𝗗 𝗘 𝗟 𝗧 𝗔 𝘓𝘦𝘤𝘭𝘦𝘳𝘴𝘴𝘦𝘭𝘭 ||𝘼𝙙𝙖𝙥𝙩𝙖𝙘𝙞𝙤𝙣||

17 - Ya lo sé

De nuevo, en todo el camino hacia el departamento, George no soltó la mano de Charles, aunque esta vez, el omega estaba seguro que era a propósito, porque el otro solía mirarlo cada tanto, sonreírle y dejar un beso en su mano con cariño.

Un domingo temprano, con todo el exterior abrigado en nieve parecía la excusa perfecta para que nadie saliera de su departamento, y los pasillos del edificio estaban tan vacíos que daba la sensación que todo el mundo los habían dejado para que ellos hagan lo que quisieran.

George apenas terminó de cerrar la puerta con llave cuando Charles volvió a lanzarse sobre sus labios, sonriendo y respondiendo al instante, mientras comenzaba a quitarle prenda por prenda al otro, dando pie a que el omega hiciera lo mismo.

El camino hacia el dormitorio fue regado de ropa de abrigo que ahora era innecesaria.

George alzó el cuerpo de Charles, y este enganchó sus piernas alrededor de las caderas del otro, sin dejar de besarlo.

El omega comenzó a frotar su bulto contra la parte baja del estómago de George, haciendo un esfuerzo para llegar hasta el miembro del rubio, provocando que este suelte un jadeo contra sus labios.

George dejó a Charles sobre la cama, de forma suave, pero se sorprendió cuando el omega fue un poco más brusco al girar sus cuerpos, cambiando de posiciones

La sonrisa en los labios de Charles ya no era tan adorable, sino más atrevida.

El chico no le permitió hablar, quitando su remera para luego hacer lo mismo con la de George, para continuar bajando los pantalones y boxers del otro, mirando el falo semierecto con un brillo en los ojos.

George vio cómo el otro se relamió los labios y supo que Charles no pediría permiso.

El omega acercó su boca para pasar su lengua desde la base hasta la cabeza del caliente miembro de George, haciendo que este gimiera bajo, mordiéndose el labio con fuerza.

Charles lamió un par de veces la cabeza, jugando con su lengua con la misma, y con el orificio en esta que comenzó a gotear presemen.

Sintiendo el falo cada vez más duro y erecto, metió todo el largo en su boca, ahuecando sus mejillas, succionando mientras pasaba su lengua sobre el mismo. Escuchaba los gemidos bajos de George, acompañando sus jadeos, que no llegaban a silenciarse del todo por el miembro en su boca, subiendo y bajando, haciendo presión con sus labios alrededor del mismo.

Sintió los dedos de Russell enredarse en su pelo, dando leves caricias en su cuero cabelludo mientras lo ayudaba con el ritmo. George sentía que no iba a aguantar mucho más tiempo sin venirse en la boca de Charles, aunque no le disgustaba la idea ni un poco.

De golpe, Charles se retiró del miembro de George, haciendo que este abriera los ojos, viendo al omega acercarse con una sonrisa pícara, mientras se lamía los labios, notó que Leclerc ya no tenía sus pantalones, quedando ambos desnudos, pero el chico se apoderó de sus labios, creando un beso húmedo, algo salado, y llenó de sensaciones que hizo a George cerrar los ojos para hundirse más profundamente en ellas.

Sin cortar el beso, Charles acomodó el miembro de George en su entrada, húmeda, pidiendo consolarse.

Comenzó a bajar sobre el miembro, soltando un gemido tanto de placer y de dolor por su cavidad aún estrecha.

Ante ese sonido, George abrió los ojos para mirarlo con preocupación, tomando su mano para entrelazar sus dedos.

-E-Estoy bien- respondió Charles con una sonrisa, algo entrecortado por su respiración agitada, sintiendo el cambio de actitud de George.

-No quiero que te duela- dijo el otro, mirándolo a los ojos, dejando una caricia con el pulgar en su mano-. No quiero lastimarte.

