Zhao se sintió en paz, como si todo el estrés y la incertidumbre de los últimos días se desvanecieran en ese rincón escondido de la montaña.
"Abuelo Green, este lugar tiene algo especial," dijo Zhao, admirando el paisaje. "Pero me intriga una cosa: ¿cómo es que estos pequeños peces no se congelan en invierno?"
Antes de que Green pudiera responder, Merine sonrió y explicó: "Señor, creo que esta es agua de manantial termal. La temperatura del agua se mantiene siempre cálida, lo que permite que estos peces, llamados 'peces de fuego', sobrevivan. Son criaturas tropicales, adaptadas al calor. De hecho, estos peces son una delicadeza muy apreciada, con un sabor exquisito. Incluso se dice que el rey los sirve a sus invitados más distinguidos."
Zhao se inclinó y metió la mano en el agua. Sentir la calidez en su piel le confirmó lo que Merine decía. Era un manantial termal, algo que jamás habría imaginado encontrar aquí. Los peces, ágiles y veloces, parecían disfrutar de su entorno.
"Este lugar tiene más valor del que pensaba," dijo Zhao con una sonrisa. "Podríamos criar estos peces y, con el tiempo, convertir esta montaña en un verdadero refugio. Además, podríamos usar las piedras azules de la montaña para fabricar herramientas o incluso esa piedra de molino que necesitamos."
Green, compartiendo el entusiasmo de Zhao, asintió. "Sí, señor, creo que hemos encontrado un verdadero tesoro aquí. Tenemos todo lo que necesitamos: agua caliente, comida y materiales. Esta montaña nos puede dar mucho más de lo que esperábamos."
Zhao, satisfecho con su nueva propiedad, miró a su alrededor con nuevos ojos. Esta montaña, con todas sus imperfecciones, se estaba convirtiendo en un lugar de esperanza. Un lugar donde podrían prosperar y construir un futuro mejor.
ESTÁS LEYENDO
Trasplantados en lo Desconocido
FantasíaEn un lugar especial de nuestro mundo, donde la magia y la ciencia se encuentran, una granja común se convierte en el epicentro de una aventura extraordinaria. De repente, ocurre algo misterioso y nuestro protagonista es llevado a un nuevo lugar. Al...