『 Meeting 』 - 2yeon

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Nayeon estaba triste, sentía que su corazoncito iba a explotar. Estaba sola otra vez, se habían llevado a su nuevo amigo. Y su madre también se había ido. Quedo sola nuevamente. No era nada nuevo, pero por alguna razón se sentía muy deprimida. Lágrimas rodaron por sus mejillas, recordó todas las veces en que había tratado de tener compañía, todas fallaron, desde mascotas que se escapaban, hasta momentos como este, en el que sabía que aunque llorará nadie iba a llegar a consolarla .

Todo tipo de pensamientos pasaban por la mente del cachorro. No sabía cómo, pero de un momento a otro, ahora tenía una manada. Estaba feliz, su cola y orejas al aire libre, eran la evidencia, no podía retener la emoción, daba pequeños saltitos en el pasillo esperando a Momo.

Entro a la habitación, vio a Dahyun sentada en el borde de la cama, corrió hasta llegar a su lado, se puso de rodillas y se acomodó entre sus piernas. Sería tan humillante que alguien más la viera así .

-Te extrañe mucho - restregó su cabeza en el pecho de la omega - ¿Tú no ?

-Si, mucho - acariciaba a su rostro - ve a tomar un baño - frunció el seño - apestas a vampiro - se alejó molesta.

-Sobre eso.... - sonrío nerviosa.

-¿Que demonios hiciste? - furiosa - ¿Tú nunca aprendes verdad? Explícame todo ahora mismo - estaba indignada, y con toda la razón, siempre era lo mismo con su esposa.

-Verás... - respiró profundo - yo-o... este - estaba a punto de morir por los nervios, y su esposa estaba a punto de matarla con la mirada.

-Habla carajo - Dahyun estaba a punto de perder la paciencia y Momo a punto de salir huyendo - Momo, habla o me voy de la puta habitación en este mismo instante - su rostro estaba rojo de la ira.

-Dahyun, tú sabes que te quiero mucho - suspiró tomando fuerza para seguir hablando - y también sabes más que nadie, lo mucho que queria tener un cachorro - sonrío nerviosa, Dahyun estaba con una cara de no dar más - que quería ser madre - le tomo de las manos.

-¿Querías? - su voz salió en un ligero tono triste. Siempre se culpo por ser estéril. - me estás poniendo muy nerviosa - un ligero aroma de tristeza salió de ella.

-Si, quería- su voz tembló - porque...- por más que lo pensara, no encontraba las palabras para decirlo - ahora ya lo soy .

Dahyun no dijo nada, se alejó bruscamente y se encerró en el cuarto de baño.

Llevaba 6 años casada con Momo, y por más que lo intentará y quisiera nunca pudo quedar embarazada. Su peor pesadilla se habia vuelto realidad, se sentía horrible, quería salir, abrir la puerta, y que todo lo dicho por Momo fuera una mentira. Siempre pensó que ese momento llegaría, tarde o temprano, Momo se cansaria de la situación, y buscaria a alguien más con quien tener una familia. Sollozos y leves suspiros salían de la habitación, y una frustración incontrolable la invadió.

Frustada golpeaba la puerta de la habitación, trataba de contenerse y no tumbar la maldita puerta que le impedía ver a su omega. Se culpo, nunca fue buena con las palabras, y ahora su omega estaba con el corazón roto. Quería explicarse, y que el malentendido se aclarara . Deseaba que la puerta fuera abierta, que su Dahyun saliera, y se diera el tiempo de escucharla. Su pecho ardía, los sentimientos de Dahyun siempre la afectaban. Respiro profundo, y se preparó para hablar lo más razonable posible.

-Dahyun- intento sonar calmada - necesito explicar la situación, ¿Puedes abrirme la puerta? - sabía que no era una petición fácil, comprendía perfectamente el dolor de su esposa . No obtuvo respuesta.

-No te enojes conmigo...., Prometo que no es lo que tú piensas - frustada - necesito que me escuches....

No pudo resistir, abrió lentamente la puerta, se había preparado mentalmente para escuchar. Es fruto de sus infidelidades, (pensó). La conocía bien, sabía de todos sus defectos, pero aún así la amaba, y aunque ahora estuviera destrozada no podía negarle nada. Pensó en sí misma como una "tonta".

-Te escucho - su voz salió temblorosa.

-Amor- los ojos de Momo la miraban seria - no es cómo tú lo piensas - le tomo la mano.

-Entonces, ¿No tienes un cachorro con alguien más? - luchaba para hablar sin soltarse a llorar.

-Bueno .... - Momo se arrodilló aún tomando su mano - si, pero yo ni siquiera conozco a su madre - las palabras sonaron peor de lo esperado. Dahyun casi se desmaya. (Ni siquiera sabe quién es la madre) palabra que aparecieron en su cabeza.

-¿Y por eso pretendes que yo lo sea? - no se contuvo y lloro.

-Maldición- la había cagado - no es así, no conozco a ninguno de sus padres - ahora ella era la que estaba a punto de llorar- lo abandonaron, ni él los conoce.

Dahyun trataba de procesar las palabras dichas por su esposa.

-Te prometo- le tomo de ambas manos - que no lleva mi sangre - Dahyun la miro fijamente.

-Lo conocí hoy, y casi como por arte de magia apareció una especie de conexión- suspiro - La hija de Jihyo lo encontró moribundo en el bosque. Se le ocurrió que por ser un lobo estaría mejor conmigo. Llegué a su casa, lo conocí y sentí la necesidad de hacerlo parte de mi familia, nuestra familia - se levantó y tomo el rostro lloroso de la omega en sus manos - esa es la verdad, por favor créeme.

Probablemente la tratarían de idiota, pero estaba creyéndose lo que podría ser una mentira más por parte de su esposa. Algo muy dentro de ella sabía que esa mirada reflejaba la verdad de sus palabras. Las suaves caricias en su rostro le transmitieron un poco de tranquilidad, tomando las fuerzas necesarias se atrevió a hablar.

- ¿Puedo verlo? - hablo lo más tranquila posible.

- por supuesto - dejo un beso en la frente de la omega

Ambas caminaron nerviosas hasta el pasillo. Dahyun apretaba con fuerza la mano de su esposa, mentiría si dijera que la inesperada noticia no la impacto y le provoco cierto sentimiento de tristeza. Sintió en su pecho la alegría de Momo, un sentimiento similar al que sentía cada que miraba uno de esos tontos juegos de fútbol. Y fue ahí cuando supo lo mucho que le emocionaba, tal vez sonaba como una tonta comparación, pero todo aquel que conocía a Momo sabía de su amor por el fútbol.