Levi Ackerman (One Shots/+18)

[11] Fantasías.

Nota: De antemano me disculpan si hay errores en el capítulo, fui muy morbosa y abierta en este shot, por lo que volver a leerlo para poder corregirlo me da vergüenza conmigo misma y por eso evitaré leerlo otra vez, simplemente lo dejaré así JAJAJAJA.

Ando en esos días donde las hormonas están a millón😮‍💨

En fin, espero que les guste. Obviamente le di mi toque de drama porque ya saben cómo soy, soy signo Libra y amo el drama🫣 Lxs Tkm!💜

GRACIAS a todas las personitas que votan🥺 de verdad es muy lindo saber que les gusta lo que estoy escribiendo🥺

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Todavía no podía creer que había accedido a venir a este tipo de lugar, pero yo quería experimentar nuevas cosas con Jean, y si eso implicaba salir de mi zona de confort, con mucho gusto lo haría.

Estacionó el carro y me miró con picardía, agarró el vibrador pequeño de control y me lo metió en mi cavidad, y el otro costado del pequeño juguete acariciaba mi clítoris, aprovechó en acariciar mis pliegues mientras me lo metía y lamió sus dedos, me acerqué a él y lo besé, mordiéndole el labio inferior.

Apretó uno de los botones del control y sentí una vibración repentina en mi clítoris, gemí y Jean se rió.

—Funciona.

—Mucho -Me ruboricé-

Yo no traía ropa interior bajo mi vestido, vine con toda la intención de explotar mi lado más morboso y disfrutar de mi sexualidad junto a él. Además que me pareció divertida la propuesta de toquetearnos en un lugar público.

Se bajó del carro, abrió la puerta y el guardia de seguridad nos pidió identificación y nos revisó, sentí que me toqueteó entera pero entiendo que por el lugar y la temática es necesario. Un club sexual no es algo donde pueda entrar cualquier persona.

Jean entrelazó su mano con la mía y entramos al lugar.

La piel se me erizó sólo al entrar, era increíble la tensión sexual que se podía percibir. Y no pensé que habría tanta gente, pero la había. Casi no se podía distinguir porque las luces eran muy cálidas y de intensidad bastante baja, lo que le daba un aire sensual y seductor claramente.

Habían mesas, sillones, butacas, pista de baile, bar, de todo un poco. Habían parejas frotándose en los sillones, besos grupales, gemidos casi imperceptibles por la música.

Mi corazón se aceleró, una parte de mí se sentía entusiasmada por esta experiencia, además que estaba en esos días donde las hormonas están a millón y quieres tener sexo todos los días. Y por el otro lado, me sentía extraña. A pesar de lo morbosa y pervertida que podía ser, esto se salía un poco de control.

Jean me dirigió hasta una de las sillas con una mesa alrededor, me senté y me pidió que le diera unos minutos, que iría por unos tragos.

Me quedé sentada y visualicé a mi alrededor. Al lado de la mesa había una pareja que se estaba comiendo la boca, prácticamente se estaban follando con ropa. Agrandé los ojos y desvié la mirada.

A lo lejos un chico me miró, me ruboricé y miré hacia el piso. En este lugar no podías mantener contacto visual con alguien porque inmediatamente pensaría que quieres darle duro contra el muro.

La mesa en la que yo estaba empezó a moverse, la parejita que estaba a mi lado estaba casi que recostándose en ella. Gruñí y los miré de mala manera.

—Hey -Coloqué mi mano donde la chica se iba a acostar- Yo estoy aquí, ¿Pueden ir a otro lado?

Me ignoraron, el chico le apretó el culo y le mordió el cuello, haciéndola acostarse aún más.