Chanyeol sabe que debía acabar con él en un instante, no perder más tiempo y simplemente deshacerse de él en cuanto pueda, pero aquellos ojos negros no se lo permiten.
Y si bien nunca se había sentido incompleto, ahora sentía que no podía dejar ir a...
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Había esperado hasta que el señor Woong y SeHun se habían ido, eso había sido pasada la madrugada, luego de que la cirugía de Chanyeol hubiera terminado, por eso Baekhyun se había apresurado para poder ir directo a la habitación de su esposo una vez los vio lo suficientemente lejos. No quería que ellos siguieran interfiriendo con sus planes, con sus ideas, no quería hablar más con ellos, pero se moría por ver a su esposo, lo necesitaba.
Baekhyun había entrado a la oficina como si fuera alguien completamente silencioso, como un ninja y cuando cerró la puerta a sus espaldas, terminó suspirando al ver a su esposo ahí, sobre una camilla conectado a un montón de cosas que marcaban sus signos vitales, por lo que Baek sintió que su corazón se rompía en pedazos, creía que no lo había visto tan herido nunca, ni tan frágil, ni tan inmune.
Se sintió terrible por eso, no podía creer que las cosas hubieran terminado así para él, aunque tampoco quería creer que eso era el final.
Camino con prisa para poder sentarse a su lado y poder verlo mejor, uno de los ojos de Chanyeol estaba morado e hinchado, realmente hinchado, no se quería imaginar cómo se veía antes de que se le bajará un poco, también tenía los labios hinchados, eso era evidente, había recibido muchos golpes en su bonita cara, Baekhyun solo acarició su mejilla con cuidado, en donde tenía un montón de vendas que le cubrían más heridas.
-No puedo creerlo.- dijo Baekhyun, sintiendo un gran nudo en su garganta, no era tan sentimentalista, jamás lo fue, pero desde su accidente como que esa pequeña parte sensible de él se había hecho demasiado grande, pensó que era evidente, por lo que terminó lloriqueando un poco apenas lo vio, no quería que se viera así, quería verlo bien. -Te sigues viendo muy guapo, no te preocupes.- Baekhyun sonrió un poco y luego miró el resto del cuerpo de Chanyeol, viendo como estaba sin camisa, tenía todo el cuerpo vendado, pero ya no estaba sangrando, por lo que Baekhyun se sintió demasiado feliz por todo eso, aliviado más bien.
Baekhyun se apresuró a tomar su mano, la de Chanyeol, la que se sentía como la de un muñeco de trapo, sin nada de fuerza, como si ni siquiera estuviera ahí, por lo que Baek terminó sosteniendo con fuerza entre las suyas, mientras lo miraba de cerca, no podía ni ver completa la cara de Chanyeol, porque tenía una mascarilla que lo ayudaba a respirar, por lo que terminó suspirando, se sentía aterrado de estar viviendo eso.
-Chanyeol, no voy a dejar que esos dos queden impunes, ¿sabes?- Baekhyun alzó sus cejas un poco, con su mirada perdida en el agarre de sus manos. -No voy a dejar que se salgan con la suya, van a pagar esto que acaban de hacer contigo, casi te quitan de mi lado y eso es algo que no voy a permitir.-
Baekhyun sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas, pero también sintió un gran nudo en la garganta, sentía rabia combinada con tristeza y eso era tan horrible, sentía que iba a vomitar. Miró la mano de Chanyeol y la sintió tan tibia, casi fría, era como si fuera de porcelana, Baekhyn le miró de nuevo el rostro y escuchaba el latido de su corazón en forma de un pitido, eso no le gustó.
