-"No quiero llegar tarde a verme con esa bella chica". Dice el narrador preocupado.
*Se monta en el carro*
-"Hola, cómo estás, ya voy en camino tengo un regalo para ti". Dice el narrador por una nota de voz a su fiel oyente.
*Llega al lugar*
-"Hola, que tal, ya estoy aquí disculpa la tardanza". Dice el narrador.
-"No importa, lo importante es que ya estás aquí conmigo, te invito un café". Dice la fiel oyente.
-*Cara de sorprendido* "Será un placer bella dama". Dice el narrador
-"Hoy toca rehabilitación, Eli no quedo bien después de la pelea de ayer". Dice el narrador.
Rehabilitación
Eli no fue a terapia por su comportamiento del día anterior, pero sí acudió a su primo, que era mayor que él, para aprender a controlar esa energía destructiva que tenía acumulada, llamada rabia según los demás. Su primo le enseñó a defenderse y empezó a entrenar con él durante unos días para volverse más fuerte y sentirse superior a sí mismo. Esto moldeó la nueva personalidad de Eli, que se vuelve alguien intensamente serio cuando está molesto, tanto que puede causar miedo. Sin embargo, esta es una personalidad que rara vez se ve en él. Con el paso de los días, Eli empezó a manejar mejor sus emociones y aprendió que vive mejor cuando presta menos atención a los demás. Eli se alegró mucho ya que finalmente podía estar tranquilo.
Un año después
Llegó el día en que Eli se iba a graduar e iba a pasar al liceo, un lugar más grande que la escuela donde estudiaba. Estaba asustado ya que su único mentor era su primo. Eli pensó que no tendría mucho miedo, pero solo disfrutaron del día. Según Eli, graduarse es como sentirse viejo. Le daba nostalgia haber pasado por tantas cosas para llegar a ese momento. Durante ese año, no pudo enamorar a ninguna chica ya que era difícil que les interesara un chico como él, cuyos temas de conversación eran solo los videojuegos y las películas de acción. Sin embargo, hizo amigas que le ayudaron a entender más a las mujeres y pasó muy buenos ratos con sus compañeros, algo que iba a extrañar muchísimo ya que se iban a dispersar. No todos iban a estudiar en el mismo liceo. La despedida fue triste, pero Eli les dijo "Nos volveremos a encontrar". Sus palabras en ese momento no fueron con lágrimas, pero sí con nostalgia. Las vacaciones pasaron y llegó el día de la camisa azul.
Día de la camisa azul
Ese día, Eli se sentía raro. La camisa azul no combinaba con nada, parecía un pitufo. Cantar el himno no era nada nuevo, pero no recordaba que fuera tan fastidioso, parecía una orquesta desafinada. Después, al entrar, no encontraba el salón de clases. Cuando Eli entró, no conocía a nadie en ese salón. Fue raro, había un profesor diferente para cada materia y también había que ir a otros salones para ver otras materias. Eli se sintió confundido, pero después se adaptó.
Una semana después
Eli podría acostumbrarse a esto, pero sentir atracción por otra chica es algo que le encanta. Conoció a una morena más alta que él y atractiva. Eli se enamoró de su físico y quiso conquistarla. Al lograrlo, pasó unos días con ella. Los primeros días se perdían en algunos salones, dándose unos besos que para Eli eran de otro mundo. El joven chico aprendió a usar sus manos y a tener esa habilidad única en el beso que le encantaba a esa chica. A Eli le encantaba eso, pero quería conocer más a la chica. Sin embargo, todo se iba tornando raro.
Otra semana después
Eli ya presentía que algo malo pasaba y antes de que ocurriera, le preguntó directamente a la chica qué pasaba. Ella le respondió lo siguiente:
-"Quiero terminar contigo", dijo la chica.
-"No me sorprende, lo sospechaba. Bueno, está bien. ¿Pero tengo una duda, hice algo malo?", preguntó Eli a la chica.
-"No hiciste nada malo, solo que andan chismeando mucho y no me quiero meter en problemas contigo", respondió la chica.
-"No hay problema, gracias por decírmelo", dijo Eli.
Eli ya estaba cansado de no conseguir a alguien con quien pudiera conectar y pasar tiempo de calidad. Se mantuvo distante con las chicas y no quiso intentar de nuevo.
Nueva noticia
Una nueva noticia llegó a la casa de mi abuela, donde Eli ya llevaba tiempo viviendo. Su papá le dijo que se iban a mudar cerca de la localidad, podría ir caminando hasta la casa. A Eli le pareció una gran idea. Le encantaba la idea de mudarse ya que no había hecho amigos cerca de donde vivía su abuela y no le tenía miedo al cambio. Ya era hora de organizar todo para la mudanza, iba a ser increíble.
-"Oye me encanto esta plática contigo mi fiel oyente, pero se me hace tarde para una reunión". dice el narrador despidiéndose.
-"Muchas gracias por venir a contarme, Solecito". Dice la fiel oyente *Sonriendo*
-*Se acerca a ella* *La besa en el cachete* " Bye nos vemos luego mi fiel oyente, cuídate" Dice el narrador.
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A tus pasos - Yeshua Medina
Random"Yo quiero seguir tus pasos, para entender mi camino contigo" Porque no hay nada más bonito que entender de dónde viene tanto dolor en el fondo de tu corazón, tantos años pasando una historia que te hace ser tú. Soy el narrador de tus pasos, para e...