El sol comenzaba a salir poco a poco en el imperio de Orario, los mercaderes de frutas preparaban sus puestos y los puestos de comida comenzaban abrir. Los herreros sacaban armas a la venta y el gremio como todo los días, se preparaba para recibir aventureros.
Cada persona de Orario seguía sus rutinas, las personas no combatientes se dirigían a trabajar mientras que los combatientes se dirigían a la gran mazmorra a luchar contra los monstruos. Otros ayudaban en las tiendas, cocinas, etc...mientras que los guardias de la puerta al imperio de Orario se encontrarían con un día bastante diferente a lo usual.
– ¡Siguiente! – El guardia gritó para que una nueva persona se moviera hacia adelante – ¿A qué viene a Orario? – preguntó.
Frente al guardia se encontraba un señor de aspecto mayor, de prendas algo desgastadas y sosteniendo todo su peso en un bastón.
– Estoy aquí para ver a mi nieto – Habló el señor – pensaba hospedarme unos días.
El guardia miraba a su compañero, quién asintió inmediatamente y le hizo seña al viejo para que lo siguiera hacia una habitación unos pasos alejado de la puerta principal.
– ¡Siguiente! – Grito para que la siguiente persona avanzara.
Frente al guardia, se encontraba un chico con capucha negra y una máscara negra que solo cubría desde su cuello hasta su nariz.
El guardia observó detenidamente al chico, viendo más a fondo el aspecto del joven. Alto, Algunos músculos no tan extravagantes, unos ojos rojos carmesí y unos mechones blancos que cubrían su frente.
– Joven, necesito que se quite la máscara y la capucha, necesito observar su rostro y hacerle unas preguntas, para así poder registrarlo como ciudadano en Orario – El Guardia habló mientras señalan su capucha.
El chico miró al guardia, quién también lo miró para sonreír amablemente.
– Son las reglas, también necesito revisar el equipaje que lleva en este momento con usted, caballero – El guardia señaló una bolsa grande que se encontraba con el chico.
El chico miró al guardia, para minutos después sacar una carta, dicha carta que entregó al guardia.
El guardia al ver esto quedó completamente sorprendido, ya que era una carta escrita por el mismo Ouranos y con el sello del gremio. El hombre protector de las grandes puertas de Orario hizo señas a su compañero, quién inmediatamente se acercó hacía él.
– Es una carta escrita por Ouranos, así que debe ser algo serio – Dijo para mostrar la carta – Llévalo enseguida hacia el gremio.
El guardia asintió a las órdenes de su superior para momentos después hacerle señas a el joven para que lo siguiera.
– ¿Por qué hay pocos guardias en la puerta principal ? – preguntó con bastante intriga el chico.
El guardia superior miró hacia la puerta para solo ver a dos personas protegiéndola.
– Ha pasado muchas cosas últimamente, así que no tenemos mucha seguridad en las puertas en estos momentos. Cómo puede observar, solo somos cinco personas.
El hombre comenzó a señalar a cada guardia, dos guardias en la gran puerta, el guardia que se había ido hace unos momentos con el señor mayor y que ya estaba regresando y por último, él y el otro guardia que estaba a su lado.
– Entiendo – El chico comenzó a caminar hacia adelante a dirrección de las grandes puertas – No es necesario que me guíen, quédense aquí y cuiden las puertas.
Dijo para seguir caminando hacia la puerta.
– Una cosa más...si ven a una persona con un comportamiento bastante inusual, avisen de enseguida al gremio – dijo mientras estaba apunto de entrar a Orario – Y sobre todo, si ellos los atacan, corran y no peleen contra ellos.
Dicho eso el joven comenzó a entrar por las puertas de Orario luego de que haber hablado con los guardias.
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.•|| Sede de la familia Zeus ||•
En la sede de la familia más fuerte de Orario, se encontraban varios aventureros poderosos sentados en una mesa redonda junto a un Dios de cabellos blancos, barba y unos ojos azules, una piel bronceada y un cuerpo en forma, un Dios con bastante poder tanto en el mundo mortal como en el tenkai, el Dios Zeus.
En la mesa se encontraban varios aventureros de la familia Zeus y algunos aventureros de la familia Hera.
Dos familias que desde hace más de dos décadas han mantenido una alianza coronándose como los reyes de las familias de todo el mundo.
– Nuestro objetivo en esta expedición será llegar al piso 60 – Habló el Dios de los cielos y los truenos, Zeus.
A su lado se encontraba la diosa Hera, quien tenía un semblante serio y firme.
– Cómo sabrán, el piso 60 es un piso totalmente nuevo para nosotros, es un piso jamás explorado, ya que nuestro límite siempre fue el piso 59, pero mañana....– La diosa sonrió ferozmente y miró con un gran brillo en sus ojos a los aventureros delante de ella – La familia Zeus y Hera ¡superarán todo límite que se atreviese en su camino!
– ¡Somos conocidos por superar nuestros límites, y siempre seremos recordados de esa manera! – Dijo Zeus mientras levantaba su mano y cerraba con fuerza su puño.
Todos los aventureros presentes tenían una sonrisa en su rostro y festejaban por en gran logro que se acercaba a ellos pero, dos voces conocidas hablaron interrumpiendo el festejo.
– Cómo saben, el piso 60 es totalmente inexplorado, ninguna familia ha llegado allí, nosotros seremos los primeros en conocer más profundo a la mazmorra – La mujer miraba a sus camaradas para segundos después, voltear a mirar al dios de los cielos, quien también la observaba – El piso 60 es un piso totalmente peligroso, no sabemos que tipo de monstruos nos esperan ahí.
Todos los aventureros asintieron a lo dicho por la mujer.
Otra voz resonó en la sala en la que estaban reunidos, perteneciente a otra mujer también, con un aspecto bastante similar, aunque sería mejor decir que sería un aspecto idéntico a excepción de sus ojos.
– Alfia tiene razón – Su voz suave llamó la atención de todos – El piso 60 es un piso peligroso, ya que no sabemos que monstruos están ahí, el gremio nos encargó la misión de buscar unos cristales, pero también, nos encargó la misión de recolectar información de ese piso y los demás pisos que siguen.
Todos miraban atentos lo que decían ambas mujeres.
– Deben tener sumamente cuidado con que monstruos enfrentan y también deben recolectar toda la información posible del piso 60 y principalmente, toda información de sus monstruos – Dijo para acercarse a Zeus y Hera.
Ambos dioses miraron a la mujer de ojos verdes, quien les sonreía. Ambos dioses se miraron entre sí y hablaron al mismo tiempo.
–¡Todos avisen a los demás y díganle que vayan a el bar de la abundancia! Hay que festejar.
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.Danmachi: Dragón Blood
Capítulo 3: Orario
By; Wallenxstain-sama
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Dragon Blood | • Danmachi •
FanfictionUna profecía que jamás fue contada, Dioses, mortales , demonios y los pocos dragones que quedan en el mundo. . . . Luego de la guerra de los 100 años, los mortales junto a los dioses se encontraban en una paz que no duraría bastante. La única espe...