ACOTAR: Una historia del Mating Bond

Cuando Feyre conoció al Círculo Íntimo de Rhysand

Feyre decidió seguir el  consejo de Rhys. Agradeció que Rhys hubiera esperado a que se alejara antes de abrir la puerta.Al principio solo fueron dos voces. Poco después, se les unió una tercera.A las tres voces se le unió una cuarta voz, suave y dulce.

-¿Podéis explicarme porque vosotros tres hacéis  más jaleo que una clase de niños de 3 años?-dijo aquella voz. Una voz que a Feyre le pareció muy maternal. 

-Dile a tu compañero que no me despierte sin motivo-se quejó la voz profunda del macho que Feyre había escuchado la primera vez. 

¿Compañero? se preguntó Feyre. Decidió dirigirse a su dormitorio. Por el camino, se encontró a Nuala Y Cerridwen, quienes la estaban esperando para llevarla a su dormitorio.

¿Quienes son?-preguntó refiriéndose  a las diferentes voces que había escuchado. Dos masculinas y dos voces femeninas y ninguna era Mor.

-Son el Círculo íntimo de Rhysand-le informó Cerridwen ,quien estaba frente al armario para buscarle algo de ropa a Feyre.

-No sabía que los altos lores hicieran las cosas con este nivel de informalidad. admitió Feyre

-No lo hacen-informo Nuala que volvía del baño con un cepillo-Pero Rhysand sí. 

En silencio, Nuala peinó a Feyre mientras Cerridwen buscaba ropa de dormir para Feyre.

-¿C..como pudo sobrevivir esta ciudad?-pregunto Feyre con curiosidad.

-El alto Lord es muy poderoso-informó Nuala con cautela-Ya era lo bastante poderoso  antes de que su padre le diese el manto de su poder.

-¿Pero cómo sobrevivió?-volvió a insistir Feyre

-No nos corresponde a nosotras, contar esa historia-respondió Nuala dejando el cepillo en el tocador.

-¿Os lo pidió ...?-Feyre iba a preguntar a las dos semiespectros si Rhysand les habia pedido que no contase la historia.

-No-interrumpió Cerridwen-El alto Lord no nos pidió tal cosa. Pero lo que él hizo para proteger esta ciudad, es su historia y sólo a él le corresponde contarla o no contarla. Ambas nos sentiríamos más cómodas si el os la contara, puesto que no queremos cometer errores-añadió.

Tras una pequeña siesta, Feyre recibió en manos del alto lord un pequeño tour por  Velaris. Feyre se fijó en una serie de montañas.

-En la del pico del medio está mi otra casa-dijo Rhysand- La Casa del Viento. Esta noche cenaremos allí.

Feyre se sentía furiosa con Rhysand. ¿Cómo había podido aquella ciudad mantenerse intacta mientras el resto de Prythian era saqueado y destruida. Cuando le preguntó porque no se le ocurrió extender esa suerte al resto de ciudades, la voz de Rhysand permaneció en calma.

-Las otras ciudades eran conocidas-respondió el alto Lord con tranquilidad-En cambio, Velaris es secreta más allá de las fronteras de estas tierras. Durante Milenios, Amarantha no la tocó porque ni ella ni sus bestias sabían de su existencia. Nadie en las otras cortes la conocen.

-¿Cómo es eso posible?-preguntó Feyre

-Hechizos y guardias, junto a mis antepasados con la férrea idea de preservar un fragmento de bondad en nuestro desdichado mundo.

-¿Por qué no permitistes abrir esta ciudad a los refugiados?-quiso saber Feyre

-Cuando llegó Amarantha, tuve que enfrentarme a opciones muy duras y no contaba con la ventaja del tiempo-dijo soltando un poco su temperamento, provocando que sus ojos brillasen- Y cuando sea el momento, lo sabrás-añadió anticipándose a la siguiente pregunta de Feyre.