Wild Hearts Run Free ෆ (Traducción)

ෆ VIII ෆ

Doce meses después...

Louis agarra los hombros de Harry, sus dedos se clavan en su piel carnosa mientras Harry lo folla, largo, profundo y perfecto. Louis nunca se cansará de la sensación de Harry consumiéndolo de esta manera, tomando y dando en igual medida para llevarlos a ambos al borde del abismo, antes de caer juntos en pura y desenfrenada felicidad.

Harry se inclina desde donde está flotando sobre Louis, sus bocas abiertas respiran aire caliente en los pulmones del otro. "Te amo mucho, bebé", jadea Harry mientras lo embiste, golpeando la próstata de Louis y arrancando un gemido gutural del pecho de Louis.

Louis se arquea hacia arriba, la punta de su pene roza contra el estómago de Harry y le da esa chispa extra de placer mientras se precipita hacia el borde de su orgasmo; persiguiéndolo, desesperado por alcanzar su punto máximo, pero sin querer que termine al mismo tiempo.

Harry embiste más y más fuerte, empujando a Louis hacia arriba de la cama y Louis golpea la cabecera con las manos para tener más influencia. "Nrrgghh, Haz. Fóllame," suplica Louis, alargando su cuello, descubriendo su cuello y ofreciéndose a sí mismo a su alfa.

Harry lame una raya hasta el lóbulo de su oreja, chupando un moretón en la piel sensible detrás de su oreja, las entrañas de Louis se tensan ante la sensación mientras el placer corre por sus venas.

Sin embargo, Louis quiere más, siempre más, nunca puede tener suficiente de Harry. Podrían follar cada minuto de cada día y aún así no calmarían el deseo que zumbaba permanentemente debajo de su piel; siempre anhelando a este glorioso espécimen de hombre.

Harry levanta las piernas de Louis, descansando sus tobillos sobre sus hombros mientras empuja una y otra vez, agarrando la polla de Louis y acariciándola al mismo tiempo que sus embestidas.

"Joder, se siente tan bien", gime Harry, con los ojos fijos en los de Louis, perforando su alma, la profundidad del verde brillando a la luz de la mañana y haciendo juego con su amado bosque.

"Más, alfa. Quiero más," se queja Louis, sin aliento con la creciente fuerza de los movimientos de Harry, sabiendo que Harry le dará lo que necesita.

"Cualquier cosa por ti, bebé. Lo que sea", dice Harry, estirando la mano por debajo para presionar su pulgar en el agujero de Louis junto a su pene, estirando a Louis increíblemente más y preparándolo para su nudo.

"Oh, joder, joder, joder", canta Louis, con la barbilla apuntando hacia el techo mientras siente el tirón familiar en sus entrañas construyéndose con cada segundo. Su orgasmo lo golpea por tercera vez esta mañana, tomándolo por sorpresa mientras se derrama sobre la mano de Harry y sobre su estómago.

"Eso es todo. Tan hermoso para mí. Mi omega perfecto", Harry elogia y se relaja por un breve momento, lo que le permite a Louis recuperar el aliento, pero sigue apretando implacablemente su próstata.

El omega de Louis nunca está saciado por mucho tiempo, no hasta que obtiene lo que realmente quiere, empujando rápidamente a Louis hacia el borde una vez más mientras espera el nudo de su alfa.

Harry se está acercando, Louis puede sentirlo, la potencia de su aroma aumenta hasta el punto de que se está empalagando en el aire que los rodea, mezclándose con el propio aroma de Louis y la riqueza de su lubricante hasta que cada aliento está entrelazado con la pesadez de su compartida pasión.

"Harry", dice Louis con voz áspera, su voz arruinada por sus constantes gemidos y jadeos. Baja una mano de la cabecera, acunando la mejilla de Harry en su palma, el pulgar acariciando su labio inferior.

Harry lo mira con un ansia tan primaria, tan absolutamente de infarto que Louis sabe que es el momento. Harry sale, volteando a Louis sobre su frente y empujando hacia adentro sin pausa. Levanta a Louis por las caderas y lo pone sobre sus manos y rodillas, los zarcillos del flequillo de Louis no pegados a su sudorosa frente caen frente a sus ojos.