Charles sintió su pecho florecer, y no sabía cómo podría haber dudado si George lo quería o no, luego de esas palabras, de eso tono tan suave y de los ojos tan sinceros que se mantenían sobre los suyos.

Besó con una sonrisa los labios de George, no fue un beso como el anterior, este era de puro cariño.

Se separó para acercarse al oído del mayor.

-Quiero sentirte hasta mañana, George- susurró, causando un pequeño escalofrío al rubio.

Esta vez fue George quien tomó los labios del otro, mientras esté continuaba descendiendo por su miembro con lentitud, ahogando los gemidos con el beso.

Aún sintiendo que a Charles le dolía, apretó su mano con protección, callándolo cuando el omega quiso disculparse al morder su labio sin querer cuando el dolor superó un poco el placer, hasta que todo el falo quedó dentro de él.

George sonrió con orgullo, viendo a Charles con el rostro totalmente enrojecidos, los labios hinchados en una sonrisa y el cabello el revuelto, pensando que era la mejor imagen que podía darle.

Moviendo sus caderas sobre George, causando suspiros pesados, hasta que su entrada se adaptó, comenzando a subir y bajar sobre el miembro, de a poco en principio, subiendo un poco más cada vez, dejándose caer cada vez más rápido, más brusco, con ganas de más.

Gimió fuerte cuando comenzó a golpeando en su punto.

Debajo de él, George cerró los ojos, concentrándose en la sensación de Charles saltando sobre su miembro, en los gemidos fuertes del omega, corriéndose dentro de él por segunda vez, escuchando el suspiro de placer del chico al sentir la calidad de la esencia de su alfa dentro suyo.

George abrió los ojos, irguiéndose un poco, con el nudo formándose dentro de Charles, uniéndolos.

Frunció el ceño cuando notó que Charles no había acabado.

Moviéndose despacio, para que el nudo no lastimara a Charles, se sentó en la cama, rodeando la espalda baja del omega, apoyando una mano justo arriba del trasero del chico.

Tomó el miembro de Charles con su otra mano, ganándose una mirada del omega.

-Si llegué, tu también llegarás- dijo George, impidiendo que Charles dijera algo, comenzando a subir y bajar su tacto sobre el miembro del omega, jugando con su glande, girando su mano para tocar de todos los ángulos, haciendo a Charles gemir de nuevo.

Acariciando sus glúteos al mismo tiempo, besando su pecho, llegando hasta las clavículas y debajo del collar, dejando marcas y besos, hasta sentir a Charles tensarse, cortando sus respiraciones-gemidos, y luego relajar su cuerpo a tiempo que su miembro dejaba salir su esencia.

Apoyando su frente sobre el hombro de George, giró su rostro para tocar el cuello de su alfa con su nariz, dejando unos besos en este.

George llevó su mano a su boca, bajo la mirada, entreabierta, de Charles, viendo como el otro limpiaba algo de semen del omega con su boca, lamiendo sus dedos.

Charles sonrió ante ese gesto.

Alzó su rostro para quedar frente al de George, apoyando su frente contra la de este, moviendo su cabeza para frotar sus narices.

El mayor rio con ternura, sentía a su lobo saltar con alegría dentro suyo, ambos estaban felices de estar junto a su omega.

George abrió los ojos para admirar el rostro de Charles con una sonrisa, acomodó sus cabellos, apartando los de su enrojecidos y adorablemente rellenito rostro, besó sus labios suavemente, para separarse a los segundos y volver a mirarlo con admiración.

Charles no podía evitar sonreír al punto en sus ojos eran dos líneas, presionados por sus abultadas mejillas.

sus ojos eran aos lineas, presionados por sus abultadas mejillas.

- Charles- lo llamó el mayor, acariciando sus mejillas dulcemente-, me gustas.

Charles río un poco.

- Ya lo sé, George.

Valió la pena la tardanza?
Cap intensoooo,pero bueno.
Cómo dicen? Ah,si,la calma antes de la tormenta.

09/08/23 23:53 hora Mex