Entre Dos Serpientes

Su Tiempo Llego

Draco acostumbrado a decir la última palabra, no estaba complacido de que fuera Hermione quien hubiera puesto punto final a su relación, más cuando sabía de antemano que por fin Nott tendría la oportunidad que había estado buscando desde aquel último año en el colegio. Pensar en ello le había hervir la sangre, no estaba dispuesto a perder ese juguete que le había costado tanto esfuerzo y tiempo ganar, solo porque su amigo creyera que ya era su tiempo.

Fue estúpido haber forzado tanto las cosas, hasta ahora se daba cuenta de ello. Pero se consolaba al pensar que no estaba todo perdido, Hermione lo adoraba, estaba seguro de eso y solo bastaría volver a conquistarla y ganarse su confianza, para tenerla de nuevo comiendo de su mano, al menos eso era lo que creía.

Se encontraba ideando un plan para acercarse a ella de nuevo y si para lograr su objetivo tenía que complacerla y hacer pública su relación lo haría, por mucho que eso le disgustara.

Malfoy estaba dispuesto a llevar todo hasta las últimas consecuencias con tal de tenerla de nuevo, aunque se resistía a admitir que sintiera algo real por ella, en el fondo sabía que hacía mucho que  había dejado de ser solo un juego, aun cuando no sabía definir en lo que se había convertido realmente para él.

Quizás ese era el motivo por lo que se esforzaba en mantener todo en secreto, para tener la falsa idea de que podía controlar lo que comenzaba a sentir por ella, para demostrarse a si mismo que podía dejarla cuando quisiera y que era una más del montón que aria todo lo que le pidiera y cuando dejara de ser interesante la botaría como al resto de sus muchas amantes.

Era su amante, no su novia en toda regla, eso era lo que repetía cuando la mañana lo sorprendía en su cama y no tenia deseos de dejarla, como lo aria con cualquiera de sus conquistas.

Era su amante, no su novia. Se decía cuando se encontraba pensando en ella a cualquier hora del día, cuando se le hacían largas la horas para tenerla de nuevo.

Es solo deseo, se repetía cuando entraba en ella, cuando la besaba con tanta necesidad que le asustaba estar perdiendo el control de las cosas.

No se dio cuenta que el juego se convirtió en algo distinto con el paso del tiempo, hasta ahora que la había perdido se daba cuenta que quizás, solo quizás, ella habia sido mucho mas que una amante de ocasión.

*o*O*o*

Era verdad que Granger lo quería y que jamás había amado a nadie como lo amaba a él, incluso comparando lo que sintió alguna vez por Ron, existía un abismo de diferencia entre ambos sentimientos, sin embargo, eso no significaba que seguiría permitiendo que dominara su vida de la manera en que lo había hecho.

-Debes de dejar de atormentarte. -Escucho la voz de Theo, quien en ese momento entraba con una taza de humeante café.

-Hola. -Saludo intentando sonreír.

-Hola extraña. -Cruzo la oficina y se acomodó frente a ella, rodeando el escritorio para entregarle la bebida.

-Gracias.

-Sabes que la mejor manera de agradecer  en con una sonrisa. -Ella lo intento pero no lograba que esa sonrisa iluminara su mirada como solía hacerlo, en lugar de eso sus ojos se nublaran a pesar de negarse a derramar alguna lágrima.

-Lo siento. -Se disculpó por sus debilidades.

-El que debería sentirlo es el y no tu. -Le dijo abrazándola.

-Eso ya no tiene importancia.

-Tiene mucha importancia si eso te tiene así.

-Ya pasara. Todo sana con el tiempo, todo se olvida.

-No todo se olvida con el tiempo Hermione. -Replico Theo refiriéndose a sus sentimientos por ella, que lejos de disminuir habían crecido tanto que ella era la única dueña de su corazón.

El castaño aun la sostenía entre sus brazos tratando de confórtala cuando escucharon que alguien abria la puerta para entrar sin antes anunciarse.

