Chanyeol sabe que debía acabar con él en un instante, no perder más tiempo y simplemente deshacerse de él en cuanto pueda, pero aquellos ojos negros no se lo permiten.
Y si bien nunca se había sentido incompleto, ahora sentía que no podía dejar ir a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Kyungsoo no era la clase de persona que se quejaba, tampoco era la clase de trabajador que daba problemas, más bien, era la clase de persona que actuaba como si de hecho, no tuviera problemas con nada. Siempre había sido así y había seguido con esa línea desde que había conseguido empezar a trabajar para el señor Woong o quizás desde antes, nunca antes había dudado de sus decisiones pero entonces había pasado todo eso con Baekhyun y había dicho que solo había un manera de hacer que las cosas salieran bien para todos, KyungSoo no estaba tan seguro de eso, pero tampoco pudo decir nada.
Todo lo que estaba pasando le parecía inaudito, no podía creer que Baekhyun estuviera al cuidado de la persona que más odiaba en el mundo, era realmente complicado de creer, pero esa era su realidad en esos momentos y no le había gustado para nada.
Había estado cuestionando de manera recurrente al señor Woong sobre iba a dejar que las cosas siguieran así, pero aunque al principio el señor Woong dijo que quería intervenir, su decisión había cambiado en los días que habían estado siguiendo a Baekhyun en su nueva vida montada y patrocinada por Park Chanyeol.
Baek ahora vivía en la casa de sus sueños, con jardín y piscina, pasaba toda la mañana en la cocina cocinando deliciosa comida para su esposo, recibía mimos regalos caros y realmente no se preocupaba por nada, Woong había dicho que jamás lo había visto sonreír tanto y Kyungsoo odio admitir que era verdad. Baekhyun antes de todo eso no había tenido una vida sencilla, siempre se estaba preocupando por cosas que no debería y en sí su vida era muy dura, actuaba de manera desinteresada cuando en realidad estaba tan herido, era una persona tan rota que pensaron que le costaría años recoger todos sus pedazos, pero Chanyeol no solo los había recogido y juntado de nuevo, sino que también los había pulido y hecho brillar preciosamente.
KyungSoo había visto a Baek sonreír mucho incluso cuando estaba con sus vecinos, tenía amigos, personas con las que hablaba de una boda de ensueño que quería tener y odio tener que aceptar que esa era la vida que Baekhyun siempre había querido tener y ahora tenía pero quizás no lo sabía.
Chanyeol había aceptado trabajar para el señor Woong sin tener muchas opciones, KyungSoo supo que realmente él señor Woong no quería eso, al final, Chanyeol era un tipo que era del bando enemigo, era peligroso y también una amenaza para ellos, sin embargo, era mejor mantenerlo de su lado, porque ahora era una presa para Jung Jae y por lo tanto, Baekhyun también lo era y de alguna forma el señor Woong no quería que Baekhyun perdiera toda esa felicidad que había conseguido en tan poco tiempo, Kyungsoo no estaba seguro de porqué, porque pensaba que Baek estaría mejor con ellos, pero no se atrevió a presentar tus dudas ante su jefe, pensó que lo mejor era simplemente quedarse callado.
-Baekhyun dará a luz por la noche, Chanyeol me lo dijo.- esa tarde, cuando estaban en la oficina central, Woong había dicho eso a todos sus hombres, Kyungsoo sin embargo había sido el más sorprendido.
-¿Ya han pasado cuatro meses?- preguntó y Woong asintió lentamente, mientras estaba mirando una foto que tenía con Baekhyun y algunos de sus chicos en una noche de juerga que habían tenido hacía un tiempo, la había acomodado mejor y parecía un padre ansioso, acariciando un poco la barba que creía en su mentón y mejillas en forma de candado por su cara, ya algo teñida por algunas canas. -¿Estará bien?-
