Sin Manipulaciones, Príncipe

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 4

Narra Severus

Saliendo de la casa fuero a tomar un autobús que los dejara en Londres, Severus no sabía muy bien hacia donde se dirigían, pues si bien ya era mayor, nunca se tomó el tiempo de visitar toda Inglaterra mugel. Se había dedicado explícitamente a, primero: ser uno de los mejores Mortífagos, duelista y pocionista más joven. Segundo: ser el espía del bando de la luz y oscuridad, protector del joven Potter, maestro de pociones, jefe de casa y director de Hogwarts.

Entonces, estubo muy ocupado dejando que controlarán su vida, y es por esta situación que no sabe a donde se dirijen, Tobias vivio toda su vida en el mundo mugel, y paseándose por cada cantina que encontraba. Por ello era obvio que conociera más Inglaterra mugel que el.

No sabía en donde se habían bajado, solo seguía a Tobias por donde lo llevaba, debía de admitir que el lugar donde estaban era hermoso, no había otra palabra, las calles, las tiendas, todos los lugares eran muy elegantes, se notaba que estaban como en un tipo de barrio rico, pero no sabía con exactitud bien, las veces que estuvo en lugares muy caros e importantes eran como la mansión Malfoy, y en si, cualquier lugar de sangre puras en el mundo mágico.

Nos detuvimos en un hotel demasiado bonito como para que estuviéramos ahí, se notaba que las personas que salían y entraban eran personas con buena estabilidad económica, no sabía que planeaba Tobias, talvez solo se detuvo a preguntar algo.

-Escucha Severus, quiero que te quedes aquí en lo que vengo, no me tardó, tengo que preguntar algo- dijo Tobias mientras me dejaba, y estaba en lo correcto cuando se metió a la recepción del hotel, seguro a pasar pura vergüenza por solo ir a preguntar algo o, bien solo pedir permiso para que le dejen hacer sus necesidades

Mientras Tobias se adentraba, yo me quedé observando el lugar, era realmente muy imponente, escuche a unos señores que iban pasando que se llamaba Meliá London Kensington member of Meliá Collection, y que es un lugar algo caro, pero se notaba que ese "algo" era mucho para alguien como él.

Después de eso preferí bajar la mirada en lo que esperaba a Tobias, la gente que pasaba se me quedaba viendo como si fuera suciedad a la que deberían de correr, nunca se sintió más aliviado de ver a su padre que en ese momento.

Se le veía felíz, y eso le preocupaba, y si lo vendió, o le metió en problemas y ahora vendría la policía por él, dejó sus divagaciones para observar como recogía las escasas cosas que se llevaron para que le indicara que lo siguiera.

-Papá, a donde vamos, no estarás pensando en meterte en ese hotel verdad?- pero Tobias solo le dijo que no se preocupara

Al ingresar, los recibió una recepcionista muy educada, y para colmo descarada, la señora no tendría más de los 30's pero era muy guapa, cabello Rubió, curvilínea 90, 60, 90, un maquillaje exagerado en toda la extensión, su labial rojo tan Chillón que creía que le haría daño a sus ojos, muy coqueta mente le hablo a mi papá mientras los dirigía a el elevador, y marcaba el último piso. El no veía la necesidad en que los acompañara pero no dijo nada.

Al llegar a la habitación asignada, le entregó la llave y se retiró contorneado sus caderas, para mi sorpresa y gran gusto mi padre no le prestó ni un gramo de su atención.

Porque, por mucho que odiara a su padre, entendía que era un hombre guapo, aparentaba ser un hombre tosco, pero, si le ponías bien atención era alguien muy elegante, casi "delicado" pues por mucho que se dejará la barba, hiciera mucho trabajo pesado y sus músculos eran definidos, no era tan tosco, era más bien un hombre guapo, si se quitaba la barba y se vestía de forma menos Andrajosa, con ropas más a su medida, se vería alguien de alto estatus.

Pero no era así, eran pobres.

Nos instalamos en la recámara que era más grande que toda la Hiladera de la Sala y cocina, ni que decir del baño, parecía que se podrían bañar 10 personas ahí, la cama no se quedaba atrás, era una cama king size con dorseles, la habitación en si era muy hermosa todo para ser exactos.

-Bien Severus, nos vamos a quedar aquí por una noche, después vamos a rentar un coche y nos vamos a dirigir al lugar que te había dicho.