Capítulo 4: Un mal sueño

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Darius se encontraba asombrado y atónito al ver a su antiguo amigo Kenji tocar la guitarra con total facilidad en medio del energético concierto en el patio del colegio. La música resonaba en el ambiente, y la multitud de estudiantes disfrutaba del espectáculo, pero Darius tenía una sola meta: alcanzar a Kenji.

Gritó varias veces para tratar de abrirse paso entre la maraña de personas, pero sus intentos resultaron infructuosos. Finalmente, el concierto llegó a su fin y las luces se encendieron, lo que permitió a la multitud dispersarse. Darius sintió un alivio momentáneo al poder respirar sin dificultad.

Observó cómo el grupo de Kenji se dirigía hacia detrás del telón, pero su amigo se mezcló entre el público que salía por la puerta. Sin pensarlo dos veces, Darius se lanzó en su búsqueda y logró ver la guitarra de Kenji entre la gente. Siguió el rastro hasta los pasillos y entró apresuradamente a un salón de música donde pudo encontrar a Kenji de espaldas, afinando su guitarra.

"¿Kenji?", dijo Darius, haciendo que Kenji se deteviera en seco y dándose la vuelta. Su rostro pasó del asombro a la alegría mientras soltaba una risa de felicidad y asombro. Sin dudarlo, puso la guitarra sobre una mesa cercana y abrazó a Darius, levantándolo del suelo en un gesto de efusiva emoción.

"DARIUS ERES TÚ", expresó Kenji casi asfixiándolo por el abrazo. Después de unos instantes, lo soltó y lo miró con una sonrisa en el rostro, poniendo una mano en su hombro y zarandeándolo cariñosamente.

"¡Mírate! Eres tú, de nuevo aquí. No pensaba verte después de..." hizo una pausa incómoda y su sonrisa se desvaneció un poco. Darius arqueó una ceja, intrigado por la pausa.

"Bueno, de todo eso... En fin, me alegra verte. ¿Qué te trae por aquí?", preguntó Kenji, dando la espalda a Darius para volver a tocar su guitarra en un intento de afinarla.

Darius, extrañado por el comportamiento de Kenji y con muchas preguntas por hacerle, comenzó a indagar poco a poco. "Kenji, ¿desde cuándo tocas en una banda?", preguntó con curiosidad.

Kenji se rió burlonamente, lo que desconcertó aún más a Darius. "Desapareces por un tiempo y me interrogas. Debería ser yo el que las hace", respondió Kenji sin mirarlo, mientras seguía afinando su guitarra.

El tono despectivo de Kenji hizo que Darius se sintiera incómodo. Nada encajaba, y todos parecían estar actuando de manera extraña. "Kenji, siento que algo muy malo está pasando, todo está raro", continuó Darius, tratando de expresar sus inquietudes.

Kenji seguía afinando su guitarra, aparentemente sin prestar mucha atención a las palabras de Darius. "Hoy me levanté y sentí todo raro, el celular no me desbloqueó, el cepillo, y Ben...", iba a continuar, pero una cuerda sonó tan desafinada que hizo que se detuviera abruptamente. Kenji se detuvo también, y su aura pareció volverse sombría.

Darius no podía ver la expresión de su amigo de frente, pero el ambiente se volvió pesado y tenso de repente.

"¿Qué hay con ese perdedor?", dijo Kenji con un tono mucho más serio a diferencia de hace unos momentos. Darius se asombró por el insulto repentino. "¿Perdedor?", se repitió Darius para sí mismo en voz baja, sacudiendo la cabeza confundido, y luego volvió a Kenji.

"¿Qué pasó con ustedes chicos? ¿Discutieron?", preguntó Darius preocupado. "Kenji, siento que algo malo ocurre con Ben. Hoy estuvo metido en una pelea en la entrada y está muy violento."

Kenji comenzó a tocar su guitarra, ahora sí perfectamente afinada, intentando apaciguar a Darius, pero fue inútil. Darius alzó la voz, "Necesito tu ayuda, algo le sucede, ¿dónde están los demás? Brooklynn, Sammy, Yaz?"

Kenji estaba por ignorarlo, pero notó la cara angustiada de Darius. Suspiró y habló, "No sé qué te sorprende. El cambio hace mucho tiempo. Luego de lo que pasó con Brooklynn y tú, Ben no tuvo más compañía que la de Yaz."

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⏰ Última actualización: Aug 03, 2023 ⏰

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