-Que conmovedora escena, mi novia y mi mejor amigo juntos. -Soltó con sarcasmo. -No pensé que tan pronto me cambiaras linda.

-Draco no digas estupideces.

-No son estupideces cariño, quizás no te has dado cuenta pero Theodore muere por ti.

-Ni siquiera me desgastare en contentarte y será mejor que te marches de mi oficina, no tengo nada que hablar conmigo.

-Solo digo la verdad, si quieres puedes preguntarle.

-Hermione yo... -Intento decir el castaño.

-No es necesario que digas nada. -Lo atajo pensando que todo era parte de un nuevo juego psicológico del rubio.

-Atrévete a negarlo Nott. -El rubio lo reto, con la mirada llena de rabia.

Draco no había imaginado que los encontraría juntos, mucho menos que sentiría celos al hacerlo y que estos provocarían que actuara de manera impulsiva.

-Cuéntale a Hermione como has estado enamorado de ella desde el último año en Hogwarts, como las has amado en silencio todo estos años y te has mantenido a su lado. Te aseguro que le parecerá tan romántico y patético que quizás sienta un poco de lastima y solo por eso te de la oportunidad que tanto has buscado.  -Soltó con desdén.

-¿Tu lo sabias? -Pregunto con sorpresa, apretando los puños.

-Claro que lo sabía.

-Sabias que la amaba. -Repitió comprendiendo que Draco había sabido desde un principio de sus sentimientos hacia la chica y aun así se había atrevido a enamorarla.

Furioso le propino un puñetazo en pleno rostro a Malfoy.

-¡Theo! -Grito asustada Hermione al verlo tan fuera de sí. -¡Por favor, cálmate! -Le suplico poniéndose entre ambos para que no continuaran peleando.

-Eres un cobarde Nott. -Se mofo limpiándose la sangre del labio que se abrió debido al golpe. -No es mi culpa que jamás tuvieras el valor de confesarle nada.

-Aquí el único cobarde eres tú. Sabes que si no dije nada cuando tuve la oportunidad fue porque me dijiste que estabas enamorado de Hermione y fui tan estúpido para creer que eras sincero, me hice un lado porque eras mi mejor amigo, porque si hubiera sido cualquier otro hubiera luchado por conquistarla. Pero eras tú, al que considere casi mi hermano.

-¡Vete Draco! -Exigió la castaña sosteniendo a su amigo del brazo para que no se lanzara de nuevo sobre el rubio.

-¿Quieren privacidad para revolcarse? ¿Qué acaso no pueden pagar ni siquiera un hotel?

Esta vez fue la mano de Hermione quien se estrelló contra el rostro de Draco.

-No nos ofendas. No volveré a repetir que te vayas. -Sentencio con el rostro enrojecido.

-¡Como quieras! Después de todo son el uno para el otro, igual de patéticos.

Malfoy salió dando un portazo al hacerlo.

-Lo siento. -Ahora era Theo quien se disculpaba.

-¿Es verdad lo que dijo?

-Todo es verdad, lamento que te enteraras de esta manera.

-¿Por qué no me lo dijiste antes?

-Lo intente muchas veces, pero nunca parecía el momento adecuado, después de todo tu estabas comprometida con Weasley y cuando todo termino entre ustedes fue cuando Draco entro en tu vida.

-No sé qué decir, yo no... -Intento decir, pero el se lo impidió posando uno de sus dedos sobre sus labios.

-No necesitad decirme nada, sé que no me quieres y te mentiría si te dijera que no deseo con todas mis fuerzas que algún día cambie eso, pero ante todo soy tu amigo y quiero que tu seas feliz. Solo te pido que no me saques de tu vida por esto, ni vida había sido demasiado vacía hasta que tuve la fortuna de conocerte.

Hermione como toda respuesta lo abrazo. Tenía mucho en que pensar y lo único que tenía seguro es que no deseaba alejarse de Theo.